𝐶𝑎𝑙𝑚 - 𝐽𝑒𝑟𝑟𝑖𝑒

3. She Is Challenging Me

Jade's Pov

Alza la mano con molestia deteniendo mis palabras en el acto. La fuerza de su mirada me parece desconocida y tremendamente atractiva.

- He vivido 2 años lejos de ti, Jade, creo que puedo seguir así, márchate. Que tengas buen día.

Se gira con agilidad y sube las escaleras con la espalda recta. Se desaparece esa hermosa cabellera, ahora rosa.

Sus palabras me han dado en un buen punto. Después de dos años, el jodido nudo en la garganta vuelve a hacer su tan esperada aparición. Siento mis ojos arder por las lágrimas. Cuando la primera se desliza por mi mejilla siento como si ácido corriera por ella.

- Creo que ya dijo lo que necesitabas oír, Jeed. Lo lamento, pero no es bueno que insistas ahora. - me dice Jesy secando mi rostro - Será mejor que la dejes calmarse, cuando se enoja hace cosas de las que después se arrepiente.

Me siento abatida, más aun cuando resulta que Jesy la conoce mejor que yo.

- ¿Quién te crees que eres? - le pregunto enojada.

- Sólo intento ayudarlas, Jade. Ella no es como recuerdas, ha llegado hasta dónde está porque ha cambiado, ya no cede fácilmente, es demasiado perfeccionista y orgullosa, a decir verdad, creo que se parece a ti y eso no ayuda en nada. Sus personalidades chocan. Tú por un lado estarás sobre ella hasta que te haga caso, ella por el otro te mandará al carajo cuantas veces sean necesarias, todo eso se convertirá en un círculo vicioso y dañino para ustedes y cuantos las rodeamos. Te estoy dando el consejo de una amiga, Jade.

- ¿Amiga? Y ¿qué tal si te portas como tal, Jessica? Si eres mi amiga no intentarás frenarme de nada. - si mis ojos fueran pistolas, Jesy ya estaría totalmente agujerada.

- El problema es que mi lealtad está dividida entre ustedes, y siempre, como sabes, estoy del lado del más vulnerable. Para tu mala suerte, Perrie lo es. Toma las circunstancias como te plazca, Amelia, mi conciencia está tranquila porque ya intenté ayudarte. Salúdame a James.

Me mira con pena y cierra la puerta en mis narices.

~♡~

Cuando llego a casa encuentro a James sentado en el sofá con el teléfono en mano. Cierro la puerta y se para corriendo hacia mí.

- ¿En dónde estuviste? - pregunta preocupado mientras seca mi rostro con sus suaves manos.

- No quiero hablar... - respondo. Lo abrazo y me cubre con sus fuertes brazos.

- Está bien, no debes hacerlo, pero sabes que estoy para ti, amor. - sus palabras me hacen llorar de nuevo.

¿Cómo puedo hacerle esto? El me ama como nadie y yo sólo finjo hacerlo. He estado con él durante dos años mientras mi corazón le pertenece a ella, a Perrie. No sé qué otra cosa hacer, no puedo destruirle este último sueño a mi madre.

- Deberíamos arreglarnos, Jade, la cena es en un par de horas. - asiento intentando cambiar mi humor.

- Tienes razón. Iré a vestirme, pero ¿estás seguro que eso que me pondré te gusta? - sonríe y besa mi frente.

- Sabes que me encantas hasta en pijama. - me río y lo beso.

Camino a la habitación y me dispongo a cambiar mi ropa, la cena no será formal, por lo que me visto con normalidad. Ni siquiera me pongo en pensar si los doctores de la cena verán mi tatuaje.