You and me (Percabeth)

Epílogo. Fogatas y Finales.

Capítulo final. (Por favor, ignoren mis escasas habilidades para hacer cuentas regresivas.) 

Las palabras no son más que un recuerdo en el viento.

Dios, qué cursi ha sonado eso. Volvamos a empezar.

No es fácil sentirte comprendido. Hay veces en las que deseamos y pedimos, pero nunca recibimos. Nadie dice que la vida sea cosa fácil, y nadie ha dicho nunca que alguien nos esté escuchando cuando estamos pidiendo. Es cosa nuestra, decidir si pedir vale la pena o no.

Porque aunque no nos demos cuenta, cada pequeña acción que ocurre sirve para algo. Tal vez nadie nos esté observando. Tal vez sí. Pero es interesante pensar que todo pasa por algo.

Tal vez esa persona a la que vemos todos los días en el autobús va a terminar siendo muy importante en tu día a día. Tal vez no. ¿Pero no te llama la atención? Saber que la primera vez que ves a alguien no tienes ni la menor idea de cuánto va a terminar significando para ti. 

Hay veces en los que estos pensamientos no nos dejan dormir por la noche. 

¿Nunca te han dicho que estás exagerando? 

Oh, ya deja de ahogarte en un vaso de agua. 

Lo que pasó no tiene significado alguno. 

Eres joven, no sabes lo que quieres. 

Pero ellos no están en tu cabeza, no tienen idea de lo que estás pensando. 

Puede que tengas dieciséis año y estés enamorado. Nadie puede decidir por ti lo que tu sientes hacia una persona. Y no es necesaria una historia épica, ni un inicio grandioso. 

Tal vez conociste a esa persona en clase. En un viaje. En la fila del supermercado.

Tal vez te chocaste con esa persona en la cafetería de la escuela y uno de ustedes quedó lleno de comida. 

Tal vez sea un chico, una chica... nadie dice que no puedes sentir lo que sientes.

Hay veces en las que nosotros mismos inventamos la historia, es cierto. Tal vez tú sientas algo como un gran acontecimiento y los demás lo vean como una nimiedad. Exagerar no es lo mismo que ver las cosas con tus propios ojos. 

Hay cosas que suceden y ya. No podemos evitarlo. ¿Por qué? No tenemos idea.

Un recuerdo vale oro, y nadie dice que lo que esté pasando en tu cabeza no sea verdad.

Las palabras pueden cambiar la vida de la gente, y nosotros somos pruebas de ello. 

¿Y cuál es el punto de todo esto?

Pues no estamos seguros. Pero los vemos a ellos, sentados alrededor de una fogata. Los hijos de Apolo cantan suavemente y los demás ríen, hablan y asan malvaviscos. Parecen felices. ¿Lo son? Quién sabe. 

El fuego chisporrotea, y las risas continúan. La estrellas brillan en lo alto. El mundo gira. 

Cada uno carga con una historia personal. Cada uno carga con sus preocupaciones. Y el mundo sigue girando. Y tú giras con él. 

No dejes que nadie te diga que te estás ahogando en un vaso de agua. Porque puede que esa persona vea tus problemas como un vaso de agua, pero para ti es el mismo océano. 

Las palabras te definen, te forman una personalidad. Pero depende de nosotros moldearla a nuestro gusto.

Porque la vida no es lo que te sucede, sino lo que decides hacer con esos sucesos. 

Tal vez creas que lo escrito arriba no tiene sentido. Para nosotros tampoco lo tiene. Sólo son un montón de palabras, y tal vez sea el punto de todo esto. 

Porque para nosotros tal vez no signifiquen nada, ¿pero lo maravilloso de todo esto? Es que tal vez, solo tal vez, para alguien estas palabras signifiquen el mundo. 

Las cosas no están del todo bien. ¿Pero cuando lo están? Hay una guerra y una nueva vida, completamente diferente a la anterior, esperándonos.

Tal vez todo esto no haya tenido sentido alguno, y tal vez ese era el punto.

historia terminada el primero de marzo de 2017. 08:23 pm. 

Mariana *_*