GENIO CON "G" MAYÚSCULA

1.5K 86 6
                                    

Narra Barry:

Terminamos de desayunar con Winn y ambos nos pusimos manos a la obra. En lo que yo lavaba los platos él encendía su computadora. Terminé mi tarea y me senté junto a Winn, comenzamos a buscar a Karen.

—Según el rastreador ella está en el Puerto de National City—dijo Winn mientras tecleaba muy rápido.
—¿Dónde queda eso, Winn?
—A 40 km de aquí. Pero, aún no puedes ir.
—¿Por qué no?
—Porque la ciudad es grande y tú aún no la conoces—dijo Winn señalándome con su dedo de manera acusadora. Rodé mis ojos.
—Suenas igual a Kara. Amigo, cuando la encuentre, ella me guiará—dije guiñando un ojo.
—No sé si sueno igual a Kara; pero no puedes ir. Además, Karen no conoce National City por completo, Kara le puso un límite—dijo Winn dando vueltas en su silla.
—¿Y qué propones? ¿Qué esperemos? ¿Qué haremos si ella se mueve?
—Tranquilo, cree un rastreador para tí—dijo mientras me enseñaba un croquis de la ciudad. —Lo instalé en tu máscara, así podrás ver con mayor facilidad el camino a seguir.
—¡Tu eres un genio con "G" mayúscula!
—Gracias, gracias. Ahora, ve por tu traje—dijo Winn.
—Vuelvo en seguida—dije para luego salir a buscar mi traje. Llegué donde Winn para que me explicara sobre las modificaciones que le había hecho.
—Muy bien, para activar a este precioso, necesitas oprimir el botón que está cerca de tú intercomunicador.
—¿Y después de eso?
—¿Ya lo oprimiste?—dijo Winn impaciente.
—Aguarda... ¡Listo!
—Muy bien, tienes que decir en voz alta cuál es tú destino—dijo Winn.
—¿De acuerdo?... Puerto de National City—dije con duda.

Terminé de decir el lugar, y los cristales ya me mostraban el camino que debía seguir. Era como seguir estar en Google Maps, me señalaba con rojo el camino a seguir.

—Esto es genial.
—Lo sé, ahora encuentra a esa alien.
—Te veo en un flash.

Salí del apartamento de Kara, y en cuestión de minutos llegué al Puerto de National City.

—Winn, no la veo. ¿Se habrá hecho invisible?
Aguarda un segundo-dijo Winn por el intercomunicador.
—Como gustes.
Puedes ver que en tus cristales aparecerá el camino nuevamente, es la ubicación en tiempo real.
—Muy bien.

En efecto la dirección había sido actualizada, la seguí y llegué al punto donde indicaban. Pero al llegar no la vi. Sentí como mi cuerpo se tensaba, mi rostro se tornaba pálido y mi respiración comenzaba a agitarse. Sentí una molestia en mi pie, lo levanté y luego vi el causante de mi molestia: era el amuleto de Karen.

—Tenemos un problema.
¿Cuál es?—dijo Winn alterado.
—El amuleto está aquí, pero Karen no. Creo que se le cayó.
Barry, regresa al apartamento. La encontraremos con ayuda de Alex.
—Revisare el perímetro por si las moscas.
Ten cuidado, Barry.

Revisé metro por metro sin tener éxito. Decidí ir a la cordillera de National City, donde llevé a Kara cuando la rescate de caer en el asfalto, donde la conocí por primera vez. Llegué en cuestión de un minuto, no vi nada ni a nadi. De repente todo el polvo se levantaba, pero no había viento únicamente en un pequeño lugar de la cordillera. Me acerqué a investigar. 

Mi corazón latía más rápido de lo normal. Vi a Karen saliendo de lo que parecía ser un portal, hasta que el aerodeslizador se hizo visible. Me quedé escondido para ver lo que pasaba.

—Gracias, Bruce. Estoy en deuda contigo—dijo Karen mientras salía del aerodeslizador.
—Cuando me necesites, no dudes en acudir a mí Kar—dijo un hombre vestido de negro que apenas salía de la puerta. 

Seguido de eso, el aerodeslizador se elevó hasta perderse. Karen lo siguió con la mirada hasta que se volvió invisible.

—¡Karen!—dije mientras corría a abrazarla.
—¡Barry!—dijo Karen a modo de saludo. —Me alegra mucho verte.
—¿Me quieres explicar que demonios es lo que acaba de pasar?
—Fui secuestrada por alguien que se hace llamar Joker—dijo Karen sin preámbulos. —Bruce dice que es peligroso, no lo sé aún. No creo que haya sobrevivido a la explosión que cause. 
—¿Tú estás bien?
—Lo estaré—dijo Karen. 

Iba a responderle, pero nos quedamos en silencio al ver una gota verde, Karen y yo la examinamos a la velocidad del sonido, hasta que la gota se impregnó en mí —¡Mierda, es un virus!—dijo Karen preocupada. Me sentí mareado y con naúseas, apenas escuchaba lo que Karen o Winn intentaban decirme.

—¡Barry, respóndeme!—dijo Karen obligando a que la viera. —Barry quédate conmigo, quédate con Kara. Lo solucionaré.
—Ka...ra—susurre.
—Sí, tienes razón—dijo Karen entre lágrimas. —Vamos a buscarla—dijo mientras me cargaba y me llevaba volando al departamento, ahí también nos esperaba Winn.

***

Jo jo jo, ¡Feliz Navidad! Espero que les guste, un beso enorme a todos💕

Las últimas hijas de Krypton: Comienzos. [P.1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora