𝐶𝑎𝑙𝑚 - 𝐽𝑒𝑟𝑟𝑖𝑒

9. She's Going To Die

Jade's Pov

- Adelante. - la puerta se abre dejándome ver un enorme ramo de rosas.

- ¿A quién crees que le gusten estas flores? - me paro y corro a ayudarle.

- ¡A mí! - exclamo abrazándolo.

Entramos en el consultorio y pone las flores en la mesa y se regresa para besarme.

- Tu cuñado ya tiene pareja para la cena. - informa.

- Me alegro por él. Estaba muy consternado. - le abrazo - Jamie, ¿ya hablaste con él?

- No, cariño, me temo que no he tenido oportunidad. - le miro con enojo.

- Eres su hermano, James, no hay nadie en quién se pueda apoyar más. Sé que algo le pasa y no te lo quiere decir, ya es hora de que le des pauta de confianza a pobre Mike.

- Lo sé, lo sé, lo lamento mucho. Prometo que lo haré pronto. - asegura.

- En ese caso toma las llaves del auto en este instante, estoy contigo cada día, no hará daño que vayas ahora mismo a verlo.

Frunce el ceño y lo miro desafiante. Suspira rendido y me besa de nuevo para ir a la puerta.

- No hace falta que regreses a cenar. - le aviso - Pasa todo lo que queda del día con él, por favor.

- Te quedarás sola, Jade.

- No será así, Jesy me pidió una cena así que aprovecharé el día. - asiente y abre la puerta.

- Bien, pásala bien, amor. Te llamo después. ¡Te amo! - no le respondo.

~♡~

Bajo del auto y lo cierro. Entro al restaurante y busco a Jesy con la mirada.

La encuentro en las últimas mesas y me acerco a ella rápido.

- Hola, Jade. - nos abrazamos y nos sentamos.

- ¿Qué tal el día? - le pregunto.

- Nada mal, con trabajo gracias a Dios. ¿Y el tuyo?

- Nah, sólo soporté a la señora Hastings 1 hora, fue una bendición.

- Por eso creo que no sobrevivirán en la vida de familia. - afirma con gracia.

- No te lo voy a negar, pero debo acostumbrarme.

- ¿Qué te hace seguir con todo esto? - pregunta por enésima vez en dos años.

- Jess...

- Oye, soy tu mejor amiga, ¿qué hace que no me lo digas?

- Ya te dije que es muy complicado. - respondo.

- Ajá... - me mira con impaciencia - Sé que es culpa de tu madre, no lo dudo.

Da justo en el clavo.

- Bien, bien, es por ella.

- ¿Empezaste la clínica con su dinero? ¿Te amenazó? - pregunta - Jade, pude haberte ayudado en eso, para eso estoy aquí yo, jamás te habría pedido algo así.

Me siento regañada y apenada, pero no son mis razones.

- No, Jesy, me temo que de haber sido económico hoy estaría con Perrie... - me lamento bajando la vista.

- ¿Entonces?

- Jess, no es fácil de decir. - siento mi voz quebrarse - Ella está enferma, hace dos años empezó su tratamiento, pero parece que por más que lo intento no consigo lo que quiero. - lloro. - Jesy, ahora más que nunca estoy segura de que va a partir.

Se para de su silla y viene a abrazarme. Siento que nos están mirando, pero recibir su abrazo me hace sentir liberada, por fin puedo llorar con seguridad.

Tengo miedo de todo lo que puede pasar antes o después de la muerte de mi madre y por fin decírselo a alguien más me hace sentir un peso menos.

Me duele admitirlo, pero ella morirá.