Quite la sabana que cubría el espejo dorado, al rededor había inscripciones con lo que parecían ser runas y joyas con letras que decían:
Alejese y busque como destruir lo que el espejo guarda.
Mientras leía no me di cuenta de que estaba frente al espejo, al principio pensé que solo era mi reflejo normal, de repente cambio a un reflejo que era todo lo contrario a mi, un ser de cabello claro y facciones finas de piel aún más clara imitaba mis expresiones y movimientos, después se apago como una vela en un cuarto oscuro, no se veía nada dentro del espejo, de pronto se encendió una luz blanca que sobresalía del espejo, se formo un portal color rojo y de ahí salio una copia idéntica a mi.
En realidad tenía pequeñas diferencias a mi, sus ojos tenían un brillo rojizo, su piel era mas blanca y vestía de negro.
Sorprendido articule la pregunta
-¿Quien eres?- el asombro y la curiosidad me impedían desenvainar mi espada, creía que podría ser solo una proyección incorporeas para invitarme a entrar en el espejo o algo así.
Dicha cosa comenzó a hablar con voz neutra:
- somos similares, algo nos une ya que mi apariencia no difiere mucho a la tuya, pero tanto tú como yo sabemos que somos diferentes a pesar del aspecto, así que no podemos llevar el mismo nombre y mucho menos el que tenías antes de estar frente al espejo, puedes llamarme Charles Boneless- Entonces puedes llamarme James Mertens
Puso cara de despreocupado y trato de engañarme:
- muy bien entonces seamos amigos, quiero que dejen mi espejo en la lejanía, el es mi hogar y lo han perturbado.
-¿en serio?- en ese momento crei sus mentiras, ese espejo no era su hogar era una prisión y yo... lo libere.
Planeaba romper el espejo en un descuido que tuviera Charles o clavarle mi espada antes de que este reaccionara.
-¡No!¡jajajaja!, mientras reia me dio un fuerte golpe en el estómago que me saco el aire, luego me dió una patada en el costado, estaba aturdido, aprovecho mi estado vulnerable y me arrebato mi espada.
Termino por darme un puñetazo en el rostro y quedé inconsciente por un instante, Charles bajo por las escaleras con agilidad mientras clavaba mi espada en los dos guardias que vigilaban afuera del cuarto de la torre, me recupere minutos después pensando que los guardias de abajo ya habrían acabado con el y con más razón crei que era verdad al ver que el espejo desapareció antes de que pudiera tocarlo y tratar de lanzarlo por la ventana.
Baje corriendo y aquello que presencié fue horrible, había sangre por las paredes y el suelo, los retratos que había en todo el recibidor tenían una expresión diferente a cuando entre, una expresión de horror e impotencia, seguí el rastro de caballeros muertos y finalmente encontré a Charles que sostenía al rey desarmado.
-Así aprenderás a no confundirme con ese estúpido - Charles degolló al rey en mis narices.
Grite y corri hacia el para distraerlo pero era tarde:
- ¡Hey!, La pelea es conmigo, criatura repugnante.
Desenvaine una espada que pertenecía a uno de los caballeros muertos y empezamos una pelea, arriba y abajo, de lado a lado, sus ataques eran tan veloces que apenas pude cubrirlos y esquivarlos, chocamos espadas y por la fuerza de los ataques quedamos forcejeando por un momento, logro quitar del medio su espada, dió un ataque tan fuerte que mi brazo regreso en la dirección en la que había mandado un ataque, en ese instante dónde quedé desprotegido lanzo dos golpes seguidos en el rostro quedé aturdido unos segundos, de una patada se apartó de mi.
Aquel extraño ser salio por la puerta principal, fui corriendo detrás de él para seguir con la pelea, pero fue en vano pues no lo encontré, salto a la profundidad del bosque, pensé en que tal vez moriría por la caída, el castillo al no tener un rey comenzó a tirar el puente que lo mantenía anclado a la tierra.
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El Cazador Solitario
FantasyNunca se sabe cuando la aventura llamara a tu puerta, así que reponde a la llamada antes de que desaparezca para siempre tu oportunidad de vivir aventuras. Estos son los recuerdos de un cazador que accidentalmente llegó a Moregard, una tierra fantas...