Mi Secuestrador (Pausa)

9:"Últimas horas"

Max
Cuando le dije a Lía que mañana iba a ser libre empezó a saltar de emoción, estaba feliz por ella, mi promesa se estaba cumpliendo, le prometi que iba a ayudarla a salir de esto y así lo estaba haciendo , sabía que a ella le iba a hacer bien volver a su vida cotidiana, poder volver a ser feliz.
Pero en lo que más me lamentaba era que no iba a poder volver a verla nunca más.
No supe disfrutar ,de alguna forma, los dias a su lado, en cambio fui un cobarde que por no querer aceptar que estaba enamorado de ella la deje sola, en vez de cuidarla.

FLASHBACK
Deje mi estupidez de lado y decidí que era hora en enfrentar mis sentimientos hacia Lía hoy me iba a decir todo lo que sentía por ella, abrí la puerta del departamento, pero cuando entre me tope con una gran sorpresa.
—¿que te sucedió?
—Nada,¿por que lo dices?
—Estas.. más delgada,¿has comido?—Me miro incredula
—Si, si no ya estuviera muerta,¿que haces aquí?
—Trabajo, tengo que estar aquí contigo.—No podía decirle, ella estaba así por mi culpa.
—Ja ja,¿ahora? Déjame en paz.-Se levanto del sofá.
—Te dejaré en paz solo cuando me des algo.
—¿Que quieres Max?
—Las claves de tus tarjetas, del banco, cajas fuertes y todo lo que tengas, si es que quieres irte de una vez por todas de aqui.
Fin de flashback.

Ese día me recibí de idiota y cobarde tendría que haberle pedido perdón por no estar con ella , pero fui tan estúpido en pedirle sus claves.
Cuando me dijo si estaba feliz por ella, en verdad lo estaba pero mi respuesta fue tan idiota como yo "Es mi trabajo" , al ver caer sus lágrimas me sentía fatal pero no podía permitirme empezar a festejar con ella, esa iba a ser un forma en la que ella empiece a creer que éramos amigos o algo parecido.
Quería ser parte de su vida pero no así, no de esta manera, si las circunstancias en las que nos conocimos fueran otras sin dudas no la habría dejado escapar de mi lado pero ,¿en que estaba pensando? Yo era su secuestrador, ninguna persona se enamoraria de una persona como yo.
Me di cuenta que ya eran las últimas horas que pasaría con ella y no debía desperdiciarlas.
Lía se encontraba paseando de lado a lado con sus corticimos shorts y ese maldito top, que me ponía super caliente. Al principio trate de no darse importancia, pero era imposible.
Después de sacarle la foto fui directamente hacia el lado de ella, pude sentir que estaba nerviosa, empezó a respirar más rápido, sus mejillas empezaban a estar más rojizas que lo normal, mi cercanía la ponía nerviosa y ahí pide entender que a ella le pasaban exactamente las mismas cosas que a mi.
Puse una de mis manos en su cadera, ella se dió vuelta y me miro a los ojos, mi otra mano la pose en su mejilla y la bese, ella me siguió el beso y puso sus brazos al rededor de mi cuello.