Narra Karen:
Volé hacia la DEO, la kryptonita ya no me hacía daño. Estaba agradecida con los ingenieros de la Galaxia que me modificaron y enseñaron como detener las influencias de la kryptonita; también estaba un poco enojada, ¿por qué será que Barry siempre es el afectado?
—Karen, gracias al cielo estás bien—dijo Alex abrázandome.
—Sí, gracias por preocuparte Alex—dije un poco apenada. Me sentía mal por haberme ido, pero no es el momento de abrazos.
—Siempre me preocupo por ti, ahora dime, ¿qué haces en la DEO después de estar desaparecida y no mandar ni un sólo mensaje o contestar una llamada?—dijo Alex furiosa dándome un pequeño golpe en el hombre.
—Te prometo contarte todo, ¿de acuerdo? Por ahora Kara necesita tu ayuda, está en el edificio de la antigua familia Carruso, en la Avenida Carruso. Por cierto, necesito las coordenadas de la Fortaleza de la Soledad—dije mientras colocaba la kryptonita en la mesa. —También tomaré un traje de la DEO—dije para luego salir vestida completamente de negro junto a unas botas militares.
—¿Qué hacer Kara en la avenida Carruso? ¿Y por qué necesitas ir a la Fortaleza?
—A Barry lo volvieron a controlar, yo casi lo mato ahogado—dije amarrando las cintas de mis botas. —Iré a la Fortaleza para asegurarme de eliminar esta kryptonita.
—Tú estás teniendo muchos instintos asesinos—dijo Alex riendo, luego proyecto las coordenadas en mi reloj inteligente.
—Soy hija de Rao, no sé que más decir—dije mientras tomaba la kryptonita. Me despedí de Alex y salí volando.Volé lo más rápido que pude hasta el Ártico, luego cree un túnel subterráneo y oculté la kryptonita. Quisé ver la ubicación, pero la señal fallaba. Así que decidí volar hasta donde mi cerebro recordará. Llegué nuevamente a Gotham City.
Narra Kara:
—Kara, ¿estás bien?—dijo Alex llegando con todas las unidades.
—Sí, Barry no lo está—dije mientras acariciaba su cabeza, él estaba acostado en mis piernas. —Fue el virus, otra vez.
—Necesitamos llevarlo a la DEO. Agente Rodríguez, llévelo con el equipo médico—dijo Alex. —¿Tú cómo te encuentras?
—Alex, estoy bien, ¿dónde está Karen?
—Fue a la Fortaleza de la Soledad. Volverá pronto.
—¿Te aseguraste que descargará las coordenadas?
—No lo sé, tú nunca las descargas.
—Yo conozco el camino—dije seria.
—Mierda, a veces olvido que Karen no es muy buena con el sentido de la ubicación.
—Iré a buscarla—dije sin darle tiempo a Alex de hablar, salí del edificio.Narra Karen:
Volé de regreso a National City, pero como debí de suponer me perdí. Entonces llegué a Ciudad Gótica, he hice conexión mental.
«Bruce, responde, soy Karen Danvers»-dije intentando conectar a Bruce. «Nunca me dijiste que hablar por enlaces mentales fuera uno de tus poderes»—dijo él cuando logré conectar. «Tú nunca preguntaste» «¿Necesitas algo?» «Ayuda para regresar a National City» «Voy en camino»
Bruce había llegado en tiempo récord. Vestía su traje de Batman.
—Sube—dijo mientras abría la nave.
—Gracias, vampirito.
—No hagas que cambie de opinión—dijo en tono serio, reí ante el comentario.Subí al aerodeslizador y logré ver un mapa mundi con el destino planificado para National City.
—Ponte cómoda—dijo Bruce mientras señalaba el asiento del copiloto.
—Esto es extraño—dije sin dejar de mirar la nave.
—¿Por qué lo dices?
—Estoy acostumbrada a volar o correr a la velocidad de la luz. Esto de ser pasajera no es mi especialidad.
—Tú primo hizo un comentario parecido—dijo riendo.
—Supongo que es de familia.
—¿Me vas a contar tu larga lista de poderes?
—Bueno, ¿por dónde empiezo? Tengo los mismos poderes de Superman, pero en mayor escala. Él no podría igualarme en fuerza o velocidad.
—Comprendo.
—También controlo los 4 elementos de la Tierra, puedo hacerme invisible y crear campos de fuerza, y, puedo leer y controlar mentes.
—Es una lista larga.
—Lo sé—sonreí. Noté como una fuerte turbulencia nos hizo perder el control. —¡Bruce!De pronto, empezamos a caer y no sabíamos por qué. Las pantallas no mostraban error alguno.
—Karen, resiste!—dijo Bruce intentando elevar el aerodeslizador.
—¡Bruce, déjame salir! Puedo arreglarlo.
—No saldrás de esta nave.
—Bruce, sé lo que tengo que hacer. Déjame intentarlo.
—¿Tú nunca miras antes de saltar?
—No, yo puedo volar.De pronto la aeronave explotó, estábamos cayendo a la velocidad de la luz. Bruce se había atrapado en el cinturón de seguridad, y en pocos segundos nos vimos estrellados con el acantilado. Mi corazón se detuvo.
***
En otro lugar de está dimensión:
—¡Maldición! Era el murciélago el que debía morir, no ella. ¿Qué se supone que le diremos?
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Las últimas hijas de Krypton: Comienzos. [P.1]
FanfictionKara Zor-El, mejor conocida como Kara Danvers tiene una vida aparentemente normal: una familia y amigos que la aman, un trabajo en CatCo y un amor incondicional a todo lo bueno. Pero en secreto, ella es Supergirl, la heroína de National City. La "n...