32. Nerviosismo

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Lunes: 16 de Mayo.

Yo Liza, estoy nerviosa.

En mis 17 años de vida jamás sentí algo como eso.

Sonara raro pero así es, no ando con rodeos, si quiero algo lo consigo y ya. Me evito los nervios.

Pero en cuento vi a Matías todo mi cuerpo empezó a temblar y los temas de conversación huyeron de mi mente.

—Liza —Mencionó Matías rompiendo y empeorando mis nervios.

—¿Dime? —Pregunte algo temblorosa y escondiendo mi cara con mi bolso.

—Estas muy callada, me asustas —Matías se levantó y se sentó a mi lado.

El mismo Matías que hace unos días me quería lejos de él.

—Creí que te molestaba que hablara mucho —Respondí algo más relajada.

—Pero por lo menos salúdame boba —Me golpeo con unos de sus libros que traía en sus manos.

Mientras se ponía de pie y se alistaba por la llegada de su autobús.

—Dime si necesitas algo y no llores, porque me preocupas —Dijo de pie.

El viento hacia que su cabello se moviera.

¿Si necesito algo?

—¡Matías, sonríeme por favor! —Grite desde la silla de la parada sin siquiera pensar en lo que estaba pronunciando.

Por que después de todo, siempre estoy buscando desesperada que Matías me sonría

Matías no volteo a verme y solo se marchó en el autobús que había llegado.


PD: Gracias por leer y espero te haya gustado.

Dedicado a una persona muy linda y gentil, gracias por leer mi libro.

Bye

¡Matías,Sonríeme Por Favor!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora