En el bosque

CAPITULO BORRADO SIGUIENTE AL 68

No sé qué me sucedió, pero verla llorar de esa manera, siendo apañada por Nila, y hasta Silene y mi propia hermana, realmente me había pasado de la raya, Alistar no me miraba con buena cara ni tampoco los otros, ver mal a sus lunas por algo que yo había hecho lo había jodido en grande.

Se había acordado que tanto los vampiros como los licanos nos reuniríamos para dar la bienvenida al mithandir, ellos son de juzgar mucho las acciones hasta las más mínimas y son de enojarse fácil si ven que tratan de engañarlos por lo que mostrar una buena disposición era imprescindible.

-Enserio no quiero que vayas... te perdone el cansancio ayer pero hoy quiero estar contigo. Dijo Zatar abrasándome por detrás y llenándome de besos a medida que intentaba hacer que me recostase otra vez, no sé qué había pasado en ese viaje, pero sus brazos me parecían como fuego quemaban mi piel, se veía más delicada y hermosa, sentir su ausencia esos días me había puesto en perspectiva el hecho de que me hacía falta, Alistar tenía razón, Anuk también pero tampoco era como si pudiese ser cariñoso era vergonzoso.

-Pero tenemos que ir o se verá mal... además no muchas veces sales, vamos, quiero que vengas.

Era la primera vez que el me pedía que los acompañase, el viaje aunque doloroso para mí, lo había hecho darse cuenta de lo que era tener una luna, porque se notaba más vergonzoso que de costumbre pero sin embargo al contrario que las otras veces el tímidamente avanzaba hacia mí, tampoco se resistía a que me cambiase cuando él lo hacía, enserio lo disfrutaba.

Al final nos vestimos y fuimos hacia allí su hermana corrió a abrazarlo hasta casi subirse encima de él, me molesto, pero era su pequeña hermana melliza.

-Pequeña. Dijo el sonriéndole, quería esa sonrisa para mí también.

-No quiero que te juntes con esa zorra de Sathia.

-Es una buena amiga solo eso Dash.

-Eres un tonto. Soltó a su hermana y fue hacia donde estaba el alfa.-Esa vampiro no hace más que pegársele e insinuársele como la resbalosa que es.

-Ella es la que me decias.Casi se asustó cuando intente hablar con ella.

-Si... hace que todos se peleen para terminar haciéndose la santa.

-Se acerca a mi mate no llegara hacer nada.

-Dasha deja de meterle ideas a mi lun... Zatar.

-Di luna, así parece que tienes vergüenza de mí.

Me lo había pedido muchas veces pero aun no podía llamarla de esa manera, quería que hubiese más sentimientos y no tato temor y vergüenza.

-¿Dónde está Silene Nilak?.Pregunto Alistar.

-No se sentía bien, además mis cachorros heredaron la molestia de su padre con los vampiros, la guardiana que los acompaña fue a ultimar detalles de seguridad de ellos y ellos empezaron a patear fuerte el vientre de Silene.

-¿Y Silene?.

-Quería patearla a ella... de todas maneras quiero que después la veas. Dijo preocupado.

-No hay problema, ¿Cómo esta Zatar Kenneth?.

-No quería venir pero sabe que la situación no está como para oponerse.

-Están todas las lunas menos la del alfa Nilak, ¿Sucedió algo?. Dijo una de los líderes, aquella que llamaban Ofelia.

-Está bien, solo que no puede venir.

- O tal vez sea una luna de baja categoría como para no presentarse a la recepción de un Mithandir .

De un segundo a otro Nilak se acercó a él y Ofelia se interpuso.