Chico Malo; myg

➵Eso le pasará a cualquiera que se te acerqué.

-Disculpa.

-¿Por qué te disculpas? -dijo volviendo abrazarme.

-Porque me defendiste aunque yo no sea de tu agrado.

-Eres de mi agrado.-afirmó.

Confirmo que Yoon Gi ha cambiado, no es el mismo.

Separandonos tiempo después de aquel tierno abrazo, supe que YoonGi se notaba cansado.

-Ey, tus mejillas están ardiendo -dijo haciendo que me tocará mis rojizas mejillas y ponerme aún más tímida.

-Ah..Yo.. -quité mis manos y lo mire- Te vez cansado YoonGi.

-Lo estoy.-afirmó dándole algunas miradas a aquella banca desocupada.

-¿Quieres sentarte? -pregunté viendo que YoonGi se dirigía hacía ella- ¿O ir a mi casa? Allá podrías..

Regresó sus pocos pasos al escucharme -Vamos.- dijo sin ningún gesto pero con las mejillas ruborizadas.

-Anda, es por acá -lo guíe mientras observaba su rostro rojo.

Llegando a casa, noté que la puerta estaba abierta.
¿Mamá? ¿Será que llegó temprano? Pero ¿por qué dejó la puerta abierta?

-¿Mamá? -entré preguntando por ella.

-Estoy por aquí -gritó mamá desde la cocina.

-Pasa YoonGi -le dije en voz baja a el y pasamos a la cocina.

-____, sólo vine por algunos snacks para m..¿Quién eres tu? -preguntó mamá mientras su gesto cambió.

-Oh, El..e-el es YoonGi..

-Ah.

-Hola Señora. Soy Min YoonGi, voy en el mismo instituto que ____.

-Ah, muy bien.. -sonrió mamá y nos dio una mirada- ¿Venían ambos pensando que la casa estaba sola? ¿Qué pensaban hacer? -dijo mamá pícara.

-Ah, yo no.. -dije tímida- sólo le ofrecí agua a YoonGi porque me ayudó hace un rato.. Estuvo un chico por hacerme daño. -baje la cabeza mientras iba hablando.

-¿Qué? ¿Qué te hicieron? -dijo mamá exaltada.

-Más tarde te lo digo.. -alze mi mirada- Ahora sólo buscaba que YoonGi descansara.. Sólo eso.

-Oh no -mamá vió su reloj- Tengo que irme.. es tarde..  !confío en ustedes chicos! Más tarde regreso, cuiden la casa. -dijo mamá para después darnos un beso cálido de despedida.

-Cuidese señora. -dijo YoonGi frío como siempre aunque trató de verse noble.

-Tu también Min YoonGi..-dijo mamá dibujando una sonrisa en ambos.

Salió mi madre y ahora quedamos solos, YoonGi y yo.

-¿Quieres sentarte? Te llevo el vaso de agua..-dije adentrandome más a la cocina.

-Bien.-dijo llendose a la sala.

Servi y se lo llevé rápido.
El lo tomo y se lo bebió todo de un sorbo dejando caer algunas gotas sobre su cuello hasta descender a su camisa.

-¿Qu-quieres más?

-No, quedé satisfecho. -dijo secándose aquellos mojados y delicados labios que tanto me gustan- siéntate. -ordenó mirando el lugar del sofá alado de el.

Obedecí.

-¿Has visto como eh dejado a aquel imbécil que intentó hacerte daño?

-Si..

-Eso le pasará a cualquiera que se te acerqué.

-YoonGi..

-¿Me escuchaste? -asenti con mi cabeza- Así que ten cuidado y obedece mis palabras.