"Drag Me To Madness" (Joker y Harley)

Capítulo 25

"Un suceso inoportuno"

Al llegar a su casa, Harleen comprendió que Leeland y Strange estaban completamente fuera de juicio.
Odiaban a los internos, se notaba.
El informe de Arkham sobre los pacientes no se parecía en lo más mínimo.
Arkham le prometió reformar los Folders y ella se había ido más tranquila.

Eran las 4:00 am cuando el celular de Harleen comenzó a sonar.
Entre dormida, se estiró hacia su izquierda y tomó el teléfono que reposaba sobre la mesa de luz.

-Harleen Quinzel...-Dijo con voz ronca.
-Harleen, es urgente, tienes que venir a Arkham.-Era la voz de Jeremiah.

Se despabiló de golpe sentándose en la cama y pasando su mano por sus ojos.

-¿Qué sucedió?.-
-Sólo necesitamos que vengas...-

Harleen colgó y salió disparada a Arkham.
Traía su pijama de piernas negras y remera roja puesto, tenía un aspecto terrible, tenía el cabello completamente alborotado y el maquillaje corrido.

-¿Qué pasó?.-Preguntó Harleen cuando se encontró cara a cara en la entrada con Arkham.
-Tienes que ver esto, eres la única que puede hacerlo entrar en razón.-

Harleen supuso que se trataba del Joker.
Corrieron por los pasillos hasta el nivel 3 de máxima seguridad.
Se toparon con la escena del Joker, aún en su uniforme de interno, con una navaja sobre el cuello de un enfermero, tomándolo por detrás y un guardia tirado, inconsciente a sus pies.

-Debes entrar ahí, y hacer que entre en razón.-Le dijo Arkham.

Harleen no lo pensó dos veces y tomó las llaves del guardia de seguridad que los había llevado hasta ahí.
Ella misma se encargó de abrir la celda.

-Cierra.-Le dijo el Joker seriamente.

Ella se dio vuelta, y cerró la celda con llave.

-Tira las llaves.-

Tiró las llaves al pasillo.

-Muy bien...eres obediente.-Le dijo el Joker sonriendo.
-Joker...escúchame... esto no...
-Si quieres llegar a algo, ellos se tienen que ir.-La cortó señalándole con la cabeza a Arkham y el resto de los guardias.

Harleen se dio vuelta y asintió con la cabeza.
Arkham le devolvió la mirada y se fueron.
El Joker se movió con el hombre aún en brazos, asomando la cabeza.

-Muy bien princesa... tu... escoria, puedes irte...HHAHAHAHAHAHHA-Largó una risa atemorizante.-Pero no puedes, porque la doctora tiró las llaves...¿No?.-

El enfermero temblaba, el Joker lo había soltado.

-No te preocupes, esto se arregla fácil.-Le dijo el Joker tomando la silla que estaba al lado de su litera y rompiéndosela en la cabeza al enfermero.
-¿Qué haces?.- le gritó Harleen tirándose encima del hombre para asesorarlo, había perdido la conciencia.
-No te preocupes, el está bien... ahora esto es entre tú y yo...calabacita...-Le dijo acercándosele.
-¿Y ese apodo?-Le preguntó Harleen alejándose.
-Todos los martes eliges puré de calabaza para el almuerzo...¡¡¡es tan tierno!!!...-Gritó echándose a reír desenfrenadamente.
-Joker...escúchame, esto que estás haciendo NO está bien...no sabes lo que me costó defenderte con el incidente de Strange... Leeland y el parecen estar complotados contra ti... y contra mi...se ve...-Lo ultimo lo dijo en un susurro.
-¿Por qué no está bien?, ¿Acaso los defiendes?, creí que no eras como ellos.-Su voz parecía quebrarse de ira.
-No... no me malinterpretes...lo que quiero decir es que...-
-Cállate, Entiendo perfectamente lo que quieres decir...-Le ordenó.

En ese instante, comenzó a sonar una canción muy conocida para Harleen.

-¿Te acuerdas de esta canción?... es TU canción...escucha...-Le dijo haciéndole seña de silencio.

En todo Arkham comenzó a sonar "Killing me softly".

-Nunca creíste que la escucharías en este instante, ¿No?.-Le dijo acercándose violentamente.
-¿Cómo sabes que esta era mi canción?.-
-¿No te acuerdas cuando comencé a hacer mis apariciones?... cuando estabas terminando psiquiatría... en tu auto... en el embotellamiento....-

Harleen recordó que esos días eran muy extraños... había conocido a Jack... y todo lo asociaba a el... Ese día iba a la universidad... y el embotellamiento era gigante, y comenzaron a pasar esa canción, que la amaba...
Y la canción se interrumpió por la radio... informando de los ataques del Joker, al cual aun no le conocían la cara... ni el nombre...
Y le había parecido ver a alguien en el espejo retrovisor, en su auto.

-Si... si te acuerdas... calabacita...-Le dijo el Joker acercándose a ella.

Harleen se estremeció... tenía nervios, pero no de que algo malo pasara... ella sentía que el nunca le haría daño... que el la quería... y la cuidaría, como ya había hecho una vez.

El Joker la tomó con la mano izquierda por la cintura, y con la derecha tomó su mano... se puso a bailar con ella, lentamente, dando vueltas en el lugar.

-Killing me softly with his song...(Matándome suavemente con su canción). – cantaba el Joker susurrandole al oído.

Harleen estaba empezando a dejarse llevar, dejaba que él la mueva como quisiera, mientras ella cerraba los ojos.

-Killing me softly with his hands...(Matándome suavemente con sus manos).- el Joker había cambiado la letra de la canción.

Harleen abrió los ojos como platos. Por primera vez sintió miedo estando con él.

-¿Qué pasa calabacita?... ¿Nunca has bailado con el diablo bajo la pálida luz de la luna?.-Le preguntó riendo eufóricamente a los gritos y tirándola contra la litera.

Harleen lo recordó... Jack le había hecho esa exacta misma pregunta. Y eso ya NO era una coincidencia.

-ME ENFERMA QUE SEAS COMO ELLOS, YO TE CREÍA DISTINTA, ¡DISTINTA!-le gritó el Joker ahorcándola con sus manos, y subiéndosele encima.
-No... Joker... para... yo...no... soy...como... ellos...-Harleen no podía respirar.
-CÁLLATE.-le gritó.- eres la misma basura que ellos.-
-No, por favor.- Harleen ya no podía respirar, ni articular palabras.

Todo su mundo se derrumbaba... su proceso con el Joker caía muy abajo, nada ni nadie iba a poder convencerlo de lo contrario, ella quería explicarle todo con respecto a Leeland y Strange, pero el no la oía, el solo la estrangulaba cada vez con más fuerza, sin dejar lugar a palabras ni explicaciones.
Se le había metido en la cabeza y nada ni nadie podría sacarlo de su mente, ni siquiera ella...


Y ella misma moriría, en ese mismo instante.