Sam.

Capitulo Doce.

La fiesta comenzaba genial, sólo era pura diversión y nada más. Cuando escuche "Hey mama" de Nicky Minaj y David Guetta, mi amiga Ailey se levantó, agarró mi mano y fuimos a la pista.

— ¡Woah! — gritaba todo el mundo.

Cuando empezó la electrónica todos saltamos, yo reía. Al terminar esa canción empezó otra de electrónica.

Me deje llevar por la música que no me di cuenta que Ailey se había ido, la busque por todos lados y no la encontré. Alguien me toco el hombro e hizo que me diera vuelta para ver quién era.

—Hola Zac— le sonreí.

—Sam, estas muy linda— me gritó por la música— ¿quieres ir por unos tragos? — asentí y fuimos a la cocina.

—No pensé que hubiera tanta gente.

—Ni yo— Alex apareció de repente— amigo.

—Hola Zac— miró nuestros vasos, me miró a mí, ay típico de él haciendo de hermano mayor— no te pases Samantha— rodee los ojos y tomé el vaso, el Vodka paso por toda mi garganta haciendo que ardiera mucho.

—Dale viejito, solo toma y déjate llevar, la vida es corta— le digo riendo.

—Okey— tomó y festejamos.

— ¿Y Annie?

—Ella y... yo— se rascó la nuca— rompimos.

— ¿What? Dos años Alex, ¿Qué paso? — pregunté desconcertada.

No entendía nada, yo los veía ya para el casamiento.

—Nos dimos un tiempo en realidad, pero creo que no volveremos a estar juntos.

—Wow, bueno amigo mío, vamos a festejar esa soltería— le tocó los hombros— vamos a bailar, volveremos pronto.
Si claro, Zac irán a buscar hembras, y se fueron dejándome sola. Mi teléfono vibro.

"¿Dónde estás?" — Christian, 21:35 p.m

Suspiro, ¿estaría ahora en esta fiesta?
Ni me atreví a buscarlo, siento que si lo busco me encuentre con alguna imagen horrible que nunca quisiera haber visto.

"En una fiesta ¿y tú?" — 21:36 p.m

"También en una, me pregunto qué es lo que hace una chica con hermoso cuerpo, lindo cabello y un vaso de Vodka en la mano"—  Christian, 21:36 p.m

Mire al frente y él estaba mirándome, estaba sonriendo. Se había vestido muy bien; tenía una remera lisa blanca, jeans negros, zapatos marrones oscuros y un reloj en su brazo derecho.
Con razón larga mil suspiros en las chicas, esta malditamente bueno el imbécil.
Vino hacia mí, caminaba con aire de seguridad, con una sonrisa estúpida. Todas las chicas alrededor lo miraban.

—Sabes que estas muy linda hoy— agarró mi vaso y se lo tomó— aunque siempre lo estas.

—Eh... tu...— no me salían las palabras, no sabía el porqué.

— ¿Nerviosa? — se acercó a mi oído y me susurro— ¿y si hago esto?

Hundió su cara en mi cuello, sólo deposito besos en él e hizo que me estremezca. Cerré los ojos y el siguió subiendo a besos hasta que llegó a mi oreja, me mordisqueo cariñosamente y suavemente el lóbulo de mi oreja.

—Chris...

—Solo quiero que seas mía.

Abrí los ojos, el había parado su acto, estaba completamente roja ya que él me miraba atentamente y estaba normalmente después de lo que había hecho.