• Capítulo XXX •

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  Era el caso más difícil de su vida para la Detective Rocío Nievas.
  - ¡El asesinato fue un señuelo! Exclamó Rocío en la habitación del hotel donde residaba, mientras se servía otro vaso de whisky escocés.
  - ¡Claro! Volvía a afirmar.
  - ¡No me cabe duda que es un tema de ajuste de cuentas! Ese paquete que daba a entender Sofía debe hacer referencia a una sola cosa. ¡Drogas! Cómo no encontraban a Javier, decidieron matar a un hijo y esperarlos pacientemente en el funeral. ¡Eso es inteligente, pero muy cruel! Mientras acababa de un trago, el vaso con su bebida alcohólica y lo dejaba en la mesa, al lado de una radio que estaba desconectada. Sofía conectó el artefacto para distraerse un poco.
  La radio sonaba. Un tema de Los Redondos se hacía escuchar en la fría noche. Sonaba Barba Azul versus el amor letal, tema que a Rocío le fascinaba.
  - << ¡Ésta vez, por fin la prisión te va a gustar! >> Cantaba al unísono la detective, cómo olvidándose que había una muerte consumada y un posible secuestro latente en esos momentos. Aquella gloriosa melodía le devolvió el enfoque y prosiguió.
  - Vamos a pensar cómo sí estuviéramos en el otro bando. Decía para sí, Sofía mientras se servía otro vaso más de whisky.
  - Yo le entrego un paquete para alguien externo a un tercero. Y quiero obtener una cierta cantidad de dinero por ese paquete. ¿Porque arriesgaría mi vida, mi condición de ser libre para matar al tipo que me falló, pero que a la corta o a la larga no me dará ningún rédito económico?  ¡Por que si me decís, que matándolo recupero el paquete o el dinero te entiendo. ¡Pero acá no obtenés nada! Quedaba desconcertada Rocío mirando el vaso que nuevamente estaba vacío.
  ¡Ah no ser, que quieran recuperar el dinero con un rescate! ¿Pero que podes obtener de una mujer que perdió a su hijo, a su ex marido y que psicologícamente no se encuentra bien. ¡No entiendo! Bueno, ¡Basta de alcohol por hoy! Me voy a dar una ducha y a dormir. Rocío ya daba síntomas de estar algo ebria, y debía descansar. Mañana iba a ser un día largo y debía estar con todas las luces.

La Danza de la Mariposa ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora