El encuentro

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Anna salió a inspeccionar el perímetro, como le habían enseñado Teresa y el resto del grupo. Esta era la primera vez que la dejaban sola, debía recorrer los cinco kilómetros que había entre el campamento y las afueras de la ciudad infestada de raros, en busca del grupo A. Si los encontraba debía avisar a las demás rápidamente y ellas sabrían que hacer.

Llego al límite del perímetro y se sentó a descansar, se había acostumbrado al calor pero aún así le seguía afectando.

Se estaba levantando para dar media vuelta cuando detectó movimiento cerca suya, buscó de donde venía el sonido y descubrió un grupo de unas siete personas, todos chicos excepto una chica hispana.

El grupo se sentó bajo la sombra de unos árboles a descansar, un chico asiático gritaba a todos los demás, a su lado y de espaldas se encontraba un chico rubio y fuerte, que lo miraba sin decir palabra. Un chico moreno le gritaba a su vez y los demás estaban demasiado exhaustos para hablar.

Anna corrió hacía el campamento para alertar a las demás.

- Chicas, están aquí. Venid, se han parado a descansar- Anna apenas podía articular palabra después de la carrera.

- ¿Estás segura? -Teresa se acercó a ella, su expresión era firme.

- No creo que mienta en esto, venga, coged vuestras armas.- una chica llamada Emma lanzó una mirada desafiante a Teresa.

- Emma, ¿recuerdas quién es el líder?  Soy yo, a ti te quitaron el puesto después de darse cuenta de lo necia y patosa que eres. Coged las armas! Se van a enterar...- Teresa cogio un par de cuchillos y corrió por la dirección que había señalado Anna- Amy, ya sabes que hacer cuando llegue el momento. No olvides las órdenes. Amy asintio y cogio la cuerda qur Teresa le tendía.

Todo el grupo corrió hacia el lugar dónde Anna los había visto. Cuando llegaron ellos todavía seguian igual, el chico asiático había dejado de gritar y todos dormitaban bajo los árboles.

Teresa se aproximó al chico moreno y le colocó el cuchillo en el cuello, él se desperezó y sus ojos miraron a los de Teresa, ese chico le tenía mucho afecto, aunque ella parecía inmune.

- Teresa...- murmuró, bajó la mirada a su cuello.- Qué...

-Calla, levanta. Vas a hacer lo que te  diga- Teresa lo miraba impasible, los ojos del chico expresaban una gran tristeza. Anna sintió pena por él y se encontró culpable de la infelicidad del chico.

Los demás del grupo parecieron advertir su presencia pero ya los tenían acorralados, intentaron zafarse pero les fue imposible, ellas los doblaban en número y armas.

Anna casi no podía alcanzar a verlos, se encontraba a varios metros de distancia con Amy y Luce detrás suya. Mientras contemplaba la escena notó como Amy y Luce murmuraban entre ellas, se giró para ver que estaba pasando y en un abrir y cerrar de ojos ellas le ataron la mano a las espaldas.

- Amy, ¿Qué pasa? ¿Por qué me haces esto? - Anna se sentía traicionada por la que había parecido su amiga en el campamento.

- Anna, nosotras solo cumplimos órdenes. Teresa nos dejó claro lo que debíamos hacer llegado el momento, intentamos que te dejara quedarte en el grupo... pero se negó rotundamente- Amy intentaba no mantener contacto visual con Anna mientras avanzaban hacia el grupo A.

- ¿Tengo que ir con ellos?, ¿me abandonais aquí? - preguntó Anna

- Irás con ellos y Thomas vendrá con nosotras, es un intercambio- contestó Luce, cada vez estaban más cerca de ellos. En su voz había un tono que le pedía perdón pero Anna hizi caso omiso.

- Pero yo...- la ira de Anna iba aumentando conforme se acercaba a Teresa, ella era la que no la quería allí.

- Bueno Anna, que te lo pases bien con ellos. Eh,-Teresa se dirigió al grupo que la miraban con gran desprecio.- ahora Anna será vuestra carga, podéis torturarla, matarla, quemarla o incluso dejarla con vida. Yo la quemaría pero os lo dejo en elección, y nos llevaremos a Thomas en su lugar.

Teresa le lanzó una última mirada de desprecio a Anna y le lanzó un pequeño cuchillo a los pies, después cogio a Thomas y le pego un cabezazo contra el suelo y lo dejó inconsciente. El chico asiático intentó impedirlo pero el puño de Teresa acertó en su boca.

- Minho, aprende modales, si alguno de vosotros intenta seguirnos mataré a Thomas, y lo digo en serio. Demasiado que os dejamos con vida- Teresa y el grupo B se giraron y tomaron una dirección distinta al camino que llevaba al campamento.

Cuando Anna ya no alcanzaba a verlas se giró para analizar a su nuevo grupo, el que supuestamente tenía el permiso para matarla o torturarla. Con miedo giró lentamente su cabeza e intentó mantener una expresión seria y desafiantes. Cuando se hubo dado la vuelta unos ojos verdes la contemplaban con una transparencia que la dejó sin habla.

'La mediadora'(TMR)NewtDonde viven las historias. Descúbrelo ahora