En el bosque

Parte 32: ¿Quien es mi mate?

Anuk pese a lo que le dije termino por causar tanto revuelo que la casa que alojaba a los nuevos reclutas y aquellos pertenecientes a la manada de Aaron y Nilak esperaban en sus puertas mientras que el resto miraba expectante en los balcones y ventanas, verdaderamente estábamos dando la madre de todos los espectáculos Kunuk, su beta se adelantó a mí, seguido de Dagonet un beta que el padre de Aaron había puesto en su manada, un muchacho de no más de veinte años de cabello largo recogido en un rodete color negro, tenía ojos azul profundo casi negros, irradiaba autoridad y para quien no supiese distinguir diría que es un alfa.

- ¿Alistar que sucede?. El miro mis ojos y se sorprendió y luego sonrió al ver a Nila acercarse lentamente.

-Encontró a su mate, sabe que es alguien de los que viven aquí.

-Alistar, no me importa iré de todos modos.

-Anuk... tengo más rango que tú en la manada, ¿Te crees con el derecho de hacer tanto alboroto aun en esa situación?. Dijo Kunuk con severidad, utilizando su tono de beta, pero parecía no hacer efecto, el repitió su llamado de autoridad, pero no parecía prestarle atención.

-Anuk, te vas a la camioneta ya. Dije y el molesto lo hizo entonces yo también entendí, ya no era beta de Nilak era mío, podría haber pensado que era mi tono de alfa de liderazgo, pero aun sin usarlo me hacía caso, yo... estaba empezando a tener una manada.

-Parece que nos quedamos sin beta y ganamos un alfa. Dijo Kunuk. -Y también otra... .Pero lo detuve, no era que no quisiese que lo diga me llenaba de orgullo, pero habíamos hecho los exámenes y tardarían más de un día en saberse, habíamos acordado con Nila de hacer oficial el hecho de que era mi luna solo después de su transformación así no estaría tan vulnerable.

-Shhh... no es momento. Dije acallándolo.

-Él es un poco lento y tartamudea cuando tiene que decir las cosas... la tendrás difisil. Dijo a Nila quien encendió sus mejillas como una lamparita.

-Deja de mirarla. Dije yo molesto, cualquiera diría que era el alfa celoso el que hablaba, pero conocía a Kunuk era el mujeriego de la manada, sé que no perdería el tiempo con Nila, por eso me antepuse a ella, tenía que dejarle bien en claro que no quería que se acerque,

-Oigan... acepto el hecho de que ambos se conozcan y que seamos una manada de paso mientras nuestro alfa busca su luna, pero no permitiré que nos dejen al costado de esto. Dijo el beta de Aaron molesto por ser ignorado.

-Cálmate niño, Anuk busca a su mate, tiene una condición delicada en su conexión, no justifica el hecho de tanto alboroto, pero tampoco tu reacción. Sabía que a Aaron no le gustaban ese tipo de reacciones.

-Yo iré con Anuk, tu ve a hablar con ellos adentro. Dijo mi hermosa luna tratando de calmar los ánimos, lo cual hizo entendía por que el otro alfa la buscaba, no teníamos un vínculo fuerte solo la palabra de convivir no nos habíamos enseriado y ya impartía esa confianza que una luna marcada impartía.

Ahjjj estaba muy nerviosa, de hacer lo que hice, pero debo confesar que verlo ponerse celoso con ese beta y defenderme así me enternecían.

-Hmm una Luna enamorada. Dijo Burlonamente Anuk al ver mi rostro colorado y mis ojos que no despegaban mirada del lugar.

-Me das celos... lo primero que quiero hacer es abrasarlo, sea lo que sea está pasando por mucho.

-Sabes que está aquí, tienes que calmarte, si es alguno de los que conozco pasaron por mucho.

-Cuéntame de ellos. Dije más animado, me nacía una envidia sin nombre y unos celos atroces tras enterarme de que ella estaba cerca de mi mate y yo no.