Mi amada esclava [Precuela]

Capítulo 11: Sola y perdida

—Lo lamento chicos, pero ella se queda conmigo.

Las luces del jardín se encendieron como cómplices cuando los últimos rayos del sol se asomaron.

El más joven de los Uchiha lo fulminó con la mirada, le había caído como cubeta de agua fría en invierno esta situación. Intentó conservar la calma, pero sus profundos ojos ónix estaban consumiendo a su hermano mayor.

—Vamos hermano ¿te unes al club de fans de la gatita? Creí que tenías gustos más apropiados a tu imagen.

El rubio dejó escapar un suspiro y movió la cabeza en resignación. —No me lo esperaba, pero estoy más conforme con que Itachi cuide de ella — cruzó los brazos y miró la reacción de su amigo, que efectivamente estaba hirviendo tras escuchar al chico zorruno.

—Mis gustos son refinados. Ya que estoy interesado en una chica decente a la cual respeto y se da a respetar, que no acceda a tus retorcidos planes ¿la convierte en poca cosa? — soltó la cintura de la peli-rosa y se giró ante ella sin soltar su mano.

La chica seguía en trance, su mente no estaba procesando lo que estaba pasando en el jardín de la mansión Uchiha.

El trauma fue aún mayor cuando Itachi Uchiha se posó sobre una rodilla y dijo —Sakura, realmente me gustas mucho, y sé que fui un tonto… ¿Me darías la oportunidad para ganar tu corazón?

Sintió como un rayo partió sus entrañas cuando escuchó eso, sus ojos se abrieron como platos y su mandíbula se tensó apretando los dientes, su ceño marcaba su frente, Sasuke ya no podía mantener el control.

El rubio solo ha quedado boquiabierto, admitía que sentía atracción por ella, pero también sabía que no se atrevería a llegar tan lejos, ya había sido rechazado una vez, pero tampoco se rendiría tan fácil, estaba seguro que podía hacerla feliz.

—En ese caso… Sakura… — el chico ojiazul también ha dado una reverencia, postrando su brazo derecho enfrente y el otro atrás, como todo un caballero —yo también quiero tener la oportunidad de ganarme tu corazón.

Ahora estaba aún más confundida, sin poder articular palabra, sus mirada viajaba de uno a otro mientras era el foco de atención.

El colmo, Sasuke estaba por explotar. Ver a su hermano y a su mejor amigo ir tras su presa, era simplemente inaceptable. ¿Cuándo pasó eso? Con expresión enfurecida miraba a la ojijade.

—¿Y tú, Sasuke? ¿Piensas pedir una oportunidad? Lo dudo, estás comprometido. No tienes nada que ofrecerle —. Reincorporó su estatura y no recibió más que una mirada llena de odio como respuesta.

El tiempo corre lento para ella, el sudor frío comenzó a recorrer su cuerpo, habían sido demasiadas impresiones para el mismo día, podía sentir su voluntad agrietarse poco a poco, no tardaría en quebrarse por completo. Por instinto apartó su mano de la de Itachi. 

—Por favor… Ya dejen esto. Yo no quiero un romance, lo más que les puedo ofrecer es mi amistad — elevó su dulce rostro inundado por lagrimas mientras sonreía, ella no era conciente de su propio llanto.

Todos se han quedado helados. No sabían si su sonrisa o sus lágrimas eran involuntarias. ¿Cuán fuerte se intenta ser cuando lloras y sonríes al mismo tiempo? La chica que les gustaba estaba llorando ante ellos y a los tres les afectó a su modo, les partía el alma ¿tanto dolor le han causado?

Unos brazos aprisionaron al frágil cuerpo femenino. Sasuke, instintivamente la había abrazado, pegándola a su cuerpo, como había hecho anteriormente cada vez que la veía llorar. No sabía por qué, pero tenía ese impulso, como si su cuerpo reaccionara sólo ante el llanto de la chica.