PEQUEÑA STEEL

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Narra Karen:

Comimos pizza hasta saciarnos. Luego de eso Carter lavó los platos y sacó la basura, yo buscaba en el catálogo de Netflix algo para ver. Así, entre palomitas y risa, pasamos buena parte de la tarde. No sabía que era lo que pasaba entre él y yo, pero me gustaba poder hablar con alguien. Carter era casi tres años mayor que yo; tener una conversasión con él era demasiado interesante. Lo juzgué mal al inicio, pensaba que era el típico modelito sin cerebro; pero, no es así. Carter es muy inteligente, es muy amable y sensible. Es el tipo de persona que te hace reír con memes, pero también puedes mantener una conversación sobre política y noticias de alta importancia. Simplemente, me encanta tener un amigo así.

La tarde siguió entre risas y más risas. Hicimos de todo un poco, llegada la noche decidimos hornear unos cupcakes y también cocinamos lentejas para la cena. Habíamos colocado música y hacíamos karaokes improvisados de Taylor Swift, yo estaba encantada.

—¿Así que, puedo agregar que eres una increíble soprano a tu lista de talentos?—dijo cuando terminamos de cantar Blank Space
—Ay, por favor, no es para tanto—dije mientras ponía un mechón imaginario detrás de mi oreja.
—Eres muy talentosa—dijo Carter dándome un pequeño golpe en el brazo.
—Karen Danvers—dijo una voz familiar.
—¿Flash?
—Tu prima está muy preocupada por ti, me pidió que te buscará—dijo Barry, llevaba su traje de Flash, entrando por la terraza.
—¿Por qué te envió? ¿Supergirl no estaba disponible?—dijo Carter mientras ponía la música en pausa.
—Supergirl me otorgo está misión, ella está en Metrópolis—dijo Barry.

Intenté leer la mente de Barry, pero estaba bloqueada. Se veía extraño, sentí una vibra muy extraña. Decidí irme.

—Carter, debo irme—dije para luego darle un beso en la mejilla, él sonrió un poco triste.

Luego de eso nos fuimos. Por alguna razón Barry no me llevo corriendo, decidió tomar el asensor. Analizaba a Barry de pies a cabeza, hasta que noté algo raro, sus ojos eran verdes. Aunque no sabía si era mi mente la que me estaba jugando una mala pasada, me sentía débil.

—¿Todo en orden?—pregunto Barry.
—No, no es nada, sólo un pequeño mareo.
—Debe ser la droga, un réplica de la kryptonita, pero más letal—dijo muy tranquilo. Lo miré confundida. —Ya sabes, para la nueva generación de Krypton, una nueva kryptonita.
—Eres un cobarde—dije mientras intentaba buscar apoyo en el asensor. Comenzaba a odiar que Carter viviera en el último piso, y que el asensor fuera tan lento.
—¿Qué demonios estás haciendo?—dijo Barry al notar el agua correr por sus pies.
—Deshazte de la kryptonita, Barry. O será la última vez que respires—dije mientras aumentaba la cantidad de agua. El sistema eléctrico comenzo a fallar.
—No te tengo miedo, pequeña Steel.
—Espero que hayas disfrutado tu vida, Allen—dije mientras me posicionaba.
—Detente, Steel—dijo Barry, su voz temblaba.
—Deshazte de la kryptonita, Flash—grite.
—Jamás.

Narra Kara:

Estaba en la DEO buscando pistas sobre Karen, revisando las cintas de seguridad de las calles y centros comerciales. Un ruido ensordecedor llegó a mis oídos, pero nadie parecía percibirlo. Escuché la voz de ¿Karen? "Deshazte de la kryptonita, Flash". Fue lo que sonó en mi cabeza.

Sin dudarlo dos veces fui hacia el lugar donde ella estaba. Me deje guiar por mi oído, ella estaba en la Avenida Carruso, en edificio lujoso. Vi en el interior del edificio a Karen y a Barry sosteniendo la kryptonita, y a Karen a punto de ahogar a Barry. No sé si deba preocuparme la sed de sangre que Karen está teniendo. Entré rapidamente y separé las puertas. Toda el agua salió, Barry estaba tociendo en el suelo, Karen estaba débil y yo comenzaba a marearme.

—Supergirl, ¿por qué arruinas la diversión siempre?—dijo Barry con hilo de voz. Comenzaba a recuperarse.

—Deberías empezar a ser responsable, Flash—dije, ese comentario hizo que Barry se enojará y arrojará la kryptonita hacia mí. Pero Karen, con la poca fuerza que le quedaba, creo un campo de fuerza que no nos hizo daño.

—Gracias—dije con sonriendo.

—Gracias a ti por venir, Supergirl—dijo Karen. —Me encargaré de esto—dijo mientras quemaba la kryptonita, está se derritió y Karen la congeló. Me di cuenta que la kryptonita dejaba de hacer efecto, quedé sorprendida. Karen salió volando.

Pensé que iba a tener que pelear con Barry, pero él se desmayó. Vi como una espora verde abondaba el cuerpo de Barry y se iba volando.

—Esto aún no ha terminado—dije entre dientes.

* * *

En un lugar desconocido:

—Haré hasta lo imposible para que te reencuentres con tu hija, mi Señor.

Las últimas hijas de Krypton: Comienzos. [P.1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora