A medida que avanzábamos a mi casa quería que por alguna razón tuviesen que irse, sabía que tarde o temprano tendría que hablar con ellos sobre ella.
-Hey parece que vas a la horca. Dijo Anuk sacándome de mis pensamientos.
-Ah ... lo siento es que estaba pensando en cosas.
- ¿Qué cosas?. Dijo mientras estábamos en el súper de la aldea.
-Esto parece charla de chicas Anuk.
-Estaría más que feliz si el tema fuese una chica, pero desde ayer estas raro y hasta me arriesgaría a decir que desde lo de tu accidente.
-Sabes que una persona herida y sola en el bosque en el invierno no durara mucho. Dije tomando unas cuantas bebidas.
-Sí, pero me preocupa más el hecho que no pueda ser rastreada, hasta los lobos emitimos aromas.
-Sí, ¿Tu qué harías?, ¿Digo si la encontraras?. Se me soltó la pregunta sin poder detenerla.
-No lo sé, supongo que llevarla al concejo. Dijo el tomando un par de cervezas.
-Hey, no tantas, ya sabes cómo se pone Ura con el alcohol, empieza con que no encontró su mate y luego insultando a todo el género masculino.
-Tu porque no la soportaste con resaca insultando por que no la detuvimos. Dijo riendo, pude ver y sentir algo en Anuk, cada vez que hablaba sobre Ura, me dio nostalgia y mucho dolor recordar aquel sentimiento. -Tú y ella son muy unidos.
-Nos conocemos desde bebes prácticamente... yo lo siento. Dijo al ver mi rostro y mi mirada perdida.
-No tienes por qué disculparte, ni tampoco callarte solo por no ponerme mal a mí, vamos o ella vendrá hecha una furia.
-Peor se pondrá a cocinar y necesitaras una cocina nueva. Dijo entre risas.
No podía atrasarlo más, subimos las cosas a la camioneta y fuimos hacia mi casa, Ura era una muy buena rastreadora sentiría a Mila de inmediato, no podía olerla, pero seguro la detectaría.
Llegamos, conté hasta tres respiré hondo y que pasara lo que pasase, ya estaba jugado; Anuk cargo una bolsa yo la otra y para mi sorpresa encontrar a Ura acomodando todo sobre la mesa y yendo hacia la cocina, vi como Anuk con rapidez soltaba todo, menos mal que yo llevaba las bebidas, corrió hasta alcanzarla y la acorralo en la pared de la cocina ella subió sus brazos por sobre su cabeza sosteniendo una sarten mientras el la tomaba por las muñecas.
-Vayan a un hotel amos. Dije divertido por la situación.
-Vamos Alistar, no tengo tan mal gusto.
-Hey cariño un día conmigo y te haría ver las estrellas. Dijo con una mirada seductora hacia Ura, mientras que Alistar colocaba las cosas sobre la mesada.
-Suéltame y te hare ver las estrellas. Dijo sosteniendo con más fuerza el mango de la sarten.
-Si rompen algo lo pagan.
-Me gusta más del tipo intelectual como mi Alistar. Dijo zafándose de Anuk para abrasar por detrás a Alistar.
-Yo también me vería sexy si uso anteojos, ¿Además un lobo con anteojos?.
-No puedo cambiar mis ojos a los de un humano. Se sacó los anteojos y se podía apreciar un par de bellos ojos amarillos casi dorados. -Y no es porque este en posesión mi lobo.
-Aun así, me veo mejor que el con ellos, ¿No?. Dijo colocándose los anteojos para lucirlos muy exageradamente haciendo todo tipo de pantomimas.
-Es bizarro y asustas ya sacatelos,Dijo Ura.
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En el bosque
ПеревертніUna extraña joven es hallada en el medio del bosque por Alistar, todos desconfían de su llegada a la manada y de su inusual naturaleza, mientras que ella solo confía en el hombre que huele a lilas .