39. Maldad en sus ojos

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Sábado: 21 de Mayo

De nuevo me encontraba en mi escritorio pensando en varias cosas

No, estoy mintiendo, en lo único que pienso es en Matías.

La extraña sensación de no verlo me tiene inquieta y no puedo más.

Baje las escaleras y salí de mi casa corriendo.

Corrí sin aire por la extensa calle de mi barrio hasta llegar a la casa de Matías.

Me quede en la entrada con mucho miedo mientras escuchaba un gran ruido.

—¡No sirves para nada! —Una voz de hombre menciono mientras escuchaba el golpe en la piel.

—¡Ya no me golpees!—Gritaron y por la voz aseguro que era una señora.

El ruido era horrible, golpes, ruido de cristales rotos y muchas cosas más.

—¡Papá, ya para por favor! —Note la voz de Matías.

¿Papá?

La puerta de la casa se abre y de ahí sale un señor. Molesto golpea la puerta con sus manos y después patea un masetero.

Yo me escondí en los rosales que había antes de la entrada.

Aquel señor enojado salió de su casa y a toda prisa corrió por la calle, llegando justo en frente de mí.

Golpeándome y tirándome al suelo.

—No estorbes mi camino—Se alejó de mí, dejándome tirada.

Reconocí la voz, era el hombre que gritaba.El mismo hombre a quien Matías lo llamo "papá".

No me digas que él lo golpea. No por favor.

¿De él estaba huyendo?

Como es posible que un padre deje tantos moretones a su propio hijo. Matías no es un mal chico, el se merece lo mejor.

Al ver su rostro no me molesto que me tirara al suelo, ni su aspecto me asusto, pero lo que si me aterra era la maldad en sus ojos.


PD: gracias por leer, espero sea de tu agrado

¿Que opinas de lo que sucede con Matías?

¡Matías,Sonríeme Por Favor!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora