PV Asa
10 Noviembre 1943
Querido Asa, espero que te este yendo mejor allí. No se si te ha pasado pero ahora desde que hablo contigo me siento mejor, eres de los pocos que me animan, gracias. Por otra parte ayer mi hermana Diana cumplió 18 años, estuvo muy bien ójala hubieras estado, bueno para el próximo seguro que estarás. Suerte
Desde que hablo con Tom estoy mucho mejor, no se lo he dicho aún pero espero decírselo pronto, ese chico ha conseguido hacerme reír con algunas cosas que me cuenta, me gustaría tanto verlo en persona. Espero salir de aquí cuanto antes.
Hoy mientras trabajaba uno de mis compañeros se desmayo, intente ayudarle pero como paré de trabajar me pegaron. Después de aquello no dije nada, seguí trabajando, ya no me revelo, solo hago lo que me dicen para poder salir de aquí algún día. Por otra parte Charles está muy extraño conmigo, hace días que no me habla y algunas noches se queda observándome, esto me está incomodando, no se si contarle algo a Tom, sino lo dejaré pasar por unos días a ver si se le quita.
Mientras estaba acostado en mi cama Charles se me acercó, comenzó a mirarme todo el rato y más tarde contestó.
-¿Con quien hablas?
Le miré extrañado, ¿a que se referirá?
-Yo no hablo con nadie
-Mentiroso
-¿Que dices?
-Vi las cartas, vi lo que tienes debajo da la cama, las escondes ahí
-Como te atreves a mirar mis cosas. Dije muy enfadado
-Me estaba asegurando de que no hicieras ninguna tontería, pero ya veo que la has echo
-Yo no he echo nada malo
-Si que lo has echo, te has puesto a hablar amigablemente con un Alemán
-¿Que tiene eso de malo?
-¿Que tiene? Por culpa de ellos estamos aquí y no en libertad, son monstruos
-Él no, el es mi amigo
-¿Como va a ser tu amigo, es que acaso crees que te va a ayudar, el ahora seguro que se está riendo de ti, no le importas nada.
-Él no es así, el es bueno y quiere ayudarme
-No va a hacer nada, ya lo verás
-Él también ha sufrido, sabe como me siento y me va a ayudar
-Él no sabe como te sientes no le importas nada y eso de que ha sufrido será mentira, ellos están viviendo como reyes.
-Él también sufre, su padre ha ido a la guerra y no sabe si sigue vivo. Además casi no tienen para comer, su madre debe trabajar el doble para poder alimentar a él y a sus hermanas, así que no digas que es mentira y que no sufre porque sí lo hace, lo hacemos todos.
Charles bajó la mirada y se quedo un rato contemplando al suelo más tarde me agarró del brazo y comenzó a hacerme daño.
-¡Que haces! Grité
-Me da igual lo que sufra ese chico, como alguien se entere que estas hablando con él tendrás muchos problemas y seguro que perjudicaras a los demás con tus tonterías, así que para de hablar con él.
Entonces me aparté fuertemente de él
-¡Nunca me oyes, nunca! ¡El es mi amigo!
-No, no lo es solo se aprovecha de ti
-¡Cállate! ¡Tu no entiendes nada!
-Cuando sepa de donde salen esas cartas veras
-Nunca lo sabrás me oyes ¡nunca!
Charles no dijo nada más, se alejo sin más. Espero que me deje en paz, no quiero que nadie me diga lo que tengo que hacer, estoy harto de que me den ordenes.
Aquella noche me puse a escribir a Tom para contarle todo lo que me había pasado, en ella también puse que confió en él y que le defenderé siempre.
