HERMANDAD

Capítulo 1

Dos días habían transcurrido desde la muerte de Sasha Grenyoi. Todos los preparativos respecto al funeral quedó en manos de Vladímir, la familia de ella no había asistido y mucho menos mostró pésame por la perdida. Si eso no era clara señal de que había sido tramado por su propio padre entonces, eran ciegos.

Tanto Nikolái como Vladímir pasaban los días y las noches en el hospital velando por el más pequeño. La enfermera Dana insistía en darle nombres a los bebés, pero no querían tomar esa decisión que correspondía a los padres. Al padre.

En todo el tiempo transcurrido no hubo forma de contactar a Giovanni por ningún medio. La idea de que tal vez Giovanni también habría sufrido un ataque había sido tema de conversación, pero era rápidamente descartado porque no había forma de que Grenyoi supiera que él era el padre de los bebés.

Pero ese mismo día se respondió la interrogante del paradero de Giovanni....

El sonido del celular de Vladímir logró despertar al bebé que descansaba en los brazos de Nikolái, el llanto de éste retumbaba en los oídos y parecía que se lastimaría la garganta por la forma en que gritaba. Una clara mirada de odio por parte de Niko le indicó a Vladímir que saliera de la habitación para atender la llamada.

- ¿Diga?- Preguntó al ver que la llamada provenía de un número desconocido.

- Vlad soy yo, Giovanni.- Escuchar ese nombre logró remover el interior de Vladímir. - Eh tenido unos problemas con el otro celular, me era imposible contactarme antes. En fin ¿Sabes si Sasha esta enojada?  Intenté marcarle primero a ella, pero no responde.- No quería. No quería ser él el portador de malas noticias. Sentía mucha pena sólo de escuchar la voz tan apacible y confiada del otro lado.

- Giovanni... Amm, nosotros también intentamos comunicarnos contigo muchas veces.... Han pasa...

- Sí si, lo sé y enserio lo siento pero el otro celular se volvió merda ¿Sasha está contigo? Pasamela un minuto.

- Giovanni necesitamos hablar. Lo que quiero decirte no es tema para hablar por teléfono.- La sola idea de estar en el lugar de él lo volvía loco ¿Como reaccionaria él al saber que perdió a Nikolái? Sinceramente no podía ni imaginarlo y jamás querría saberlo.

- Esta bien, llegaré a tu casa como en media hora. El tráfico está jodido ¿Sucede algo?- No quiso responder, sólo deseo que pronto llegara y poder decirle sobre la situación.

- A mi casa no Giovanni. Ven al Bellevue Hospital Center de la primera Avenida.

-¡¡¿QUÉ?!! o por Dios los bebés ya vienen y tú me tienes conversando.

- En realidad no.- Vladímir cortó la llamada sin poder soportar más la farsa.

Entró nuevamente a la habitación y se encontró a Nikolái dormido boca arriba en la cama de la habitación con el bebé sobre su pecho. Sin muchas ganas de molestarlo tomó asiento cerca de la incubadora y observó ha el más pequeño.

El cansancio terminó por consumirlos a ambos, tanto que Vladímir se durmió en la incómoda silla con la cabeza apoyada al costado de la cama.  Tal vez pasaron horas o sólo quince minutos cuando el llanto del bebé volvió a despertarlos. Nikolái acurrucó al bebé en brazos, pero éste dormía muy tranquilo con los latidos  de su pecho resonando.

- Vlad, Vladímir.- Lo llamó zamarreando su hombro para despertarlo.- Es el pequeño, esta llorando Vlad ¡¡Corre por Dana!! Maldición Vladímir.- Cuando al fin cayó en las palabras de Niko, miró con desespero la incubadora comprobando el escándalo que el pequeño armaba.

Corrió fuera de la habitación gritando por el pasillo.

- ¡Dana! ¡¡¡La enfermera Dana!!!- El doctor que había atendido a Sasha lo reconoció y confundido lo detuvo.