En el bosque

Parte 41 :La marca del alfa.

El alfa yacía a su lado, demacrado y desprolijo en una cama de hospital abrasado a su luna que no despertaba hace tres días, su beta muchas veces intento hacer que al menos se alimentase, pero le era imposible; pensar en que ella le había sido arrebatada por unos días, que había perdido el deleite de su presencia por ese instante generaba en si el temor de volver a perderla hasta llego a pensar en ella como una mera ilusión que aún estaba perdida.

Siento pesado mi cuerpo, siento algo tibio sobre mí que se mueve con mis movimientos, el olor a lilas me envuelve y por un segundo caigo en el dolor de pensar que es una ilusión, me hundo las memorias frescas, el dolor en mi pecho, y el dolor de pensar en haber perdido aquello que me costó sujetar, mi alma llora y se desliza por mis mejillas, aguado dolor que escurre por mis ojos y una voz lejana que susurra a mi oído.

-Mi luna... soy yo... no es la mi dulce luz abre tus ojos, no me prives de tu cálida mirada, no me mantengas en el dolor de tu ausencia.

-... Mi alfa. Alcanzo a decir con cansancio mientras abro mis ojos, la luz me molesta, me duele, y veo como el corre a cerrar las cortinas.

-Nila... .No pude más que mencionar el poema que era su nombre, no pude resistir más las ganas de derramar miles de besos por un cuerpo que corrió la posibilidad de no ser mío, la abracé con tantas fuerzas que ella dio un gemido de dolor.

-Alistar tranquilo o la lastimaras. Dijo Anuk, el respiro tranquilo al verme consiente. -Nos preocupaste mucho, todos están afuera esperándote. Sonreí levemente y vi como Alistar respiro aliviado, acaricié ese rostro que me había hecho tanta falta, fueron un par de días, pero solo para mi fueron años, el tomo mis manos y las beso.

-Yo también los extrañe... aunque fueron solo dos días... .Mire el brazalete que le había dado a Alistar y respire hondo, ser franca verdaderamente no era lo mío, pero no serlo me puso en un gran peligro y esta vez había salido bien librada pero tal vez no fuese así una segunda. -... Hmm... Anuk puedes dejarnos solos. Dije con mucha vergüenza.

-Bien... Alistar no te pases enserio.

-Si... si vete, ve a ver a Dasha. Dije sacándolo a empujones y cerrando la puerta, era la primera vez que veía a Nila tomar las riendas y ser ella la primera que quisiese algo eso despertaba en mi un fuego que difícilmente podía calmar.

<-No lo arruines... ella quiere decirnos algo.>. Dijo Shadow al ver cuáles eran mis intenciones una vez que cerré con llave la puerta y corrí las cortinas.

-... Yo... sé que es raro que te lo pida, y también quiero lo que tú quieres ahora, pero... .Mi luna lucia tan tierna en su nerviosismo que suavemente me acerque a ella y la abrase, ella correspondió a ese abraso y respiro pesadamente tomando coraje. -Yo quiero que me marques ahora.

-... Pero es un hospital y apenas te estas despertando. Sonaba estúpido haber querido hacerlo desde el principio y ahora que tenía la oportunidad me tiraba atrás, mi lobo por otro lado acepto de inmediato.

-Alistar, él no se quedará con que lo venciste, sabe que me marcaras si no puede tenerme me matara, durante ese tiempo viví una y otra vez esa sensación de que me alejarían de ti, nuestro lazo es fuerte, pero quiero que lo sea más.

-Pero es un hospital, quiero que sea especial.

-Es solo la marca... por el momento, además mi lobo travieso dudo mucho que sea la última vez que me morderás. Vi como una sonrisa pícara se dibujaba en él.

