Las Primeras Once Veces...

Boda parte 3

Coronada de flores y con el atuendo más lindo del mundo, claro después del de la novia, Eleven entra y camina por el pasillo de la iglesia mientras todos miran el cortejo de la novia, va detrás de las damas de honor, sin embargo llama más la atención que todas ellas con sus vestidos naranja mientras camina con una sonrisa y la mirada altiva, hace un gesto de suficiencia al ver varias muecas de las chicas que le desagradan del colegio y mira de reojo a Mike cuando pasa a su lado, justo detrás de ella, caminando entre pétalos de rosa que Mike y Eleven recolectaron del jardín esa misma mañana, se aparece Nancy, el vestido de novia que le oculta de forma sorprendente el pequeño indicio de embarazo y el bonito encaje que arrastra por la alfrombra hacen a todos soltar un suspiro, nadie sabe donde consiguió ese vestido, tan peculiar y bonito, Eleven escucha a dos mujeres que exclaman que el mantel que ella misma puso es tela venida de Corea o quizá de India. El reprime la risa y continua su camino; sonríe al ver a su hermano mayor Jonathan en el atrio de la iglesia, quien se tapa la boca reprimiendo una exclamación de sorpresa. Steve detrás de él le toca el hombro para que el novio no sea víctima de los nervios. 

Eleven sonríe, en ese momento entiende por qué la gente quiere casarse, todos merecen ser mirados del modo que Jonathan mira a Nancy, como si fuera su mejor fotografía, como si fuera el último waffle del mundo, como si mirara el infinito. Nancy va detrás de ella sosteniendo el brazo de su padre quien reprime unas cuantas lágrimas cuando la entrega a su futuro esposo. Eleven toma su lugar entre Will y Mike, siente una mano en su hombro que reconoce tan bien como la de Mike, Hopper está detrás de ella, sentado al lado de Joyce que se limpia una pequeña lágrima. 

-Si un día te casas- le dice Hopper en voz baja -Yo te voy a entregar- dice señalando al padre de Mike, quien pone la mano de su hija en la mano de Jonathan quien ahora llora de alegría. Steve les hace una seña desde su lugar. Elevne no sabe mucho de esas ceremonias pero le han dicho que haga todo lo que los demás hacen, es así como se mantiene en silencio y mirando los vestidos a su al redor, en un momento Dustin hace varias bromas antes de que el oficial Hopper le de un sape para que guarde silencio, a su vez Joyce le da una palmada en la rodilla diciéndole que deje a los niños en paz. Los niños reprimen una risa, lo que hace un hombre por el amor a una mujer, Eleven sabe eso, pasó más de 300 días escuchando a Mike en el Otro Lado y había ido dos veces a buscarla... 

-Ahora los declaro marido y mujer- declara un hombre que según Mike tiene el poder de atar a la gente, Eleven no duda de las palabras de su novio auqnue a simple vista se ve una persona normal. Eleven aplaude cuando la multitud lo hace y va al lado de los novios cuando estos la llaman para su sesión de fotos. Will suspira ensimismado, pero le sonríe a Eleven 

-Bueno, nos tenemos el uno al otro hasta que uno de los dos se case- dice, a lo que Eleven solo asiente con la cabeza divertida, quizá deba guardar el secreto de que se va a casar con Mike cuando sean mayores, después de todo, tienen una vida llena de posibilidades allá afuera. 

-Menos mal ya terminó- dice Mike sacándose el tormentoso moño luego de la última foto. Eleven ríe y le da un pequeño beso en la mejilla mientras se dirigen al auto de Karen, quien va a llevar a todos al lugar donde Eleven sabe que podrá bailar y lucir el corte de su nuevo vestido. 

-Ni que lo digas, eso de las bodas es... aburrido- exclama Max mal sentada junto a Eleven y mirando por la ventana mientras el auto avanza -No quiero casarme nunca- murmura más para si misma que para los demás. 

-Ni yo- declara Lucas quien no sabe como contestar ante las negativas de Max, con ese humor no quiere imaginar la respuesta que la joven le dará cuando la invite por un helado. 

-Yo si- dice Dustin -Imagina vestirte de la princesa Leia y el novio de Han Solo... sería alucinante- imagina bodas basadas en el señor de los anillos y temáticas de otras cosas. -Bodas temáticas, eso es el futuro.- Will se suelta a reír. 

-Eso no tiene futuro- dice Lucas completamente seguro. -Nadie quiere vestirse de elfo o de la guerra de las galaxias el día de su boda, el futuro no será diferente- Max sonríe de lado, le gusta llevarle la contraria a los demás 

-Quien sabe... puede que tenfga más futuro de lo que pensamos. Después de todo, nadie pensó que esta boda se celebraría incluso hace seis meses, quien sabe en realidad donde estaremos mañana- Eleven sonríe un poco triste mientras se toca la muñeca, justo donde un brazalete oculta el número once. No le sorprende la lanza que parece clavarse en su pecho de forma dolorosa. Sin embargo la mano de Mike lo mitiga y mientras pasa la tarde comiendo la cena que Jonathan y Nance escogieron y bailando con Mike, no puede evitar alegrase. 

Hace dos años jamás imaginó salir del encierro, no penó tener la comida que quería a la mano ni tener a gente que la amara por quién era, no por lo que podía ofrecer como un arma. Ni importaba donde estuviera mañana, lo importante era el ahora, porque aún en su joven vida mientras veía bailar a Joanathan y Nance comprendió que no hay mejor regalo que el presente.