Maraton 2/x.
Casi no nos vimos entre clases, pero Niall me dio la oportunidad de llevarla de la escuela a casa. Cuando salió y me vio note que se sorprendió
-Hola –dije sonriendo -¿Lista para irte?
-¿Tú me vas a llevar? –una gran sonrisa se formó en su cara
-Tu hermano se fue antes, una amiga suya lo llevo, y tu carro se quedó aquí, pero yo vine en taxi, porque no encontré las llaves de mi auto. Teóricamente tú me llevaras a mí, pero yo manejare
-Llevo mis cosas al casillero y te alcanzo en el auto –dijo para irse corriendo a su casillero
Cuando nos subimos al carro el silencio lleno el lugar, ni ella ni yo hablamos. Así que decidí romper el hielo
-Y… ¿Tú y Scott se llevan mucho?
-Si –dijo sonriendo
-¿Son novios?
-No –rio suavemente –Solo amigos
-Sabes que le gustas… ¿no?
-¿Qué dices?
-Se nota que le gustas, además soy hombre, se cómo actuamos los hombres cuando nos gusta alguien…
-Si tú lo dices… -dijo ella riendo de nuevo –Y tú… cuéntame, ¿tienes novia?
-Tenía, la última que tuve era un horror, se llama Samantha, pero la anterior a Sam, ella si era hermosa, la amaba de verdad. Aun la amo, todo en ella es perfecto. La amo tal cual es, con sus defectos y virtudes. Ella es única.
-¿Todavía la frecuentas? –pregunto ella con una sonrisa tierna
-Si –dije aún más alegre
-Ella debe ser muy afortunada
-Lo es
-¿Y ella te corresponde?
-No lo sé –seguí manejando y ella se quedó callada observando la ventana, cuando ya estábamos cerca de su casa ella dijo algo, que no entendí, pero luego comprendí claramente
-¿Yo soy la chica no?, tu eres el Harry del que me hablo Scott
-Mira quien está en tu puerta –dije en vez de responder
-Scott –dijo un poco animada
Bajo del carro y corrió con Scott
Narra _______ {tn}
-Hola –dijo Scott sonriendo -¿El del carro era Harry?
-Si
-¿Por qué te viniste con él?
-No tenía auto, y le preste el mío
-Ósea que se llevó tu auto
-El de Niall
-¿Te gusta él?
-Pues, no sabía que Niall tuviera amigos tan guapos
-El solo está jugando contigo
-Pero él es Harry, el que me contaste
-No, es otro, que se fue a vivir a Noruega
-¿Qué?
-Sí, te lo juro
-¿Acabas de jurarme algo?
-Si –dijo – ¿Por qué?
-Tú nunca juras nada