El reloj en su mano marcaba las tres de la tarde. Llevó el cigarrillo a su boca dándole una última calada y esperó paciente que aquel hombre estacionara su coche en la esquina... Como venía haciendo una semana seguida.Cuando el coche negro apagó el motor, Ashton se dirigió a éste sin ser visto. Abrió la puerta de copiloto y se metió abruptamente sorprendiendo al conductor.
- Mantente quieto.- Ordenó mientras apuntaba una 9mm en la sien del sujeto.- Que bueno que nos entendamos.
- No sabes con quien te estás metiendo.- Todo el odio de ser atrapado lo escupió en tan pocas palabras.
- ¿Se supone que deba?-El hombre no contestó y Ashton siguió apuntándolo con el arma.- Bueno, entonces quitame la ignorancia ¿Quien eres y que quieres? No creas que no he notado el tiempo que llevas merodeando.- Se vio sorprendido, pero fingió muy mal no estarlo.
-Soy Giovanni Tell y ahora baja esa maldita cosa.- El nombre entró en la cabeza de Ashton recordando rápidamente las veces que lo oyó.
-Tú. Maldito hijo de perra.- Todo lo contrario a alejar el arma, Ashton presionó con más fuerza la bereta sobre la sien. El padre de los gemelos se aparecía nuevamente, eso no tenía mucho sentido para Ash.
- Tranquilo Idiota.- Giovanni levantó las manos del volante por pura inercia.- Sólo... vengo a despedirme, pero no he encontrado el valor. Después de lo que le dije a Vladímir no creo que me lo permita.
-¿Despedirte dices?- Preguntó con cautela suavizando la presión del arma en el otro.
- Tal vez no vuelva a NY ¡Que digo! Es evidente que moriré en el intento, pero eso me vale verga. Voy por mi venganza y ese maldito viejo me las va a pagar.- Dejó sus manos descansar nuevamente en el volante presionando el cuero de este.- Solo quiero despedirme de mis ... Mis bebés.
Ashton guardó su arma nuevamente y tomó asiento cómodamente de copiloto.- ¿Quieres uno?- Ofreció un cigarro el cual Giovanni aceptó.- Estoy interesado en ayudarte ¿sabes? Yo también busco vengarme del maldito Grenyoi, pero obviamente no puedo sólo.- Expulsó el humo y miró seriamente a Giovanni.- Puedo ayudarte a ver a los gemelos, hablaré con Vladímir de ser necesario.
Giovanni se vio agradecido de saber que tenía una oportunidad de acercarse a la casa sin ser eliminado antes.
- No me interesan las razones que tengas para buscar venganza contra el viejo, pero si puedes ayudarme con Boryenka yo puedo llevarte a Rusia con el resto de mis hombres.- Cerraron trato con el valor de la palabra. Ashton tiró la colilla por la ventanilla del auto y bajo pidiéndole que lo siguiera.
Los nervios y la ansiedad controlaban el cuerpo de Giovanni, temía ser echado antes de tener tiempo a siquiera ver los rostros de sus hijos o tan siquiera a poner un pie en la casa. No se preocupó por eso al notar que ya habían entrado y se notó caminando por la residencia. Al entrar en la sala escuchó risas y también las notó detenerse con su presencia.
Tyler cargaba en sus brazos a Sam. El más pequeño dormía después de beber todo el biberón. Su hermano era todo un caso contrario, con sus ojitos bien abiertos y atento a los movimientos que lo rodeaban, más los relatos de Logan.
Tyler acostó en la cuna a Sam y miró curioso al hombre junto a Ashton, claro que Ty no lo reconocía o si alguna vez había tenido placer de conocerlo no lo recordaba por lo que saludó respetuoso y se acercó a su pareja.
Logan lo recibió con un gran abrazo, el cual se extendió por varios segundos hasta que las lágrimas llegaron al menor.
- Lo siento... Lo siento mucho.- Susurró Giovanni, sentía la culpa y la responsabilidad. El llanto de Sasha llamó la atención de Logan como si fuese reclamado por lo que cargó en brazos al bebé y lo acercó a Giovanni.
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HERMANDAD
Teen FictionEl final de la historia está llegando y se espera encontrar la paz para todos los miembros de La Bratva más poderosa. ¿Hasta donde están dispuestos a llegar estos personajes por una probada de la dulce venganza? La línea que divide el odio del a...