Everglow

3.7K 180 83
                                        

Una personita me estuvo insistiendo en escuchar esta canción... Y me inspiró a crear este cap... <3 thanks a lot!!! Escúshenla mientras leen el capítulo. 

A Eleven no le gusta la noche. Las pesadillas y los monstruos tienen la costumbre de colarse en su cama cada que cierra los ojos para dormir. El demogorgon y el recuerdo de su padre son los fantasmas que la hacen despertarse la primera noche en casa de Mike, su nuevo hogar. El tiembla sudorosa cubierta con una cobija de estampados rosas y lilas con aroma a flores... Su respiración es entrecortada y no puede detener las lágrimas cuando se asoman en sus tristes y asustados ojos. No quiere moverse, siente que de pronto la cálida cama y la nieve cayendo por la ventana se desvanecerán y despertará en el cuarto donde su padre la encerraba o peor aún, en el Otro Lado, la sola idea la hace temblar de forma histérica e hipar en contra de su puño cerrado frente a su boca que usa para acallar sus leves jadeos de terror. 

Tiene ganas de gritar pero teme que al hacerlo pueda perder todo lo que ahora tiene ¿Acaso está soñando? ¿Sigue perdida en el Otro Lado? ¿Acaso sueña con esa casa y el rescate de Mike mientras realmente duerme en ese lugar maldito de muros metálicos? Las lágrimas golpean la almohada y recorren su ahora limpio rostro hasta la barbilla. Quiere moverse, pero no tiene el valor para hacerlo, tampoco puede llamar a Mike aunque lo único que necesita es ver sus ojos para sentirse más tranquila. 

Sus sollozos y súplicas para que el terror termine son escuchadas por Mike. Al parecer el sueño se le ha aligerado gracias a los días de terror donde el mínimo ruido era equivalente a un demogorgon al lado, acechando y esperando por su siguiente víctima. El chico no tuvo que escuchar los jadeos de El dos veces para despertarse por completo y asomar la cabeza a la litera de abajo, Mike habría accedido a dejarle la cama de arriba a Eleven si ella lo hubiera querido, pero la chica se negó argumentando que quizá un día podría caerse de la cama por la noche, la sola idea aterró a Mike. El chico con una expresión de angustia miraba la carita de Eleven, esa escena le rompía el corazón, hacía menos de 48 horas desde el exitoso rescate y en vez de mirar a su chica dormir tranquila la veía temblorosa y llorando a mares. 

Mike no piensa dos veces, baja de la cama de arriba y se apoya en la litera de abajo, lo primero que hace es descubrir un poco a Eleven, su frente está llena de sudor, pero al parecer solo es gracias a las pesadillas. 

-¿Un mal sueño?- pregunta con voz suave pasando una de sus manos por la frete de la chica. Ella asciente. 

-Mike, tengo miedo- dice en voz baja como si hubiera micrófonos escondidos en su habitación. -Siento que todo va a desaparecer de pronto, que voy a volver allá adentro...- Mike se muerde el labio inferior ¿Qué debe contestarle si su corazón tambiés está asustado? Se aproxima aún más y busca entre la cobija la fina mano de El, ella no se aparta cuando Mike toma y acaricia el dorso de su mano como si fuera el ser más delicado del mundo, quizá ella no lo sepa, pero en esos segundos así de asustada se convierte en la criatura más frágil del universo. Eleven está rota, una parte de ella nunca va a recuperarse por completo, Mike solo espera que esas grietas del pasado no terminen por destruirla como a las muñecas de porcelana. 

-El, no tienes por qué tener miedo- dice tratando de evitar que las lágrimas vengan a sus ojos -Estás a salvo, conmigo, con mi mamá, mi papá, Nance, Jonathan, Dustin, Will, Lucas... Incluso con Steve y el sheriff, ninguno de nosotros dejaría que algo malo te pasara.- El deja de temblar poco a poco, pero sigue mirando el mundo con terror -Todos peleamos una vez por ti, pelearíamos otra vez si fuer necesario. Iría mil veces al Otro Lado si mil veces estuvieras ahí. 

-Tengo miedo de que esto solo sea un sueño- Mike comprende, él también tiene miedo de cerrar los ojos por miedo a que esos momentos sean solo un sueño destinado a esfumarse al amanecer. -¿Y si me despierto y no estás conmigo? ¿Y si sigo atrapada ahí adentro?- Mike se llena de valor al responder, de ira en contra de las personas que la lastimaron y no puede contener por más tiempo las lágrimas, una se escurre por su mejilla derecha mientras responde. 

Las Primeras Once Veces...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora