Un poema.- Camren.

21.- El resto de mi vida.

POV Camila.

Antes de éste día, miles de veces pensé que jamás volvería a dormir con Lauren, desperté al sentir sus labios sobre los míos.

-Buenos días, Camz.- Dijo Lauren separándose del beso.

-Lolo, buenos días.- Le respondí con una sonrisa.

-¿Lista para el día de hoy?- Me preguntó mientras jugaba con mis dedos como lo había hecho anoche.

-¿Hay algo especial hoy?- Pregunté dudosa.

-Realmente no, pero podemos hacerlo especial.- Me contestó y volvió a unir nuestros labios.

Nos levantamos y le indiqué a Lauren que me bañaría primero, ella asintió y se recostó un rato más.

No tardé mucho, después de que saliera, Lauren entró.

Pasamos un rato más en su casa y después salimos a comer.

-¡Hey, Camren!- Escuchamos a la distancia.

-Dinah, Ally, Normani, qué bueno verlas por aquí.- Dijo Lauren mientras las chicas se acercaban hasta donde estábamos nosotras.

-¿Ya se reconciliaron?- Preguntó Normani pensativa.

-¿No es obvio, Mani?- Se dirigió Dinah a Normani.

-Me alegro muchísimo por ustedes dos, chicas.- Nos dijo Ally.

-Gracias, Ally.- Le respondí y le dediqué una sonrisa.

Decidimos que las cinco pasaríamos el día juntas para celebrar que mi relación con Lauren estaba mejor que antes.

Pero como siempre, después de la felicidad, viene el tormento de nuevo.

-Hey, Lauren, te vuelvo a encontrar, ¿eh?- Esa asquerosa mujer.- Vaya, ¿se reconciliaron?- Dijo mirándome detrás de Lauren.- Qué triste, ya no tendré a Camila para mí solita.- Imitó una cara triste.

En un segundo, el puño de Lauren se encontraba sobre la cara de Ariana, seguido de varios golpes.

-¡Basta, Lauren, tranquila!- Gritaba Dinah mientras intentaba separar a Lauren de Ariana.

Al detenerse, Ariana se puso de pie, pues no parecía querer rendirse ante Lauren.

-¿Es todo lo que tienes?- Le preguntó retándola.

-Cállate, asquerosa perra.- Contestó Lauren.

-¿Vas a dejar que me hable así, Camilita?- Me preguntó Ariana, ignorando lo que Lauren acababa de decir.

-Cállate, asquerosa perra.- Repetí lo que dijo Lauren.

Al decir eso, Lauren volteó a verme y me dedicó una linda sonrisa, yo le devolví el gesto.

-No puedes mentir, Cabello, sientes lo mismo que yo siento por ti.- Dijo Ariana.

-¿Quién eres tú y por qué tratas de arruinar Camren?- Dijo alguien a mis espaldas, mientras se acercaba a Ariana.- Tal vez no lo sepas, pero son mi pareja favorita.- Se acercó más.- Bien, ahora lo sabes, así que aléjate.

-¿Troye?- Pregunté, pues me sorprendía que estuviera ahí parado, ayudándonos.

-¡Hola, Camila!- Me saludó con la mano y una gran sonrisa.- ¡Hey, Lauren!- Saludó a mi novia.- ¡Dinah!, ¡Normani!, ¡Ally!- Su sonrisa se hizo más grande.- Y tú, maldita basura.- Se dirigía a Ariana.

-Gracias, qué lindo.- Respondió Ariana en tono sarcástico.- Bien, tuve suficiente por hoy, pero te veré pronto, linda.- Me guiñó el ojo.

-No, gracias, qué asco.- Le respondí.

Después de que Ariana se alejara, las chicas, Troye, Lauren y yo, buscamos un buen lugar para comer, pues el hacer coraje un día de felicidad no era lo mejor que podría pasar.

Después de comer, Lauren llamó a su casa y nos informó los próximos planes.

-¿Tienen cosas importantes que hacer?- Preguntó, todos negamos con la cabeza.- Excelente, porque se quedarán a dormir en mi casa.

Festejamos el tener un nuevo plan para seguir celebrando.

Al llegar a casa de Lauren, lo primero que hicimos fue poner música a todo volumen, sin importarnos nada, y media hora después, llegó Lucy para festejar con nosotras.

Bueno, eso era lo que yo pensaba.

-Lauren, ¿podemos hablar un momento?- Le preguntó.

-Claro, Lucy, vamos.- Le respondió a Lucy.- Ustedes sigan la fiesta, yo no tardo.

Algo no me cuadraba.

POV Lauren.

-Tengo algo muy importante que decirte.- Se le notaba nerviosa.

-Dime, Lucy, ¿qué sucede?- Quería saber qué era lo que pasaba.

-Sé que ahora estás con Camila, y que eres feliz con ella...- Esto no pinta bien.- Pero simplemente no puedo seguir guardándome esto.

-Está bien...- Respondí, ya sabía qué era lo que seguía.

-Me gustas, Lauren, desde el primer año de preparatoria.- Sí, lo sabía.

-Lucy, yo...- Traté de contestar.

-No, Lauren, no.- Me interrumpió.- No quiero arruinar tu relación con Camila, sólo... necesitaba decírtelo.

-¿Te quedarás?- Pregunté desviando el tema.

-Por supuesto, tengo que celebrar la felicidad de mi mejor amiga.- Había un brillo en sus ojos cada que me veía o hablaba de mí.

Ahora lo entendía.

Ella realmente me quería; lástima que no todos los amores puedan ser correspondidos.

-¿Listas para seguir festejando?- Pregunté regresando junto con Lucy donde las chicas, y Troye.

-¿Listas?- Me preguntó Troye imitando una cara de enojo.

-¿Eso te molesta, acaso?- Le seguí el juego.

-De hecho no, me agrada.- Y sonrió, como siempre lo hacía.

Vimos dos películas, preparamos palomitas, fue una noche increíble.

-Te toca Dinah, ¿verdad o reto?- Preguntó Ally.

Estábamos jugando lo típico de todas las pijamadas, que, a pesar del tiempo que tenía dicho juego, seguía siendo divertido.

-Verdad.- Respondió Dinah, era la segunda vez que respondía esto.

-¿Desde cuándo comenzó una relación entre Normani y tú?- Preguntó Ally y Dinah se quedó pensando un momento.

-Desde que regresaron a Miami.- Contestó.- Algo dentro de mí se revolvió al verla, y supe qué pasaba.- Concluyó.

-A mí me pasó lo mismo.- Dijo Normani mientras se sonrojaba y sonreía torpemente.

-Son la pareja perfecta.- Les dije mientras apretaba mis cachetes con mis manos.

-Tú y Camila son la pareja perfecta.- Dijo Lucy, luego me sonrió y el brillo en sus ojos seguía presente.

Seguimos jugando hasta que el sueño nos venció, acomodamos varias sábanas y nos acostamos en el suelo, todos estábamos ahí, Normani con Dinah, Ally se había quedado con Troye y yo estaba con Camila, me sentí un poco mal, pues habíamos dejado a Lucy sola, pero ella indicó que así se sentía mejor, así que, por otro lado, estaba bien.

Éste había sido un día absolutamente lleno de emociones y sentimientos revueltos, olvidando el problema con Ariana, había sido uno de los mejores días de toda mi vida

-Te amo.- Le susurré a Camila y la besé.

-También te amo.- Me contestó.

Podría hacer esto por el resto de mi vida.