Parte 23: Alfa de Liderazgo (Parte 2/3)

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Mis ojos ya no eran los de un alfa común los tenía como los de una alfa de liderazgo, recuerdo esa palabra y mi despedida, era cierto, había dejado de ser lo que era mi naturaleza por qué quería estar con Anelis, la asustaba la idea de un alfa que dominase a otros, un lobo que fuese más grande de lo normal y unos ojos que parecían mezclarse con los de un vampiro, la hacía pensar que en un arranque de ira mío yo lastimaría a Armus o a ella misma, y no habría nadie que me parase entonces deje la manada que me vio nacer solo para seguirla, no es que quisiese quedarme en ella, no le insistí, todos me miraban y bajaban su mirada, los alfas me temían y los menores a ellos también, sabía que me llamaban monstruo y yo los dejaba hacerlo, por eso me fui, habían empezado a conspirar y yo no quería que a ella le pasase algo, estaba en cinta pero no era mío aun así lo sentí como propio; ahora estoy aquí, sentado en una cama de hospital mirando ese color de ojos que no se van, suspiro con pesar y miro a Nilak.

-Deja de bajar la cabeza hermano, sabes que eso jamás me gusto. Dije desplomándome sobre el espaldar de la camilla.

-No puedo evitarlo si estás tan tenso, ¿Qué harás?, ¿Seguirás corriendo en círculos?.

-Primero dime cómo es que llegue aquí.

-Luego de escuchar ese aullido, la manada se puso frenética algunos estaban asustados y otros sentían la necesidad de ir a ver de dónde provenía ese sonido... junte a Anuk, Ura y fuimos hasta allí, te encontramos hecho un ovillo, ni Anuk ni Ura comprendían bien, las pisadas pasaban lo que se podía esperar de un alfa normal pero al estar en tu forma humana los dejo confundidos, tratamos de despertarte pero tú no recuperabas la conciencia, en verdad parecías muerto apenas si se podían sentir tus signos vitales... estuviste dormido por más de tres días.

-¿Qué?.

-Me escuchaste, tres días... ¿Qué paso?... susurrabas cosas, pero ninguno entendía que.

-Eres mi hermano, promete que no le dirás a nadie.

-Sabes que no lo hare.

Tome la decisión de contarle todo desde mi emparejamiento hasta aquel extraño sueño o lo que sea que haya sido que paso con Anelis, el me miraba con una mezcla de asombro y alegría seguido luego de tristeza yo me sentía más liviano al contarle pero al recordar el rechazo de Nila volvía a sentirme abrumado y esa sensación de impotencia hacia brotar la voluntad del alfa en mi Haciendo que Nilak luche por no ser dominado, trato de calmarme respiro hondo y Nilak deja de tensarse y apretar sus puños, no es que no pudiese controlar lo que soy, es solo que son muchos años de no usarlos.

-Falta de practica hermano... .

-Hmm... sabes lo que la chaman decía, que los espíritus de los que se fueron intervienen cuando el alma de quien cuidan esta desequilibrada, si Anelis y Armus te dijeron que los dejes ir déjalos ir aun cuando no sientas nada por Nila... ¿Por qué no sientes nada por Nila no?.

-No lo sé... si hubiese pasado desde el principio diría que lo que siento es por qué la madre luna así lo quiso, no nació de mí.

-Pero tu sentías algo antes de que pasase lo de la plaza.

-Sentía algo, pero no sé si es amor. Dije contrariado.

-Si lo sientes con más intensidad es amor... mírame a mí y a Silene, ella me odiaba desde el principio no dejábamos de pelear ni por un segundo, pero nos entendíamos de alguna manera, luego cuando la diosa nos unió, nos pasó lo mismo, ella no era un lobo como yo huimos de lo que habíamos empezado a sentir y pusimos miles de excusas, yo en la tierra y ella en el cielo, que nuestros hijos no serían normales, que los de su clase andaban en solitario y nosotros en manada, pero sabes que paso.

-No... nunca me lo dijiste.

