Inevitable

Incorregible

La oscuridad es mi nueva amiga. Salgo de la consciencia y la inconsciencia una y otra vez. A veces abro los ojos y la luz me ciega. Reniego de ella y cierro los ojos. Me abandono a la oscuridad inmediatamente. Oigo que me llaman pero no quiero responder. Eventualmente me doy cuenta, ¿es mi mamá? ¿Está llorando? No quiero que mi mamá llore. Mi corazón se rompe cuando ella llora y yo solo quiero abrazarla y consolarla, pero para eso, debo abrir los ojos, debo ser fuerte.

Cuando abro los ojos mi cabeza comienza a martillar, me duele, mis ojos me duelen no puedo abrirlos completamente pero estoy tratando. Una voz dice

- Knox - e inmediatamente siento alivio en mis ojos. Está oscuro pero no tanto como antes. Distingo siluetas, y por fin escucho a mi madre

- ¡Scorp! ¿Estás bien mi amor? - y lo repite una y otra vez mientras me llena de besos. Quiero contestarle, pero no lo logro de inmediato

- Mamá - es lo único que puedo articular y con un enorme esfuerzo

- Aquí estoy, ahora tu papá fue a llamar al medi mago, te analizarán y te vas a poner bien, no te preocupes

Pero claro que me preocupo. Estoy cobrando consciencia y en un arranque de ira y dolor porque Rose me dejó me fui a emborrachar a Horus, recuerdo vagamente lo que hice en este tiempo y claro que no puedo evitar preocuparme. La palabra cruda moral llega a mi y cobra sentido inmediatamente, lo comprendo bien.

No salgo completamente de la inconsciencia, y cuando lo hago deseo no haberlo hecho. El medi mago me explica que por fortuna, mi salud está bien. Estaba sumamente intoxicado con raíces alucinógenas y desnutrido y deshidratado por falta de comida, mi pie estaba hinchado, sanando en una posición incorrecta, pero se pudo recuperar. Tardaron en encontrarme porque estaba oculto en una cueva. Encontraron primero a Serena, que estaba herida e inconsciente en medio del bosque, y después, me encontraron a mi, desmayado en una cueva.

Hasta aquí las buenas noticias. Malas noticias hay muchas. Y el encargado de dármelas fue mi padre

- Te expulsaron de la escuela

- ¿Qué?

- Léelo por tí mismo - dijo tendiéndome una carta membretada de Ilvermorny

Señor Scorpius Malfoy:

Debido a que ha cometido varios quebrantos al reglamento interior del colegio de magia y hechicería de Ilvermorny, siendo entre otros los siguientes:
* Dejar el metro que trae a los alumnos al colegio en medio del trayecto
* Ingerir bebidas alcohólicas siendo menor de edad de conformidad con las leyes de MACUSA
* Causar destrozos y escándalos en la aldea de Horus
* Robo de artículos deportivos y maltrato en propiedad ajena
* Consumo de estupefacientes
* Ataque a la flora y fauna del bosque del monte Greylock
La dirección de esta institución y con apego al reglamento del colegio, le informa, que por la gravedad y la cantidad de faltas cometidas, será sancionado con su expulsión.
Atentamente,

Agilbert Fontaine,
Director

- ¿Me puedes decir exactamente en qué estabas pensando? - dice mi padre evidentemente molesto

- No pensaba, no quería hacerlo de hecho, supongo que se me fue la mano

- ¿¡Supones!? ¿A caso no leíste la misma carta que yo? ¿Por qué demonios saltaste del tren en primer lugar? ¿Y por qué te fuiste a embriagar al punto de que hiciste todo lo demás?