『Mi Mariposa Azul; Libro 2』«Gruvia; a.u»

« (8) Sentimientos Enredados »

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A Gajeel se le cayó el cigarrillo que iba a encender con el encendedor al llevar a los labios gracias a la noticia de su mejor amiga Juvia. Ella estaba en su casa, posterior de estar con su ginecóloga escuchando las explicaciones de su embarazo, del por qué ella no lo notaba y dar una pequeña revisión por medio de una ecografía a su bebé, corrió donde Gajeel. Es al primero a quien debe contarle, a Gray no sabe cómo darle la noticia.

Gajeel guardó el encendedor, ahora menos se pondría a fumar frente a ella.

Estaban en la mesa del comedor, Juvia pidió enseguida un yogurt con avena, su ginecóloga fue muy estricta con su dieta, pues había bebido alcohol, comido torta como si no hubiera un mañana, de nada se cuidaba, ¡tenía una vida normal! Ya no podía hacer tantas cosas, teniendo mucha suerte y bendición de que su bebé estuviera bien firme en su útero y creciendo sano.

Juvia le pidió disculpas mil veces a su bebé, no sabía que lo esperaba, si lo hubiese sabido sería más cuidadosa. Perdonará a mamá, ¿verdad?

— ¿Tres meses? —dijo Gajeel con cara de espanto y preocupación—  ¿Cómo diablos no te diste cuenta?, las mujeres deben saber que están embarazadas, es obvio.

—No es tan obvio, Gajeel-kun —respondió calmada, llevando una cuchara de su pequeño postre a la boca, masticando y tragando—. ¿Has visto el programa de televisión "No sabía que estaba embarazada"?

—Sí. —arqueó una ceja cruzándose de brazos.

—Pues, es algo así.

—Pero mujer...

—Gajeel-kun, a Juvia le llegó el periodo el primer mes, era más que obvio que no podía estarlo.

—Entonces explícame cómo diablos quedaste embarazada, ¿obra del espíritu santo?, ¿acaso Gray te visitó en su forma astral en tus sueños? —sólo le pedía entender el cuerpo femenino de ella, cada vez comprendía menos a las mujeres.

Juvia suspiró y le explicó todo como si fuera una clase de sexualidad en la escuela, no había tenido los síntomas normales de una mujer embarazada normal, cada mujer es diferente; y cada mujer tiene suerte o no, al fallar una tableta del anticonceptivo. Gajeel entendía un poco, era enredado, pero lo importante es que Juvia está embarazada de tres meses y Gray todavía no lo sabe. ¿Qué piensa hacer?

—Contárselo —respondió con sencillez—, Juvia planea ir a Londres en unas semanas, quiero darle una sorpresa.

— ¿Con qué dinero? —no estaba en contra de su idea, le preocupaba que si embarazada podía tomar el avión, ¿no le pasará nada malo?

Juvia dijo que no, habló con su ginecóloga, todo estaría bien si tomaba las medidas necesarias. Sobre el dinero, lo está ahorrando desde hoy, nadie tiene que saber de su noticia, nadie, hasta que ella se lo dé a Gray, ¿entendido?

—No me digas a mí, tú eres la que abre la boca. —su ceja perforada de alzó. La joven Lockser infló las mejillas, porque él tenía razón.

Nadie más que Gajeel lo sabría, su boquita tenía que cerrarla bien, aguantarse las ganas. Ahora le quedaban sus padres, a ellos también tiene que pedirles no decir nada hasta darle la noticia a Gray.

—Embarazada, ¿eh? —mencionó Redfox dibujando una sonrisa, poniéndose de pie, yendo frente a Juvia a extender los brazos a cada lado—. Dame un abrazo, tontuela, gihi.

— ¡Sí! —saltó de su asiento llena de felicidad, abrazándolo.

—Ahora serás más cuidadosa, nada de alcohol, nada de tortas, nada de estrés. Sobre lo último, debes relajarte con los estudios y el trabajo.