-Que por más que fuésemos opuestos y hubiese una línea que nos separaba esa misma línea nos unía, el punto es que no importa cuánto luches amor es amor y la forma en que la proteges no es ni fue la de un amigo que siente pena por la situación de otro... diablos hiciste una rabieta de mil demonios cuando Aarón fue a vivir con ella y cuando aun no sentías nada Anuk me conto que marcabas el número de casa cada veinte minutos y luego te detenía antes de llamar.

- ¿De qué me sirve esa revelación?, ella me rechazo.

- ¿Y por qué crees que lo hizo?, puede escuchar a tu lobo cuando eres humano y escucharte a ti cuando eres lobo, no te teme en lo absoluto y eso es por qué te comprende... Alistar... ella te dejo ir comprendió que, si Anelis ocupa todo tu corazón, no habrá lugar para ella nunca no la amaras solo estarás con ella por que el instinto te lo manda.

-Entonces ahí tienes tu respuesta. Ya todo estaba acabado, si ella me había dejado ir yo ni siquiera podía acercarme para ver hasta donde llegaba lo que sentía por ella.

-Cómo eres idiota... amor pasa y hazlo entrar en razón. Dijo Nilak frustrado rascando su cabeza; la puerta se abrió y entro una visión de pesadilla Silene con una mirada seria me miro de arriba hacia abajo, tomo el expediente que colgaba de la camilla, lo leyó detalladamente y luego camino con lentitud hacia mi calmadamente me sonrió para luego alzar la carpeta y golpearme en la cabeza con ella, hubiese seguido de no ser por Nilak quien la tomo de la cintura y la alzo por los aires aun así ella se resistía, mi pobre hermano de armas en pos de salvarme no puedo evitar recibir unos cuantos golpes por mí.

-Me la debes Alistar y no bromeo... Auch... amor para... el cabeza hueca necesita de tu concejo.

-¡¡No quiero!!.

-Amor... la más bella... mi más hermosa luna... mi pequeña avecilla. Dijo amorosamente depositando un sinfín de besos en la marca que le había hecho en el cuello a Silene. -Sabes que te quiero... que amo lo que haces. Ella parecía ronronear con cada caricia que él les propiciaba.

-Me va a dar diabetes, por favor paren. Dije tapándome con la sabana.

-Habla con el... esta de flojo... y no quiere entender.

-Me dejas sola Nilak.

-Tú me dejas solo con ella y te mato Nilak.

-Tiene razón amor... lo necesito para que proteja a Nila, además ... creo que va a ser un castigo más que interesante tenerte a ti de concejera, ¿No lo crees?. Al comprender lo dicho por Nilak vi como una sonrisa sádica se dibujó en Silene.

-Si no sintiese nada por ti ya, no hubiese llorado hasta desfallecer.

-Pero... .

-Te callas... quieres recuperarla, eso lo veremos lobito... te dije que te haría sufrir... no sabes cómo voy a gozar haciéndolo. Dijo tomando mi mentón con la punta de su dedo. -Enserio lo voy a... disfrutar. Dijo cara a cara, pero escucho a Nilak aclarar su garganta disconforme.

- ¿Amor estas muy cerca no crees?. Ella solo le sonrió y se alejó de la habitación.

-Celoso... .

- ¿¡Qué?!, si estaba cerca, cambiando de tema, esto lo sabemos solo tú y yo, Oraka se contactó conmigo, dijo que esta noche enviaría a alguien que conocía de la unión y de la naturaleza de los padres de Nila, si conoce de lobos y zorros mágicos podría ayudarnos.

- ¿Quién más sabe esto?.

-Solo nosotros dos... creo que hay un traidor, ese alfa que te visito en el bosque sabía algo y no hay manera de que haya salido de mí.

-Bien... ¿Oye Nila... ?.Dije cabizbajo.

-Aunque pasaron tres días no la reconocerías... vístete, vamos a verla, a menos que quieras andar mostrando tus nalgas con esa bata.

-Idiota, sal ya.


Fin del Capitulo


Segunda parte del especial, les aviso que a partir del domingo y cada domingo empezare a publicar las historias extra sobre personajes secundarios de la historia, son historias cortas, la primera es de Nilak y Silene, pero ATENTOS A LA TERCERA PARTE DEL ESPECIAL ;)

En el bosqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora