Inevitable

Inevitable parte III

Me siento como yo otra vez. Siempre sentí que algo me faltaba, mi vida era muy vacía y ahora está completa de nuevo. Mis sentimientos por Rose me han llenado y aunque lamento cada momento que estuvimos separados, ahora sí no pienso dejar que vuelva a ocurrir. Lo digo mucho, lo sé, pero esta vez siento que será diferente.

Todos en Reickson están sorprendidos por mi recuperación, pues era algo imposible, pero cuando ven que tengo todos mis recuerdos de vuelta, me dan de alta y me voy a tramitar un traslador a Inglaterra junto a Rose y Sabrina. Hace muchos años que no vivo en Inglaterra pero, por alguna extraña razón siento que he llegado a mi hogar.

Aparecemos fuera de una casa, debe ser un barrio de magos, aunque no sé quién viva aquí

- ¿Y dónde estamos?

- Es la casa de Albus

- Oh... que bien, hace tanto que no lo veo

Sabrina se adelanta y me mira de un modo que no entiendo, Rose me toma de la mano, detiene su caminar y Sabrina toca la puerta de la casa mientras Rose carraspea y me dice

- Scorp... ¿recuerdas lo que te dije antes de ir a Monte Greylock?

- Sí, pero... Rose es increíble que creas que yo quiero hacer otra cosa que no sea vivir el resto de mi vida a tu lado. Te amo y eres mi esposa ahora, te debo la luna de miel ¿recuerdas? Quiero mucho a Al, pero si tu quieres, nos vamos ahora mismo

- No, creo que eso no será posible Scorp. Me encantaría, no me mal entiendas, pero pasó algo mientras tú no estabas y hay alguien a quien quiero presentarte

- ¿Alguien? - por un momento dejo de respirar. ¿Rose tiene otra pareja? Yo no he sido un santo pero en mi defensa, no recordaba estar casado

- No te preocupes, te va a encantar, ella es maravillosa

- ¿Ella? - cada vez entiendo menos, pero Rose me guiña un ojo y me toma de la mano mientras caminamos dentro de la casa

Ahí está esperándome Al, con los brazos cruzados sobre el pecho, a su lado, la chica francesa del intercambio con un redondo vientre de embarazo y un bebé en sus brazos. Sabrina está sentada en la sala, tomando una bebida como sin nada

- ¡Al! - voy hacia él y lo abrazo emocionado

- Hermano.. me da gusto saber que estás de vuelta, en todos los sentidos. Quise ir a verte de inmediato al hospital cuando te encontraron, pero nos pidieron que no te abrumáramos, además, estábamos cuidando a la pequeña

- Oh, si felicidades, ¿Cyliane, cierto? Tienen una bonita familia aquí

Rose se adelanta y toma a la bebé que Cyliane está cargando, la llena de besos y se acerca de nuevo a mi

- Scorp... ella es Casiopeia Malfoy, es nuestra pequeña

Literalmente sentí el corazón brincar hasta mi garganta y las lágrimas se agolparon en mis ojos, la pequeña sintió el ajetreo y abrió sus ojos y me miró con curiosidad, se revolvió algo incómoda y Rose la puso en mis brazos. Me siento incapaz de moverme, estoy atrapado en los ojos grises de esta pequeña, que finalmente se acomoda en mis brazos, hace una curiosa mueca que se asemeja a una sonrisa y se vuelve a dormir

- ¿Es... nuestra? - pregunto finalmente

- Si. Me quedé embarazada antes de que te llevaran, ella es maravillosa, me ha ayudado a sobrellevar tu ausencia. Yo quisiera que estuviéramos juntos los 3 ahora, que fuéramos una familia, pero no quiero presionarte. Quería presentártela porque es tu hija y tienes derecho a involucrarte en su vida, independientemente de lo que pase entre nosotros...