¿Alguna vez te has puesto una mascara?
Era una de esas noches de hotel con una persona semi desconocida, ya estaba a punto de irme pero su voz desde mi espalda me forzó a conversar un rato.
-No podría explicarlo pero me molesta.
-¿Que es lo que te molesta?
-Ese algo, un je ne sais quoi, que tiene tu forma de ser, hay algo en ti que me hace sentir una atracción extraña, casi como si fueras para mi.
-Magia será, supongo yo.
-¿Crees en la magia?
-La verdad es que no, sin embargo, creo en las ilusiones. Enseguida vuelvo, voy a lavar mi mascara.
-¿Lavar tu que?
-Mi cara.
Las serpientes mudan su piel, los hombres mudamos nuestras mascaras. Aquí en esta pared las cuelgo todas, una vez fui un gran escritor, esta otra, la de las mejillas rosadas, en esta fui un hombre tímido que solo le interesaba encontrar a la mujer ideal, casi me sorprende como hay personas que se tragan eso. Esta de hoy es mi mascara numero cincuenta y nueve, esta fue particularmente fácil, casi un cliché. Un hombre de aspecto serio con mirada profunda, un buen sentido del humor proveniente de Internet, dos o tres videos de YouTube para saber los pasos básicos de su baile favorito, leí un poco sobre vinos sabiendo que a ella le gustaban, nada fuera del otro mundo. Me pregunto como será la mascara numero 60, como lo celebrare.
No toda mujer es apta para caer en una mascara. Una mujer sensible es mas débil, sin embargo, esta mucho mas alerta y necesitara confirmaciones constantes, las mascaras son estáticas, no tienen expresiones, no sienten dolor, no sienten empatía, una mujer triste notaria rápidamente la potación de mascara. Una presa fácil, es toda mujer aquella a la cual su conocimiento sea su perdición, es decir. No solo aplica en mujeres, sino también en todo ser ya que, todo aquel que se regocije de tener el mayor conocimiento, esta expuesto sin saberlo a ser el títere de alguien con mayor conocimiento que el. Una vez que el trabajo de la mascara esta completo, se descarta a la persona con la que se uso y si algo en el proceso salio mal o la mascara no fue la correcta se descarta ambos.
Tinder es un lugar excelente para reclutar mascaras, una foto con una remera de The Rolling Stones, ya que es algo universal y no resulta ofensivo para casi nadie y una breve descripción del físico y cosas básicas como altura, color de ojos, edad, etc.
Hace algunos días di match esta aplicación con una compañera de mi trabajo. Eso facilita mucho las cosas, porque a la hora de sumar puntos, hay pequeños detalles que yo ya los se de antemano, observen esta conversación.
-Hey Lou, que casualidad encontrarte aquí.
-Dan, si vaya casualidad, se podría decir que es un poco raro de todas formas.
-No veo por que debería serlo, ¿Como estas?
-Tienes razón. Bien, gracias por preguntarlo y tu ¿como estas?
-Bien aquí, escuchando el disco solista del vocalista de PXNDX mientras termino el trabajo para el supervisor.
-¿Escuchas PXNDX?, a mi me encanta. Sin embargo, debo admitir que el disco de pepe rompió mis esquemas, lo ame.
-Es verdad, fue fantástico.
Esta es una parte chistosa ya que solo por deducción entendí que hablaba del sujeto que yo había nombrado, honestamente no tenia ni idea que le decían pepe, solo había escuchado ese disco por encima, para ayudarme a sustentar la historia.
-Hace poco dio un concierto aquí en Buenos Aires, ¿fuiste a verlo?
-No pude, ese día tenia ya reservadas unas entradas a un evento de Anime local.
-¿Te gusta el Anime? vaya sorpresas me estoy dando contigo, te tenia completamente distinto.
-¿A ti también te gusta? que coincidencia. De hecho tengo un premio que obtuve en uno de los concursos ese día.
*Foto.*
-ow, es hermoso, yo quiero un peluche igual, ¿sabias que amo esa serie?
