"¡Jace! ¿Qué tal estás?"
"Bien, supongo".
"¿Qué tal tu cita con Jacqueline?"
"Ni me la recuerdes".
"¿Qué pasó?"
"Prefiero no hablar del tema".
"Vamos, Jace. Soy tu amiga, sabes que puedes confiar en mí :)".
"Salió fatal".
"¿Por qué?"
"¡Se llevó todo el rato hablando de ella misma! ¡Ni siquiera pude disfrutar de la película! ¡Y tampoco se interesó por saber si teníamos cosas en común o no! Ah, y no olvidemos que intentó besarme, pero no lo consiguió. Creo que esta cita ha sido una de las peores de mi vida. ¡Tuve que irme corriendo y todo! :("
"¿En serio?"
"Totalmente en serio".
"¿Por qué?"
"Porque también le llamó una amiga suya por teléfono, y se quedaron hablando una hora entera. ¡Ni siquiera pareció darse cuenta de que yo estaba allí!"
"Ahora lo último que quiero es encontrarme con ella y darle una explicación :(".
"¡Oh, Jane, fue horrible!"
"Lo peor fue que me dijo que le encantaría volver a quedar conmigo :(".
"¿Y no has vuelto a hablar con ella?"
"He intentado esquivarla durante todo el día".
"¡Y hasta me la encontré de camino al instituto y vino a hablar conmigo!"
"¿Y qué hiciste?"
"¿Tú qué crees? ¡Volví a salir corriendo!"
"Creo que piensa que la estoy evitando".
"¡Es que eso es justo lo que estás haciendo, Jace!"
"¡Ayúdame, Jane! ¡No sé qué hacer!"
"Tampoco es el fin del mundo, Jace".
"Tienes razón, Jane".
"Es mucho peor".
"Eres todo un caso, Jace".
(...)
Jane ya estaba esperando en su sitio cinco minutos antes de que comenzara la clase.
Jace, como todos los días, llega unos diez minutos tarde a clase. Se sienta donde siempre y la clase continúa.—No estás muy bien, por lo que veo —le dice la castaña.
—Vaya, si al final resulta que eres adivina y todo.
—Vale, me has descubierto. Soy adivina.
—¡Lo sabía! ¡Y me lo ocultaste todo el tiempo! —contestó el rubio siguiéndole el juego sonriente.
—Y tú podrías convertirte en un gran detective.
—Buena idea, podría ser tu ayudante. ¿Te imaginas? Seríamos como... ¡Sherlock y Watson!
—Podría ser, sí.
—¿Y cuál es nuestro próximo caso, Sherlock?
—Averiguar por qué no consigues novia, querido Watson.
—Eso dolió...
—No lo niegues, es la verdad.
—Odio que tengas razón.
—Siempre tengo razón, Jace.
El rubio bajó la cabeza. No sabía qué decir.
—De todas formas, no tienes que estar así porque una cita con una chica no haya salido bien.
—Ya... Por cierto, gracias. Por un momento has hecho que me olvidara de todo lo que me pasó con Jacqueline.
—No hay de qué, Jace.
Jace abrió los ojos como platos.
—Oye, espera... ¿Cómo sabías que mi cita con Jacqueline había sido un fracaso? Que yo recuerde te pedí consejo, pero nunca te mencioné que mi cita con ella hubiera ido mal.
¿Por qué a veces soy tan estúpida?
—Eh... Soy adivina, ¿recuerdas?
—Hablo en serio. Hay algo que me estás ocultando, Reynolds. Y lo descubriré.
—No creo que lo consigas.
—Soy detective, ¿recuerdas?
—Claro. Pero solo eres mi ayudante, querido Watson.
—Próximo caso: Averiguar el secreto de la señorita Reynolds.
—Haz lo que quieras, pero no cuentes con Sherlock.
—Tranquila, Watson se las apañará solo.
—No podrás conseguirlo sin mí. Me necesitas, querido Watson.
—No. Verás como averiguaré tu secreto yo solito.
—Si no lo consigues, me debes un bote de Nutella.
—Y si lo consigo, tendrás que decirme quién es Jane... Y unas galletas Oreo tampoco estarían nada mal.
—Trato hecho.
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No sé el por qué pero me encanta este capítulo. En serio, lo adoro😂💕. ¿Conseguirá Jace averiguar lo que le oculta Jane? ¡Eso lo veremos en los próximos capítulos! Ahora sí, me despido alegremente deseando publicar el siguiente capítulo que ya tengo escrito xD.
¡Os quiero!❤️
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El rubio de Internet
Short Story«Tengo miedo. Miedo de que conozcas la verdad. Miedo de que sepas quién soy realmente. Miedo de que decidas alejarte de mí. Miedo de que sepas mi historia. Miedo de que sepas que no solo soy ese chico rubio de Internet que conoces o crees conocer, y...