CAPÍTULO 9

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NARRA DULCE MARIA ESPINOZA

Las clases habían terminado y era hora de comer, con May íbamos camino hacia la cafetería, cuando mi celular sonó. Era mamá.

-Dulce: ¿Hola?; conteste

-Hija; sollozo, me preocupe; ocurrió algo con Jessica; Dios, mi pequeña.

-Dulce: Mamá, ¿Qué ocurrió? Dime!; dije desesperada.

-Ella, y...yo hija, ella cayo, intentaba caminar sin el aparato y cayo y se dio un golpe muy fuerte en la cabeza; dijo llorando, esto no podía ser cierto, mi bebe estaba mal.

-Dulce: ¿Qué? No, mamá, no me digas eso, ¿Cómo está? Dime que está bien; dije con los ojos llenos de lágrimas.

-No...no, ella, ¡Ella no despierta!, los doctores dicen que esta grave, el golpe fue muy fuerte, ¡Hija! Los doctores dicen que tal vez no, tal vez no...; no pudo terminar debido a que empezó a llorar desgarradoramente. No.

Yo empecé a llorar aún más, no había notado que May estaba e mi lado abrazándome.

-Dulce: Mami, no, mi bebe no!; lloraba; Necesito, mami, necesito estar ahí, necesito estar con ella.

-Hija, yo sé que la universidad es importante, pero... te necesitamos, tu papá, Jessica, yo, te necesitamos, tienes que venir; suplico.

-Dulce: Iré mami, ne...necesito buscar boletos, en este mismo instante iré a comprarlos, si es necesario gastar todo mi dinero, lo hare, necesito estar con mi pequeña.

-Está bien hija, regresa, tal vez; ella rompió en llanto; Tal vez sea la última vez qu...; no la deje terminar.

-Dulce: No digas eso! No, por favor, ella estará bien, lo sé, ella es fuerte; dije llorando fuertemente; Necesito colgar, iré a buscar los boletos, te marco en un rato mami, te amo y tenemos que ser fuertes, dile a papá que sea fuerte por favor, los amo; dije y colgué.

En ese instante me eche a llorar en los brazos de May que no sabía que hacer

-Mayte: Dul, por favor, dime que pasa; dijo May desesperada mientras me abrazaba, me separe de ella para verla.

-Dulce: Jessica, mi bebe, está mal, muy mal; dije llorando, ella me miro preocupada; Se cayó, y y... yo necesito ir a San Diego cuanto antes, necesito estar con mis papas y con ella; solloce.

-Mayte: Lo siento tanto Dul, cualquier cosa en que te pueda ayudar, aquí estoy; dijo tomando mi mano.

-Dulce: Gracias May, necesito ir a comprar los boletos para el viaje ahorita mismo, ¿Me acompañarías? Sé que tenemos clases, pero...; me interrumpió.

-Mayte: Shh, no digas más, claro que te acompaño; sonrió; Anda vamos; nos paramos y caminamos hacia las salida de la universidad.

Esto no me podía estar pasando, mi pequeña, mi bebe, en este momento esta sufriendo, ella es indefensa, ¿Por qué?

Si ella llega a... no, ni siquiera tengo que pensar en eso, mi bebe es fuerte, lo se. Aunque si eso llega a pasar, yo me muero, me muero con ella.

Jessica tiene que luchar, lo hará.

El OdiosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora