29.- Ofrecer estrellas.

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POV Lauren.

Desperté sintiéndome mejor que cualquier otro día antes, regresando al pasado por unos minutos, sabiendo que Camila estaba dormida sobre mi pecho y había estado así toda la noche.

Por un momento pensé que estaba mal, pensé que, tal vez, debería salir de la cama y alejarme hasta que todas estuvieran despiertas, pero no, hacer las cosas mal a veces es lo mejor que podemos hacer.

Recibí un mensaje cinco minutos después haberme despertado, estiré el brazo para alcanzar el celular, pero fue un movimiento fallido, así que lo dejé en su lugar y seguí en la posición inicial.

Me tomé el tiempo de observar el cuerpo de Camila en total relajación, profundamente dormida, soñando con un mundo que algún día me compartió.

Comencé a jugar con un mechón de su cabello que estaba separado del resto, aproximadamente cinco minutos después, entró Ally a la habitación, extrañada de que Camila no hubiese dormido con ella en el sofá de la sala.

-¿Mila?- Preguntó entrando a la habitación silenciosamente.

Estaba mirando hacia la puerta, así que, lo primero que Ally pudo ver, fue mi cara, que era entre sorpresa y preocupación.

-Está dormida...- Traté de disimular el hecho de que, exactamente, estaba dormida, pero sobre mí.

-Sí, veo que durmió bien, bueno, ambas durmieron bien.- Sonrió pícaramente y se acercó un poco más a mí.- Aunque... ¿crees que es correcto?, ya sabes, Lucy...

-Hacer lo correcto toda la vida te deja sin posibilidades de vivir lo que realmente vale la pena.- La interrumpí y ella sólo sonrió.

-Aún te quiere.- Dijo Ally con una pequeña sonrisa en la cara.- Tiene todos tus poemarios, cada día lee algunos poemas de ahí, recuerda cuando aún estaban juntas, a veces llora, a veces sonríe, pero siempre contigo en la mente...- Se detuvo por un momento.- Ella dice que ya te superó, que ya no eres importante en su vida, pero, sé que miente, desde que te fuiste, no ha salido con nadie, se niega, porque cree que es traicionarte, y ahora está aquí contigo, si te hubiese superado, ni siquiera te hubiera mirado ayer.- Finalizó.

-Aún me quiere...- Dije para mí misma.

-¿Y tú la quieres a ella?- Preguntó Ally con una sonrisa.

-¿Quieres la verdad o la mentira?- Le pregunté con una sonrisa en la cara.

-La verdad.- Pidió.

-Sí.- Y sonreí una vez más.

Después de esa pequeña conversación, Ally salió de mi habitación, diciendo que despertaría a Dinah y a Normani, tan solo unos minutos después, Camila se despertó, tratando de identificar dónde se encontraba, y cuando levantó su mirada hacia mí, sonrió.

-Buenos días, Lern.- Me dijo Camila con su gran sonrisa.

-Buenos días, Camz.- Le contesté.

-¿Algún plan para hoy?- Preguntó jugando con mis dedos, aún recargada en mi pecho.

-Podemos pensar uno juntas.- Le respondí, también jugando con sus dedos.

-Me parece una buena idea.- Se detuvo por un momento.- ¿Crees que ya estén despiertas las demás?

Justo cuando iba a contestar, un ruido sonó en la habitación, era la puerta abriéndose de manera brusca, indicando la llegada de las demás chicas.

-¡Buenos días, Camren!- Gritó Dinah, pasando a la habitación y deteniéndose en seco al vernos en la posición que estábamos.

-Dinah...- Traté de cambiar el tema.

-Acaban de darme el mejor recuerdo de toda mi jodida existencia.- Me interrumpió.

-¡Camren vive!- Gritó Normani después de que Dinah hablara.

-¡Camren es real!- Salió de la habitación gritando Dinah.

-¡Camren!, ¡Camren!, ¡Camren!- Salían Normani y Ally detrás de Dinah.

-Acabamos de crear una rebelión.- Le dije a Camila riendo.

-Siempre lo hemos hecho, es increíble.- Contestó Camila.- Espera... ¿esto no te traerá problemas con Lucy?

-¿Lucy?, no lo creo, ella siempre quiso que nuestra amistad renaciera, así que, no me traerá problemas, seguro se unirá a las otras tres cuando llegue, en unos días.- Ambas reímos ante eso.

-¿Crees que pueda utilizar tu baño?- Me preguntó un poco apenada.- Sigo con la costumbre de bañarme cuando me levanto.

-Mi casa es tu casa.- Repetí la frase y sonreí, otra vez.- Adelante.

-Gracias.- Dijo con una sonrisa y se encaminó hacia el baño.

Recordé que mi celular había sonado anteriormente, así que lo tomé y revise de quién se trataba, era un mensaje de Lucy.

"Hola, Laur.
Mamá está bien, sólo fue un pequeño ataque, pero todo está bien.
¿Sabes?, te conozco muy bien, realmente, sé que dormiste con Camila, no me molesta, nunca me molestaría, siempre supe que seguías enamorada de ella.
Te quiero tanto que tu felicidad hace la mía.
Ve por ella, tantas veces que soñaste con la oportunidad y se te está presentando ahora.
Me conformo con tu amistad, con que sigas viviendo en la misma casa que yo.
Te amo, Lauren, y sí tú me amas a mí, ve por ella.
Con cariño: Lucy."

Me quedé perpleja ante el mensaje, y supe que Lucy era completamente sincera cuando decía algo, ella siempre se conformaría con seguir en comunicación conmigo.

Ella se merecía planetas y galaxias, y yo sólo podía ofrecer estrellas.

Me apresuré a salir de mi habitación para contarle a las chicas sobre el mensaje de Lucy, ellas apoyaron que debía recuperar a Camila, aunque me tomaría un poco de tiempo el poder hacerlo.

No quise decirle nada a Camila sobre el mensaje.

Dinah y Camila se fueron al hotel donde se estaban quedando por todas sus cosas para quedarse en mi casa, mientras que Normani y Ally iban a la casa en donde estaban para hacer lo mismo, había bastante espacio para todas.

Ése día decidimos ir todas juntas a un parque que estaba algo alejado de mi casa, para poder compensar todo el tiempo que estuvimos separadas.

-¿Hay algún lugar para comer por aquí?- Preguntó Dinah mientras se recostaba en las piernas de Normani, que estaba sentada en la pequeña manta que colocamos sobre el pasto.- Creo que mis tripas terminarán comiéndome pronto.

-Hay un lugar de hamburguesas y esas cosas chatarra, ¿te parece si vamos?- Le respondí a Dinah.

-Vamos, yo te sigo.- Dijo mientras se levantaba de las piernas de Normani, y ayudaba a ésta a levantarse, cuando lo hizo, dejó un beso en sus labios.

-Eso es tan lindo...- Le dije a ambas mientras se separaban.

-Ustedes podrían estar igual, par de idiotas.- Dijo Normani señalándonos a Camila y a mí.

Ignorando eso último, dirigí a las chicas hasta el lugar antes mencionado, cuando terminamos de comer, regresamos al parque, volvimos a acomodar la manta y nos acostamos todas sobre ella, ya estaba oscureciendo, y yo solamente esperaba las estrellas.

-Mira, Camz, ahí está nuestra estrella.- Señalé hacia la estrella que más brillaba.

-Vaya, es la primera vez que la veo desde hace años...- Dijo mientras tomaba mi mano y la apretaba.

-Nunca se irá, lo prometo.

Y aunque algunas promesas no se cumplen, ésta era de las pocas que seguiría en pie para siempre.

Un poema.- Camren.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora