Cap 8: Ya todo da igual, entonces a disfrutar

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El resto de la semana siguió su curso normal de idas y venidas.

Tarde sin actividades pero con mi mejor amiga ocupada en su trabajo, decidí quedarme en la empresa, descansar un poco y relajar mi cabeza. Recorrí los jardines del edificio en busca de un poco de paz y me encontré con Park JiMin sentado en un banco del parque, noté que no llevaba abrigo, y el clima era bastante fresco. Me acerqué a él para charlar. Puse mi abrigo en sus hombros y me senté a su lado.

JiMin- Noona, me asustaste!- dijo mirándome cuando me sentaba- Que haces acá? Toma- devolvió mi chaqueta

Mary- Que haces acá, sentado solo y sin abrigo- coloqué nuevamente mi campera sobre sus hombros y vi que su mirada era triste.

JM- Mary-noona, tengo problemas con mi coreografía y verdaderamente quiero mejorar pero… Oye, tengo una idea. Te molesta acompañarme?- dijo con voz entusiasta

Mary- Que yo qué? Si, puedo acompañarte no hay problema.

JM- Claro, vos podrías ver mi performance y decirme que me falta o en que fallo…

Mary- Pero, no creo poder ayudar mucho. Yo solo puedo verte practicar.

JM- No importa, estaría bien también que estés ahí y me hicieras compañía también. Vamos, será divertido- colocó nuevamente mi campera en mis hombros y tomó mi mano, me arrastró hasta la sala de ensayo.

Llegamos a la sala, me guio al espejo -Siéntate acá y mira mi rutina. Y si te portas bien tal vez, solo tal vez, pueda enseñarte algunos pasos-

Me reí y le conteste “Si, maestro” sentándome frente a él. Fue divertido y tierno ver como JiMin trataba de centrarse en hacer la coreografía lo mas sensual posible pero sus nervios lo traicionaban y se ponía colorado y tímido.

JiMin es el típico niño que cuida de todo su entorno y hace lo posible para que todos estén bien. Es sensible, atento, muy tierno, muy estricto consigo mismo, siempre sabe hacerse notar pero es muy tímido, siempre resaltando su sex-appeal.

Él comenzó a mostrarme un par de pasos de baile. Yo solo reía porque no entendía mucho de lo que me hablaba. De repente se quedo quieto, como colgado, de espalda hacia mí.

JM- AIIIIISH!- dijo exhausto de la práctica- creo que dejaré aquí por hoy.

Mary- OK, maestro, mereces algo fresco, voy hasta la máquina expendedora y vuelvo- salí al pasillo y busque dos gaseosas frías. Volví a la sala e intenté abrir la puerta pero estaba con llave. Desde adentro se escuchó la voz de JiMin -Cuál es la clave? Sin la clave no podrás entrar- dijo riéndose. Era un niño.

Mary- La clave es… SI MAESTRO…? Jajaja- abrió la puerta, permitió que entrara y cerró la puerta tras mi ingreso. Trató de hacerme una broma pero nuevamente terminó poniéndose colorado.

Tomó su bebida con gusto y luego de un momento de relax me dijo: “Vamos, noona. Te enseñaré un par de movimientos. Vamos, vamos, ponte de pie”- enseguida comenzó a hacer pompping. Me incorporé mientras reía y comencé a seguirlo. “Hay que distenderse un poco, no te parece?”- dijo cambiando la música.

Mary- Oye, se que has hecho danza contemporánea, has visto algo de tango?

JM- Tango? Mmm… no recuerdo mucho de eso.

Mary- En Argentina se baila mucho, supuestamente nació en Buenos Aires, en los arrabales…- comencé con un poco de historia- Espera, pondré algo de tango- comencé a enseñarle los pasos básicos- Ves, no es tan difícil. Vos guías, yo sigo-

Jm- OK, OK, creo que esto no es para mi. Ya te pise como 5 veces. Ahora es mi turno- cambió la música y pregunto- Lo conoces?-

Mary- Claro que si, es Justin, Justin Timberlake. Amo su música. Muy bien entonces, hagamos algo con esto. Armemos una pequeña coreo, te parece? No se muchos pasos pero te sigo-

Comenzamos a armar algunas secuencias. Hasta que note que JiMin se había mas que emocionado con esto.

Mary- OK, creo que ya se ha hecho tarde, deberías descansar un poco y seguir mañana con tu práctica- lo salude y giré para retirarme.

JiMin tomo mi mano y dijo- Noona, esto es divertido. Es divertido estar con vos.

Mary- Lo se, soy genial- le dije burlándome- vos también sos divertido- le dije tocando con mi índice uno de sus cachetes. Inmediatamente tomó mi mano y me acercó hacia él. Quedamos a centímetros uno de otro. A pesar de ser menor y tener la misma altura, él era mucho mas fuerte.

Mary- Ji… Min… Qué estás haciendo?- no me dejo terminar de hablar, ya estaba besándome.

Me arrojó contra la pared, no dejaba de besarme un segundo. En cuanto logré apartarlo le dije: “No JiMin, no sigas por favor”

JM- Noona, tu me gustas. Y verte bailar me exitó demasiado. Debo tenerte… y así será.

La lista de reproducción seguía en curso y cada vez se volvía mas caliente el ambiente. Él me acorralaba cada vez mas contra la pared y me hacia sentir lo excitado que estaba. En aquel momento las palabras de NamJoon daban vueltas en mi cabeza y desistí de la idea de poder enamorar a V. Así que solo me dispuse a disfrutar de todo… por mas que doliera en lo mas profundo de mi alma.

No me quedé atrás al besarlo, él jalaba de mi pelo y yo… yo me aferré a él. Lo besé apasionadamente y nuestras lenguas jugaban en nuestras bocas, morder sus labios hacía que perdiera la razón, sus caricias eran tan suaves.

Íbamos disfrutándonos poco a poco el uno al otro, conociendo cada rincón de nuestros cuerpos. Para ser parte de la maknae line, debo admitir que JiMin conocía bastante del procedimiento.

Su cuerpo estaba tallado por los mismos Dioses y verdaderamente era un placer verlo desnudo frente a mi. Nuestro desahogo duró varias horas en aquel salón y nos disfrutamos de todas las formas.

Había un problema, solo me pedía que no acercara mi boca a su entre pierna porque acabaría demasiado rápido. Que se acercara a mi oído y me dijera “quiero disfrutarte lo mas posible” mientras jugaba con sus dedos entre mis piernas hacía de la situación cada vez mas peligrosa.

Ya habíamos recorrido casi todo el salón en aquella euforia cuando di cuenta de que uno de los espejos, el mas cercano a nosotros estaba empañado casi por completo, no pude más con mi genio y arrinconé al muchacho contra la pared como él lo había hecho conmigo, pero esta vez no oí ninguna de sus advertencias.

Recorrí con mi lengua cada hendidura de su cuerpo desde su boca, hasta su entre pierna, pasando por su pecho y abdomen. Me quedé allí abajo, jugando con mi lengua y mis labios, procurando llevarlo al limite pero sin acabar.

No pudo contener aquel éxtasis y estalló, dejando libre un gemido el cual expreso, mas que con palabras, su goce.

Inmediato a esto, cayó rendido sobre sus rodillas e instintivamente corrió a abrazarme.

JM- Por favor noona, quédate conmigo así un momento- Lo abracé y nos mantuvimos sobre una colchoneta que había en el lugar.

JiMin era demasiado tierno y temía que confundiera todo aquello que había pasado.

Mary- JiMin-ssi, quiero aclararte lo siguiente, esto que acaba de pasar fue… no lo llamaría error, pero no quiero que estés confundido y pienses que siento algo por ti. Sabes que te quiero pero ese cariño no puede confundirse con amor. Por favor, no me malentiendas.

JM- Pero pensé… Mary noona, o sea que esto…-

Mary- Perdóname, JiMin, en verdad lo siento. Pero por mas que pase lo que pase, no puedo sacarme de la mente ni de mi corazón a esa la persona que amo y que lo piense de muchas maneras- hablábamos mientras nos cambiábamos.

JM- Eso quiere decir que estas enamorada? Quien es? Y por que no pueden estar juntos? Él no te quiere? O es ella? Vamos, noona, cuéntame, prometo no comentarlo con nadie- su actitud cambió radicalmente de estar triste a ser el mismo niño curioso de siempre.

Reí bastante y le dije que no se preocupara, que en algún momento íbamos, tanto el como yo, a encontrar a alguien con quien caminar y tener citas y vestir como pareja y hacer cosas de enamorados.

JM- Pero yo te quería a ti- dijo haciendo puchero pero viéndome con esos “ojitos sexys” como los llamaba yo.

Mary- Park JiMin, no juegues conmigo; sabes que vamos a seguir siendo amigos y que puedes contar conmigo siempre. Es mas, seguiré ayudándote con tu baile si quieres. Eso si, esto no sale de estas cuatro paredes.

JM- OK, noona. Vamos a comer algo? No almorcé y me suena el estomago.

Trató de tomarme la mano al salir, pero me di vuelta y me hice la mala con él y le levanté la mano que trató de agarrar, el me puso de nuevo sus “ojitos sexys” para molestarme y para hacerlo enojar toqué su cabeza y lo despeiné, como se hace con los niños.

Please, Let Me KnowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora