Capítulo 23

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1 año después

Serguéi dió su última calada al cigarrillo y bajó la ventanilla para aventarlo. Hastiado de esperar la señal Jugó con su cajetilla tentado a encender otro; Vincent a su lado miraba preocupado como a una cuadra delante de dónde estaban aparcados salía un gran número de hombres apresurados subiéndose a una Van a toda prisa.

- Esa es la señal.- Dijo Serguéi colocando el cigarro nuevo a sus labios y dando marcha al auto.

Pisó acelerador hasta posicionar el auto al costado derecho de la Van y antes de que el conductor reaccionara Vincent presionó el gatillo de su subfusil automático, en cuestión de segundos la Van perdió el control y por la velocidad a la que iba termino descarrilando, giró sobre si aproximadamente unas 5 veces deteniéndose a unos 20 metros.
Serguéi clavó sus frenos y silbó a modo de sorpresa sonriendo a Vincent.
- Lo dejaste hecho un colador.- Dijo bajando del auto, quitó el seguro de su Beretta y junto a Vincent se acercaron a inspeccionar. El barrio completo estaba en silencio ni un alma se encontraba en las calles.
El conductor había muerto con los disparos y el resto también, solo quedaban cadáveres en aquel coche.
-¿Nos aseguramos?- preguntó Serguéi y Vincent sólo asintió levantado sus hombros con despreocupación. Corrió al auto en búsqueda del bidón de naftalina y roció el coche.- Adieu. - Despidió burlista  tirando su colilla de cigarro en su dirección.

- Yo manejo ahora

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- Yo manejo ahora.- Dijo Vincent adelantándose a la puerta del conductor. Debían volver rápidamente a por el resto.
Tenían varios meses estudiando a los polacos. Quienes, tras la caída de La Bratva fueron los más rápidos a tomar beneficios robando gran parte del mercado de las drogas. Igor había autorizado a varios hombres para descubrir por sus propios medios como se manejaban los polacos, quien era el jefe, y en cuáles otros negocios estaban involucrados.
Serguéi había logrado comprar a un integrante de la banda y fue este mismo quien ayudó a hilar el plan hasta este momento.
Pawel esperaba fuera de la fachada comiéndose las uñas en la espera. La calma volvió a su cuerpo cuando vió a Serguéi saludarlo al bajar del auto. Apresurado abrió la reja de la casa mientras informaba la cantidad de tipos dentro.
- Hoy es noche de apuestas por lo que hay dos hombres en cada puerta, tienen que ir por este costado hasta el galpón del fondo, los de la entrada y los que cuidan la reja salieron en la Van. Tal como me pediste les di tu nota.- El muchacho dejaba desbordar la información de su boca mientras caminaba a su lado nervioso. - Ya puedo irme ¿Verdad?- Preguntó mirando como de repente detrás de él había más de 30 tipos armados. Miró nervioso a Serguéi con miedo de que fuera a incumplir con su parte del trato.
- Pero ¿Qué cosas dices?- Respondió abrazándole por el cuello.- Te perderás la mejor parte Pawel. - Carcajeó arrastrándolo hasta llegar a las puertas del galpón. Tal como había dicho estaban libres de guardias.- Ábrelas para mí. - Ordenó mientras le hacía señas a sus hombres para que se preparen. El pobre chico hizo caso dejando escapar el bullicio del interior a sus invitados.
Dentro estaba lleno de apostadores rodeando una arena en el centro de aquel galpón. Dentro, dos perros de raza luchaban a muerte.
Un disparo al aire fue suficiente para acallar los vítores y gritos de la gente.
- Vinimos aquí a..- Serguéi fue interrumpido por los disparos de la metralleta de Vincent hacia los guardias que corrían apuntandoles. - Bueno, si se intentó ser civilizado.- Se dijo mientras sus hombres eliminaban a los guardias y la gente corría desenfrenada hacia las puertas.

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