My Own Moon

Eres Mio

—Namjoon....mmh~ d-detente..

Namjoon tenía acorralado a Jin, había invitado a Jin a su departamento para poder pasar un tiempo con el, para poder estar solo los dos, pero cuando abrió la puerta y entró el mayor, felicidad no fue lo único que sintió.

—Solo mío maldición....

El menor gruñía entre los besos, quería marcar a Jin y que todo el jodido mundo se diera cuenta que Jin no sería de nadie más.

¿Pero, que fue lo que hizo que Namjoon ahora estaba tan enojado? Fácil, Jin tenía el olor de alguien mas, al parecer un alfa.

¿Quién era ese alfa? Nadie más ni nadie menos que Jungkook, el pequeño de 16 años, aunque alguien no consigue su olor después de los 18, hay casos en donde consigue tu aroma y posición en la jerarquía un poco antes, y el pequeño Jungkook era uno de ellos, cuando beso los labios de su hyung, sintió como algo en el despertaba y aullaba, como si hubiera estado esperando el momento en salir, el lobo de Jungkook, fue SeokJin quien lo despertó.

—Basta Nam!.—El mayor lo tomo de los hombros y lo separó, no es que no le gustará besarlo, pero lo están dejando sin aire y solo lo besaba con brusquedad y ira, lo hacía por haber sentido el olor de otro alfa, y Jin no quería que lo besara por qué pensó que había estado con alguien más.

—Yo no quiero dejar que nadie te toque, mierda Jin, como es que un alfa-

—Déjame explicar, ese alfa fue Jungkook.

—.....El cachorro que parece conejo?

—Si, pero escucha....no creas que tengo su olor por algo extraño.....el me beso, es un niño así que es normal que haya querido intentar algo conmigo, siempre estuve con él, pero aún así, no me besó por qué yo haya querido, de acuerdo?...no quiero que te des ideas, solo quería que supieras que yo.....que yo...no haría nada...si no eres tú..

El mayor agacho un poco la cabeza avergonzado, sus mejillas estaban algo rojas, además de que estaba algo preocupado. ¿Y si Namjoon no le cree y lo toma por un cualquiera? No quería que Namjoon se enojara.

—Está bien.

El mayor miro los ojos del menor, estaba sonriendo mostrando sus hoyuelos y mirándolo fijamente, cuando escucho esas palabra solo volvió a agachar la cabeza y sus ojos comenzaron a picar, no esperaba escuchar eso, sonaba como si no le hubiera creído ni una palabra.

El menor se dio cuanta de la posición tan triste y angustiada del mayor, su cabeza gacha y sus piernas temblando, como si Jin tuviera sus ojeras hacia abajo y la cola entre las piernas.

Namjoon se acercó a Jin con su mano elevó un poco la cabeza de Jin, posición su nariz en el cuello del mayor y comenzó a olerlo y dando pequeñas caricias con su nariz en su cuello, el olor a tristeza y angustia se fue y ahora estaba más relajado.

El mayor movió un poco su cabeza permitiéndole más espacio, le gustaba el contacto, se sentía relajante, y cómodo.

El alfa se separó y él omega se acercó a abrazarlo, escondiendo su rostro en su cuello, oliendo él hermoso olor a petricor y bosque, el alfa acaricia la cabeza de su omega para calmarlo un poco.

—No estoy enojado, te conozco Jin, está bien, en serio.

Sus palabras sonaban calmadas y comprensivas, Namjoon jamás pensaría algo incorrecto de Jin, siempre lo perdonaría.

Pero eso no quita a él hecho de que se habían acercado a su omega.

Aunque intentará actuar calmado, sentía dentro suyo rabia y quería marcar a Jin como suyo rápido, no porque estuviera urgido, no, quería que Jin fuera suyo, quería tener a Jin y estar siempre con el, y lo mismo con el, quería que Jin supiera que él nunca se iría de su lado.

Se separó un poco de su mayor y le dio pequeños besos en sus labios para después darle un beso profundo, Namjoon acariciaba el cabello del mayor, por tanto movimiento ambos terminaron en el sillón, Jin a horcadas de Namjoon, ambos besándose, sus lenguas se tocaban y parecía que siempre estuvieron esperando el estar juntos, sus labios se movían en sincronía, Namjoon succionaba y profundizaba tanto el beso que se podía notar pequeñas marcas en las mejillas de Jin por la fuerza ejercida, Jin acariciaba el pecho del alfa mientras que el menor le acariciaba los muslos y apretaba de ellos.

Namjoon no soportaba más, el tacto de Jin en su cuerpo, su olor, sus labios y sus palabras, toda su maldita presencia era perfecta, y solo incrementaba el problemita en sus pantalones, no sólo era eso, se sentía como un maldito animal, que gruñía y solo necesitaba estar con Jin, acoplarse con el, marcarlo, que sea suyo, nunca sintió nada de eso con nadie, Jin era perfecto, Jin era su destino.

El mayor se paró rápidamente y miro al menor con su cara roja y avergonzada, para luego salir corriendo de la casa del menor sin ningún tipo de explicación.

—Es en serio?