Alex POV:
Escuché un perro dos manzanas antes de llegar a mi casa, lo escuchaba llorar, por causa del frío.
Corrí buscandolo, no iba a dejarlo bajo la lluvia sin hacer nada, no soy mala persona.
–¡Alex!–escuchaba los gritos de Miguel, llamandome, no les hice caso, yo solo podía correr, no iba a pararme
Llegué a un callejón, había una caja grande, donde salían los sollozos.
Abrí la caja, y me encontré a un cachorro, tiritando de frío, no dude en cogerlo y sacarlo, me lo puse en el pecho, intentando que le transmitiera un poco de calor corporal, cosa que no conseguí.
–¡Vamos a casa!–le grité a Miguel cuando estaba al lado de mí.
Corrí con el pequeño cachorro, apenas tenía una semana o por ahí y ya lo habían abandonado, que tristeza.
Llegué a mi casa, entrando antes que Miguel, él cerró la puerta y me dirigí a mi habitación, donde había un baño.
Entré y cogí unas toallas, una para el perrito y otra para secarme el pelo.
Le sequé el pelo, dejó de sollozar hace tiempo, nada más entrar a mi casa.
Le quité una garrapata que tenía, la tire y terminé de secarle.
Para ser un cachorrito de una semana era grande, no mucho pero si un poco.
–Eres muy buena persona–dijo Miguel detrás de mí, dandome cuenta de que estaba allí.
–No lo iba a dejar tirado allí–dije acariciando al perro–se va a llamar Max–dije con una sonrisa.
–Definitívamente eres muy buena persona–dijo sonriendo.
–Gracias–dije y sonreí cuando el pequeño me chupó la mano, mirandome, como si me agradeciese lo que había hecho.
–Bueno, yo ya me voy–dijo Miguel detrás de mí.
–No, necesito que cuides a Max–dije mirandole–voy a comprarle comida, de momento dormirá en mi cama, mañana le llevaré al veterinario–dije con una sonrisa.
–Ok–dijo este.
–Puedes usar mi baño–dije–pero primero lo utilizo yo, y así baño a este–le señalé.
El perro ladró y se metió en mi baño.
–Utiliza el de invitados, mejor–dije yo dandole una toalla, unos pantalones y una camiseta normal.
–Gracias–dijo agradecido.
–De nada–dije y me fuí al baño con el perrito.
Cerré la puerta y dejé la ropa en el inodoro.
–Vamos a ducharte–dije dandole al agua, cuando estuvo templada metí al perro.
Me quité toda la ropa mojada y me metí también.
Después de ducharlo y vestirme, salí a mi habitación y me encontré a Miguel sentado en mi cama, mirando mis fotos colgadadas en la pared.
–¿A que soy guapo?–le pregunté, haciendo me mirara y se sonrojara–toma–le dije dejando al perro en mi cama.
–¿Si tiene sed que hago?–me preguntó.
–Lo coges y le llevas al grifo, ahí ya beberá–le contesté sin pensarlo dos veces.
–Sin problema–dijo Miguel cogiendo a Max.
–Voy a comprarle un bol para ponerle la comida y otra para el agua–dije después de haber cogido mi cartera.
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El chico del GAME ©
Teen FictionYo no pienso que necesites estar mucho tiempo con una persona para conocerla. Si que es verdad que la conoces con el tiempo, pero cuando realmente conoces a esa persona es cuando habéis hecho varias cosas, varios momentos juntos. Y a mi me pasó alg...