Inevitable

Iluminación

No. Nunca me he sentido con otra chica como con Rose. Y aún con todo lo que Rose me ha gustado siempre, soy un hombre, perfectamente capaz de admirar la belleza femenina, y Rose no es ni por mucho la mujer más bella con la que he estado, es decir, simplemente perdí mi virginidad con dos de las chicas más hermosas sobre la faz de la tierra. Pero después de todo el placer sexual, de toda la excitación, no hubo nada.

Mi siguiente experiencia sexual fue con Rose. Increíble que por fin mi sueño de la adolescencia estaba sobre mi, dejándome tocarla, como siempre había soñado, sólo soñado porque yo en verdad estaba convencido de que el infierno se congelaría antes de que ella me dejara acercarme a ella, y ahora... estaba dentro de ella, y se sentía tan bien... a pesar de lo loca y bipolar que era Rose, a pesar de que yo sabía que ella no era buena para mi salud mental, no pude evitar caer de cabeza en ese abismo, y me quedé atrapado por tanto tiempo... pero estaba viviendo una ilusión, una mentira, ella no quiso quedarse conmigo, ella me dejó y no le importó que yo le suplicara llorando como un marica desesperado que se quedara. Y sólo verla pasar, sólo oler su aroma, sólo rozarla con la punta de mis dedos, me daba un placer mucho más profundo que cualquier relación sexual, porque esto iba no sólo a mi entrepierna, iba también a mi corazón, estrujándolo, confundiendo mi cabeza con sensaciones de felicidad, de euforia, de planes para el futuro, futuro que no existía sin ella.

Cuando enloquecí por ella y la vida dejó de importarme, me enfoqué en cosas vanas y superfluas. Cuando estuve en Durmstrang me acosté con más mujeres de las que puedo recordar, y me encantaba sentirlas debajo de mi, gimiendo mi nombre, mientras enterraba mis manos en su suave y sudorosa piel. Me consolaba pensando que no sentía nada más con ninguna porque no quería sentirlo, no porque no pudiera, pero la realidad es que cuando volví a ver a Rose, tantos años después, con mi corazón roto, con la rabia a flor de piel por lo que mi padre hizo con la memoria de mi madre, todo lo que sentía con ella volvió con la misma fuerza arrebatadora del primer día. Placer, calor reconfortante, sensación de euforia... pero yo no podía quedarme ahí, menos porque ahora sabía que todo era una mentira y una ilusión. Me enojé mucho conmigo mismo por haber caído por ella otra vez.

Y ahora, cuando estamos cerca del fin del mundo, no paro a pensar en nada, simplemente la necesito, no puedo ni quiero pararme a pensar en lo que siento con ella, me aferro con todas mis fuerzas a Rose, que parece ser lo único capaz de reconfortarme en medio de este maldito caos, pero ahora, ella quiere hablar, y me hace preguntas muy difíciles... por supuesto que no he sentido jamás con nadie lo que siento por ella, pero eso no quiere decir que es amor, quiere decir que nuestra química es más compatible y más adecuada que con cualquier otra persona. ¿Me importa Rose? ¿Me preocupo por ella, es decir, quiero que esté bien? Por supuesto, pero me importan otras personas también, mis amigos, Al, Sabrina, Serena, mi tía Daphne, mi padre por alguna extraña razón. No puedo coger con nadie de ellos, salvo las gemelas y Rose, y bueno, sé con quien prefiero hacerlo, pero me estaría engañando al pensar que lo que hay entre nosotros es más que el mejor sexo que he tenido jamás...

La hago mía otra vez, sintiendo como su esencia me llena hasta el fondo de mi alma y aunque sigo estando muy confundido, apenas y estoy terminando de disfrutar mi orgasmo cuando ella se me acerca y me dice

- Puedes engañarte todo lo que quieras Scorpius, pero esto... es especial y es para siempre - y remata mordiendo mi labio inferior

Esa filosofía me gusta más. No es el típico amor eterno, es un "algo" que tenemos ella y yo, claro que es especial, no puedo negarlo, y ¿para siempre? Bueno, no sé, pero me ha acompañado desde los 11 años, desde que la vi por primera vez, lo cual apoya la teoría de que es algo especial. Mi pecho está ardiendo, la miro y siento esa urgencia por decirle algo, algo que sea real y no sea el trillado "te amo", ¿pero cómo lo expreso? ¿Cómo le pongo un nombre a este sentimiento? La miro y la miro y siento esa sensación inundar mi pecho, ese calor, me rindo ante él y lo dejo cubrirme, ella sonríe y pienso ¿a quién quiero engañar? No sólo ella es la más hermosa mujer con la que he estado, es la más hermosa mujer que he visto en mi vida, no es perfecta, pero son sus imperfecciones lo que la hacen ver más hermosa.