Lily ya estaba un poco más contenta y decidió bajar de nuevo y disfrutar de las vacaciones con sus primos y su mejor amiga. Llegó a la cocina y los vio a todos poniéndose las bufandas y los gorros para salir a jugar en la nieve. Lily sonrió y se puso su bufanda. Fue hacia su amiga y le dio la mano para llevarla al jardín. Le enseñó los gnomos y cómo desgnomizar el jardín. Priscila reía con la forma en que caían los gnomos y se levantaban tambaleándose, pero entonces una bola de nieve golpeó a las chicas en la espalda. Voltearon y vieron a Hugo, James, Zayn y Niall que reían. Las chicas se miraron, sonrieron y empezaron la batalla de bolas de nieve. Estuvieron casi dos horas jugando hasta que empezaron a llegar los padres de los chicos. Fue una bonita Navidad. Todos admitieron, aunque tío Ron fue el más reacio a hacerlo, que Niall era diferente a su abuelo y su padre.
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Pasaron los años y llegó el tercer año de Lily, Priscila y Hugo, quinto de Zayn, Niall y Rose y sexto de Louis. Ya sólo quedaban ellos en Hogwarts puesto que las hijas de Percy, Lucy y Molly, aún no tenían la edad y Fred y Roxane, hijos de George y Angelina, sólo tenían 4 y 2 años. Liam había pedido matrimonio a Victoire y ésta había aceptado, la boda estaba prevista para el verano entre tercero y cuarto curso (Lily), justo un mes después de que terminaran el curso. Pero para eso aún quedaba bastante.
El 1 de septiembre de 2023, Lily estaba preparada para ir a Hogwarts de nuevo. Ese verano había cambiado mucho. Su pelo se había vuelto más rizado y le era más fácil hacerse tirabuzones, sus ojos estaban mucho más brillantes que nunca y sus rasgos eran de una joven casi adulta y había crecido al menos 5 centímetros. Todos notaron esos cambios cuando regresó de pasar un mes en América, con los padres y abuelos de Priscila, Hugo no había querido acompañarlas puesto que sólo pensaban hacer lo que él llamaba “cosas cursis de chicas”. Lily volvió con la piel bronceada y muchas más pecas en su cara que la hacían aún más hermosa. Harry la recogió en el aeropuerto de Londres, ya que los abuelos de Pris seguían sin saber nada sobre la magia y Lily se había tenido que adaptar, de todas formas, no les estaba permitido hacer magia fuera de la escuela, así que no fue demasiado difícil. Harry tomó de la mano a su hija y se desaparecieron cuando salieron de las terminales de Heathrow llegando a Grimmauld Place. Louis y Zayn corrieron a recibir a su hermanita. Zayn le prestaba más atención a Lily desde que se olvidara de su regalo de Navidad, cosa que Lily agradecía muchísimo. Louis había conseguido que Lily pudiera usar su ordenador dentro de Hogwarts con un hechizo descubierto entre tía Hermione y él, aunque Hermione no sabía para qué quería su sobrino tal hechizo, por lo que Lily podía dibujar dónde quisiera y Priscila podía hablar con sus padres y abuelos por video chat.
Durante el siguiente mes, Lily hizo deberes de la escuela y descubrió que echaba muchísimo de menos a su amiga. No era lo mismo hablar con ella por la página muggle de internet esa que le había enseñado a usar en Estados Unidos, una página llamada Fasebuk o algo así, en la que podías hablar con tus amigos y poner fotografías. Aún así, Lily pasaba la mayor parte del tiempo en su habitación escribiendo cartas que enviaba con Hedwig II a un chico de Gryffindor llamado Peter Thomas, hijo de un ex novio de su madre: Dean Thomas. Era un chico de piel negra, como su padre, que iba un curso por delante de la pelirroja. Pero no le importaba, era la segunda vez que sentía algo tan fuerte por alguien y pensaba que podría funcionar. Priscila estaba al tanto de cada carta que Lily enviaba y su correspondiente respuesta. Lily llevaba mucho tiempo sin sonreír, sólo pensaba en Niall, quien seguía con Rose a pesar de que Ronald aún no se fiaba del Malfoy (aunque no sabía que su hija mantenía una relación secreta con él). Lily y él no se habían visto durante ese verano ya que Niall estuvo en Grimmauld Place mientras Lily estaba en América. La primera vez que se vieron, después del asombroso cambio de Lily, fue en la estación de King Cross, el 1 de septiembre. Lily subió su baúl y lo dejó en el compartimento reservado de Hugo y Priscila. Louis había quedado con su novia, aunque él no la llamaba así, sólo Melanie, pero todos sabían que eran novios. Lily y Hugo se despidieron de sus familiares y subieron al tren. Se quedaron en el compartimento y se pusieron al día con lo que habían hecho durante el verano. Estaban riéndose a carcajadas cuando Zayn y Rose, seguidos por Niall entraron en el compartimento. Niall se quedó con la boca abierta al ver por primera vez a Lily desde que terminaran la escuela. “Ha cambiado tanto… Está mucho más hermosa que antes… Pero ¿qué dices? ¡Estás con Rose! No le vas a romper el corazón más a la hermana de tu mejor amigo.” Lily lo observó cuando entró y notó que él también había cambiado. Había crecido algunos centímetros, su camisa se pegaba a su cuerpo y sus brazos eran mucho más musculosos. “Es todo un hombre ya… ¡Lily! Vamos, olvídate de él. Céntrate en Peter.” Pasaron el viaje sin novedades, puesto que todos habían madurado algo y mantenían conversaciones mucho más adultas. Al llegar a la estación de Hogsmeade bajaron los baúles y montaron en los carruajes. Lily y Niall evitaban mirarse. Al llegar al Gran Comedor para el banquete de inicio de curso, Peter Thomas cogió de la mano a Lily y la llevó hasta la mesa de Gryffindor como un caballero. Ayudó a la pelirroja a sentarse y él se puso a su lado. Le dio un rápido beso en la mejilla, a lo que Lily se sonrojó y esperaron al comienzo de la Ceremonia de Selección. Iba a ser un gran año para todos. Para todos, excepto para alguien que observaba a Lily desde la mesa de Slytherin. No podía evitar mirarla. Sabía que Rose se daría cuenta si continuaba, pero Lily era hermosa. Igualmente, ella había elegido a otro. Él tendría que acostumbrarse a verla de la mano de otro hombre, como ella había hecho los años anteriores con él y Rose.