-Mi luna me conoce bien, sabe que es lo que hare y lo que querre.Fundio sus labios con los míos con tal pación que mi piel parecía derretirse a su paso, explorando cada parte de mi boca como si fuese la primera vez que la conocía, yo apenas podía seguirle el paso, deslizo sus manos por debajo de mi blusa, recorrió cada parte de mi torso con fuerza, tratando de borrar el toque de otras manos más oscuras, recorrió con suaves mordiscos mi pecho hasta luego detenerse y mirarme con esos preciosos ojos que solo le pertenecían a él, vi como mi rostro se reflejaba en su mirada recorrió con la yema de sus dedos delineando el contorno de mis labios para luego darme un puro y dulce beso en los labios, luego bajo hasta mi cuello y sujeto con fuerza mis caderas atrayéndolas a él , sentí una fuerte presión en ellas, el gruño como si fuese un animal hundió su rostro en mi cuello absorbiendo hasta la última gota de aquella esencia que lo atraía tanto, sentí su cálida respiración en mi cuello la cual erizo mi piel haciendo que suspirase de placer , luego el abrió su boca y hundió sus colmillo con fuerza en mi cuello, se sujetó a mí con fuerza pero lejos del dolor punzante que esperaba sentí una oleada de calor que fue desde aquella marca hasta la punta de mis pies, una corriente eléctrica recorrió todo mi cuerpo y el inevitable gemido que no pude aguantar salió de mis calurosos labios, él se retiró unos centímetros lamio la herida, las sensaciones que me producía eran indescriptibles, me dio un largo y apasionado beso toque la marca que yo le había hecho y el subió la intensidad de su avance, pero luego recordé el lugar en donde estábamos y maldije hasta lo más profundo de mi ser y a juzgar por su enojo el también, nos miramos y no pudimos evitar echar a reír.

-Enserio debemos parar... esta camilla no creo que aguante. Dijo Alistar.

-Ni yo crea que pueda seguir viniendo aquí, me sentiría muy vergonzosa. Dije robándole un beso.

-Mia... .Dijo besando la marca que hace unos minutos me había hecho.

-Mío. Dije yo haciendo lo mismo.

-Odio que quieran verte, solo te quiero para mi ahora. Dijo sujetándose a mi

-Y en estos momentos yo quiero estar en casa... pero ellos te ayudaron además tienes que darle un descanso a Anuk.

-Pero... .Dijo enfurruñado.

-Pero nada, recuerda que ellos también empezaron una relación y por todo esto no pueden avanzar.

-Les das más importancia a ellos que a mi... Auch.Dijo al recibir un coscorrón de parte de mi luna.

-Tonto... si ellos están con sus parejas no nos interrumpirán como las otras veces, pero entiendo si no quieres estar conmigo creo que me quedare aquí en el hospital. Dijo burlonamente.

-Ok... ok ... entendí.

Se había vuelto astuta, pero tenía razón, a regañadientes deje la habitación y los deje pasar, primero a las mujeres yo me quede con los varones.

-Nila. Dijo Silene saltando a la cama seguida de Anika y Dasha.

-Hmm... aprecio sus afectos, pero me están asfixiando. Dijo Nila palmando con suavidad en la espalda a cada una.

-Te marco... Hmm ¿Interrumpimos algo?. Decía Silene saltando de felicidad.

-Silene. Dijo Nila disimuladamente mirando a Dasha y Anika. -No... no lo hicieron.

- ¿Duele?. Pregunto tímidamente Dasha.

-No... para nada, esto te recordara a él cuándo no esté cerca.

-Para mí es como si dijera que eres un objeto. Dijo Anika.

-No creo que te guste que todo el mundo se te acerque como si fueses de todos, o que dejes que los demás se acerquen a lo que es tuyo. Dijo Silene molesta con el comentario.

-Hmm... Dasha no temas a lo que sientes te puedo asegurar que Anuk pese a que lo disimule tiene el mismo temor que tú.

-Pero... el... siempre está ocupado y cuando viene a verme no puede decir nada.

-Entonces ve tu a él, estoy casi segura que está en la oficina de Alistar, ve y dile que te preste más atención. La niña se puso completamente colorada y salió de la habitación.

-Tu hermana que es más pequeña es más inteligente que tú. Dijo Silene, Anika solo le dirigió una mirada maliciosa.

-Déjanos solas Silene.

-Ok... pero no esperes mucho es muy terca. Dijo yéndose.

-Anika, deja de darle vueltas al asunto y baja la guardia por unos segundos, crees que el la tuvo fácil, tienes una familia que te adora, todo lo que el no tuvo, te necesita a ti, no le es fácil tomar el mando de una manada en una tierra que conoce por temporadas, solo no seas tan tosca pruébalo solo por unos días, un día.

-Bien..., pero solo para probarte que estas equivocada. Dijo saliendo alborotada de allí.

-Vamos a casa. Dijo Alistar recargado en la puerta.

Fin del Capitulo

Espero que les haya gustado, va a haber novedades *-*, solo puedo decir eso jajaja, besos, nos vemos en el siguiente capitulo.