Como era costumbre en Sindria se realizó una gran fiesta en honor de sus importantes invitados, comida y bebida en exceso para todos, algunos ya estaban pasados de copas.
-Oye Masrus veamos quien es el más fuerte – Muu quería dejar en claro que era el mejor de los fanilis pero el de Sindria no se la dejaría fácil.
-Animo Marsus-ojisan y Muu-ojisan! – gritaba el animado Aladin.
-Suerte – Morgiana apoyaba a su maestro discretamente, pero con mucho entusiasmo, mientras Alibaba contemplaba el peor de los escenarios en su mente.
La pelea fue reñía y no se definió ningún ganador ya que la mesa donde estaban apoyando los brazos se destruyo.
-Oye Alibaka – hablo el sádico.
-Es Alibaba – corrigió el rubio.
-Es igual....¿has visto a la china? – Tenía un buen rato que no la había visto – es raro que no haya acabado con toda la comida a su alcance.
-La vi hablando con Judal, estaban por allá – apunto a la dirección donde estaban los enormes barriles de bebida.
Mientras tanto la pelirroja yato se encontraba charlando con el magi oscuro tambien algo pasados de copas.
-Ya dime quien es ese Kumaro bruja — No se aburría de preguntar lo mismo? ¿Queria solo fastidiarla?
-Como eres molesto – bebió un gran sorbo de su bebida – Y NOOOO es Kumaro~hip – el alcohol en su cuerpo se estaba notando – Se llama Kamui y es mi hermano, es un poco idiota, pero tu me lo recuerdas – ¿desde cuándo había dos Judal mirándola tan fijamente? ¿Porque todo se movía tan rápido?
-¿Estás diciendo que soy un idiota? Bruja – su voz rasposa y sus rubís ojos la miraban acusativamente mientras a lo lejos Sougo veía la escena, se molesto de verlos solos charlando tan amigablemente cuando horas antes habían tratado de matarse, decidió ir a dormir.
-Es molesto igual que tu~hip, un tonto que dice todo lo que quiere sin pensarlo – se acerco más al magi que estaba sentado frente a ella ya que comenzó a verlo borroso, esto provoco un ligero sonrojo por parte del chico – pero él tiene una estúpida sonrisa que da escalofrió... sin embargo Kamui es muy parecido a mí, por lo que es muy guapo igual que yo~hip.
-¿Estás diciendo que soy guapo? Eso es obvio bruja – reía orgulloso de si mismo.
Un sonido de golpe se escucho y provoco que el magi parara de reír, Kagura se había dejado caer sobre la mesa estaba demasiado borracha.
-Además de bruja, descarada – suspiro, no podía dejarla en ese lugar en tal estado deplorable y no veía a nadie cerca para llevarla de regreso al palacio, no le quedo más remedio que llevarla en su alfombra de regreso al castillo, como pudo logro que le dijera cual era la habitación que ocupaba.
Abrió la ventana y ella entro tambaleándose mientras el magi se alejaba, se sentía demasiado mareada no encendió la luz, cerró la puerta con seguro y la ventana por si se le ocurría a Judal regresar, entro al baño y se dio una ducha bastante larga. Ya se sentía en sus cinco sentidos nunca fue buena con la bebida, salió del baño con su pijama puesta mientras se cepillaba en caballo, pero una presencia la tomo por sorpresa.
-Terminaste de coquetear con tu amiguito – dijo la conocida voz del sádico que se encontraba recostado en la cama ¿Qué estaba haciendo en su habitación? ¿Estaba borracho?
-Me asustaste idiota ¿Qué quieres? – tenia sueño quería descansar, no se encontraba con humor para pelear.
Se acerco a ella y la arrincono contra la pared tomándola de las muñecas para evitar que lo empujara, acerco su rostro al cuello para oler profundamente su piel, ese acto provoco que la yato sintiera un gran escalofrió recorrer su cuerpo.
-Críe que tu reducido cerebro sabría que solo eres mía china – quiso empujarlo, pero el agarre de Sougo se volvió más fuerte y el beso que había depositado en su cuello la desconcentro aun más.
-¿De que estás hablando idiota? Yo no soy de nadie... aléjate de mí estas ebrio – esa tenía que ser la respuesta para el su comportamiento, o al menos eso quería creer, antes de que se fuera con su padre hace algunos años ellos seguían peleando cada que podían, era lo normal, pero apenas hace poco se habían vuelto a encontrar y nada había cambiado, entonces ¿Qué estaba sucediendo?
-Ya eres todo una mujer china – la oscuridad le impedía ver completamente su figura, levanto los brazos de la chica sobre su cabeza y la sujeto con solo una de sus manos mientras la otra recorría su curvilínea figura provocando el sonrrojo de ella, nunca le habían dicho ese tipo de cosas, tampoco la habían tocado con tanta malicia. No entendía que eran todas esas sensaciones que tenía en su estomago y que explotaban por todo su cuerpo – Deja de estarle moviendo la cola a cualquier idiota... haces que quiera matar a todos esos bastardos.
-De... de... deja de to... tocarme así – los nervios la traicionaron, su fuerza la abandono – si... sino me sueltas en este momento te voy a... — no pudo terminar de hablar su boca había sido capturada por los labios del castaño, sus celestes ojos se abrieron como platos tratando de comprender que estaba sucediendo.
Ya se había acostumbrado a la oscuridad y pudo ver como las pupilas carmines de Sougo la veían con tranquilidad para luego esconderse tras sus parpados, movió ligeramente su boca mordiendo el labio inferior de la pelirroja para hacerla reaccionar.
No supo en qué momento sus ojos también se habían cerrado y sus labios correspondían los movimientos del chico, ¿Cuándo fue que sus manos fueron liberadas y se habían enredado en el cuello del policía jugando con su castaño cabello mientras la sujetaba por la cintura?
El beso se fue haciendo cada vez más intenso, más profundo... su mente quedo completamente en blanco, nunca la habían besado antes y no imagino que el primero en hacerlo sería él, cuando no pudieron soportar la falta de oxigeno tuvieron que separase.
-No puedes decir que no te gusto china... de ahora en adelante este será tu castigo por coquetear con otros tipos – la oscuridad no impedía que pudiera notar esas lagrimas que recorrían las mejillas de la yato "¿Por qué esta llorando?" Se pregunto desconcertado.
-Vete de mi habitación – dijo casi como un susurro y con la voz quebrada por el llanto. Sougo se alejo sin decir nada más y salió del lugar, ¿Cómo fue tan tonta para dejarlo hacer tal cosa? El olor alcohol que sintió mientras la besaba y más al separase le indico que todo había sido consecuencia de la bebida... seguramente no recordaría nada el día siguiente, pero ella jamás lo podría olvidar por el resto de su vida.
Su primer beso fue tomado por un ebrio que no la quería, que la veía como un juego, un maldito ebrio que por alguna razón no pudo rechazar. ¿Dónde estaba Gin-chan para defenderla? ¿Dónde estaba Sadaharu para reconfortarla mientras se perdía en su pelaje? Quería que el samurái de cabellera platinada la abrazara tiernamente mientras lloraba sin ningún temor, pero ellos no estaban... estaba sola.
#######################
ESTÁS LEYENDO
Kagura y Sougo - Aventura en Magi
FanfictionLa pelea donde Kagura y Sougo al fin se enfrentarían con toda su fuerza es interrumpida por una misteriosa luz provocando conocer a varias nuevas y extrañas persona. Deben permanecer en ese bello pero muy diferente lugar a Edo mientras encuentran un...