El pequeño Takuma comenzó a llorar, Sesshomaru y Rin dejaron de abrazarse para ir a ver al bebé.
—¿Puedo cargarlo? —pregunto Rin con algo de pena, había actuado impulsivamente al abrazar a Sesshomaru.
Su sorpresa fue cuando él correspondió el abrazo, cosa que la había puesto nerviosa. Inhalar su aroma varonil la dejo un poco abrumada.
—Sí —respondió el peliplata. Rin le sonrió y tomó al pequeño en brazos.
—Se parece a usted —dijo en voz baja mirando a Takuma, Sesshomaru frunció el ceño por la manera en que se dirigió a él, de usted.
Sesshomaru se acerco a ella por detrás para poder ver a su hijo que al parecer guardo silencio una vez que estaba en los brazos de Rin. Ella sintió un escalofrío al sentir la respiración de Sesshomaru sobre su oreja, lo miro de reojo y trago en seco, estaba muy cerca.
Algunas personas que se encontraban en el lugar sonrieron al verlos ya que parecían una pareja feliz con su hijo. Sesshomaru miraba a Takuma, se había quedado de nuevo dormido. Rin sonrió tiernamente al ver al pequeño dormido, miro de reojo a Sesshomaru y este por igual.
—¿Necesitan algo más? —pregunto la mesera algo triste de ver a Sesshomaru con alguien más, él ya había ido un par de veces a ese lugar y como ella lo veía solo con el pequeño, pensó que tendría oportunidad. Pero al verlo con la castaña se daba cuenta de que estaba con ella o al menos eso daban a entender ellos.
—La cuenta —respondió él.
—Enseguida se la traigo —hizo una reverencia y se fue de ahí.
—Le pagare —aseguro Rin dando la vuelta para estar frente a frente.
—No es necesario —dijo serio.
—Claro que sí —sus mejillas estaban más coloradas que hace minutos, ¿acaso estaba enferma?—. ¿Q-qué hace? —balbuceo al sentir la mano del peliplata sobre su mejilla.
—Nada —dijo con simpleza, sólo quería comprobar que no tuviera fiebre.
Una vez que Sesshomaru pago la cuenta salieron del lugar. Rin estaba feliz y tranquila con el pequeño en brazos, no deseaba soltarlo, así que le pidió a Sesshomaru que dejara a acompañarlo al supermercado. Él no puso objeción ante eso, así que juntos fueron a hacer las compras. Rin cargaba a Takuma, mientras que Sesshomaru llevaba las bolsas.
Al principio no hablaban casi ya que ella estaba algo nerviosa, pero poco a poco eso fue cambiando, para cuando caminaban hacia el departamento de Sesshomaru, RIn ya hablaba con normalidad, como cuando era una niña que a veces colmaba la paciencia del peliplata, pero él nunca dijo nada sobre ello. Simplemente dejaba que ella le contara como le había ido en esos años que no se vieron. Que fue adoptada por un buen hombre al cual le decía padre y el como la ponía triste saber que estaba desaparecido. Bankotsu no llego casi a su mente, sólo en ciertos minutos, pero al estar junto a Sesshomaru ese mala escena que presencio se le olvidaba.
—¿Dónde recuesto a Takuma? —pregunto al entrar al departamento.
—En la habitación del fondo —dijo serio, mientras entraba con las bolsas.
Rin asintió y fue directo por donde el peliplata le indico, entro a la habitación de Sesshomaru y visualizo la cuna. Se acerco a ella y recostó al pequeño, acaricio su mejilla. Suspiró y salió rápidamente de la recámara. Busco a Sesshomaru en la sala pero él no estaba ahí, camino hasta llegar a la cocina, él terminaba de guardar las cosas en la despensa.
—Aún sigue dormido —aviso ella, él la miro de reojo.
—¿Café? —ofreció poniendo un par de tazas sobre la barra.
ESTÁS LEYENDO
Perfect two
Fiksi PenggemarLas coincidencias no existen, sólo existe lo inevitable. Si estas destinado a estar con alguien, pasara aunque pasen por muchas cosas. Sesshomaru y Rin se conocieron desde pequeños, cuando crecieron se separaron por distintos motivos. ¿Volverán a en...