-Debo admitir que eso si lo sabia, vi tu llavero con la insignia de la protagonista jajaja.
-Ay no sabia que llamaba la atención eso jajaja.
Poco después arreglamos una charla de café en la que yo sabia que no debía intentar nada, y en una segunda salida a un cine local, consume la mascara numero 60 sin demasiado inconveniente. Siempre esta bueno, detrás de tantos inventos y mentiras, darle a la conversación una pizca de honestidad, ya que ella notara en un pequeño detalle tu atención por ella así como también demostraras una apariencia en la que tal vez se pueda confiar. Siempre ejerciendo una conversación dominante en la que tu guías al otro casi como un ratón en un laberinto.
Esta mañana recibí un mensaje de un nuevo match. Una mujer desconocida, sin descripción en su perfil y bastante agradable a la vista, parecía alegre, se veía como una perfecta artífice para el numero 61.
-Hey, buen día Dan.
-Buen día Camile. ¿Cómo estas?.
-Bien y vos ¿Cómo estas?. Hace bastante frió, para ser septiembre, ¿no te parece?
-Bien por suerte, la verdad que si, hace bastante frió. Sin embargo no me molesta, al contrario, me gusta el frió.
-Oh, a mi me encanta el frió, un poco de rock junto a la estufa y un chocolate o café caliente, algo como los Stones que parecen gustarte, ¿no es cierto?.
-Suena a un plan Excelente, y es verdad, realmente me gusta escuchar a los Stones.
-¿Cuál es tu color favorito?
-El rojo, y ¿el tuyo?
-Lo supuse, también, el rojo.
-¿Como lo supusiste?
-Intuición de mujer Jajaja.
Conversamos toda la noche y era chistoso ya que entre mas hablábamos menos creía saber de ella y mas vacío se encontraba mi anotador para la mascara. Arregle con ella para verla en una heladería local, así charlaríamos mas de cerca y nos conoceríamos mejor.
Llegado el día de la reunión, nos encontramos allí y para mi desgracia nos atendió una mujer con la que estuve hace mucho tiempo, ella lo noto al instante pero no pareció importarle, claramente parecía ser muy madura como para inmutarse por una chiquilinada como esa, ciertamente me resulto una gran mujer a la hora de conversar, concordamos en muchos gustos así como también descubrimos algunos nuevos. Quedamos nuevamente para el próximo día en ir a un cine a ver una película nueva de un clásico sobre Spiderman.
La película no fue la mejor, pero en el proceso conseguí un beso y con eso ya había valido la pena. Habíamos llegado a un hotel barato, ella no parecía ser una mujer interesada y eso claramente me convenía así como me gustaba. Fue una buena noche, seguimos conversando hasta quedarnos dormidos, yo no tenia ganas de irme, pero ella debía trabajar, prometimos intercambiar un mensaje para corroborar que cada quien llego correctamente a su casa pero cuando trate de enviarlo el match había sido cancelado. Debo admitir que fue indignante, nunca me habían cancelado un match, ni pensé que ocurriría en cierto punto hasta me sentí molesto, pero mas que nada triste. Por un segundo me alegre de estar usando una mascara, sin embargo, luego entendí que las mascaras no deberían sentir tristeza, que con ella nunca consagre correctamente una. Ella había dañado mi rostro y había logrado pegarse en el, lo había desfigurado arrancándole así la sonrisa y poniendo duda y tristeza en mis expresiones faciales. Mi mascara numero 61, fue mi propio rostro triste junto a una sensación de malestar así como de vació acompañada de una lección por la fuerza y es que hay mujeres capaces de llevar las mejores mascaras y no importa que tan bien hagas algo, siempre alguien lo puede hacer mejor si te descuidas.
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Respuestas a preguntas, Que nunca nadie hizo.
RandomMi obra consta de 30 capítulos independientes, exceptuando capítulos puntuales que compartirán un mismo espacio temporal o lugar, pero tendrán tramas alternas. Cada capítulo constará de una pregunta retorica y un cuento muy breve de acompañamiento...