Este relato no puede llamarse HIMYM (How I Met Your Mother), ya que ninguno de vosotros sois hijos mios (me niego a hacerme la prueba del ADN, solo por si acaso), asi que se llamará HIMIM (How I Met Ivon Martinez).
Todo empezó como muchas jugadas del destino, de la manera más insospechada. Mi amiga Montse y yo habíamos quedado un viernes para comer unos deliciosos huevos estrellados en La Bodegueta, un local de Barcelona famoso, entre otros, por ese plato.
Mientras la esperaba saboreaba una cerveza bien fresquita, intentando ordenar en mi mente todas las cosas que quería explicarle, para que no me salieran a borbotones en los cinco primeros minutos, ya que entonces ella se pasaría toda la comida con la pregunta de siempre "y tu, ¿que me cuentas?", y yo no sabría como retomar lo que ya le habría dicho en cinco minutos para vestirlo, detallarlo, ampliar sus fronteras y estarme una hora hablando de ello.
Levanté la vista de la jarra y la vi entrar en el local, vestida de blanco ibicenco con un foulard al cuello, ¿morado?, ¿lila?, ¿violeta?, ¿añil?, bueno, un color de esos, nunca los he sabido discernir, aunque sepa racionalmente que unos tienen más rojo y otros más azul. Me pasa lo mismo con el turquesa, ella dice que es un azul y yo que es un verde..., o al revés, que ahora no tengo ninguna turquesa delante para comprobarlo.
El caso es que no venía sola, sino con alguien que me presentó como su amiga Ivon. Ya me había hablado de ella algunas veces, una compañera de trabajo cubana que además de buen profesional era divertida. Lo que Montse no me había contado de su amiga hizo que cuando la miré a los ojos casi me tiro de cabeza en ellos. Si quedar con Montse, con la excusa de comer o tomar un café, ya era garantía de disfrutar cada minuto, comer, hablar y reir con dos bellas mujeres ingeniosas y ocurrentes fue algo inenarrable, y justamente por ello no haré una narración de ese día genial, solo os diré que sus gratos efectos me duraron el resto del fin de semana, tanto que el lunes, en lugar de I don't like Mondays, fui a la oficina tarareando It's a funny day.
A los dos dias recibí un correo electrónico de Montse diciéndome que Ivon había quedado encantada conmigo, que me encontraba muy "interesante" y "un buen tipo" (las comillas estaban en el mensaje). A mi, como comprendereis, me gustó mucho leer eso (aunque el significado de las comillas era una incógnita). Como cada cual tiene los complejos que tiene y no todos podemos ser Viggo Mortensen, le pregunté a mi amiga si Ivon había dicho algo más. No hubo una respuesta clara de Montse y por ello supuse que el silencio era elocuente.
Al cabo de un par de semanas, sin embargo, con un corto mensaje de esos que muchas veces envía en momentos en que necesita sentir que estoy a su lado, Montse me dejó en un estado mezcla de emocionado y asombrado, y sobre todo con una curiosidad tan grande que casi me dolía el órgano donde ésta reside (si no sabeis que órgano es, ni teneis curiosidad por saberlo, es que os falta el susodicho).
Lo que siguió sería largo de contar si lo hiciese en todo detalle, asi que lo resumiré en una especie de conversación a tres bandas:
Ivon a Montse: ...Gus no es guapo pero tiene "algo"...
Montse a si misma: ...pues yo voy y se lo cuento a Gus..., que me gusta jugar a liarla parda...
Montse a Gus: ..., que dice Ivon que no eres guapo pero tienes "algo"...
...el "algo" de Gus se pone firmes al leer el piropo (es un chico fácil), y su curiosidad se enciende (entre otras cosas..., y me refiero a su imaginación, malpensados), porque se sabe no-guapo, pero no sabía tuviese "nada" y ahora van y le dicen que tiene "algo", y no tiene ni la más repajolera idea de que narices puede ser ese "algo"..., por lo que decide investigar y acude a la fuente (no, no me refiero a la de agua).
Gus a Ivon: Oye..., preciosa..., que es un "algo"? ¿Donde lo tengo que nunca me lo he visto, en la espalda?
Ivon (vaya la que ha liado la Montse, es como la gatica de María Ramos, que tira la piedra y esconde la mano): Hummmm..., bueno..., pues..., como te lo diría..., ese "algo" que tu tienes es un BSH combinado con un LQNEM (¡Hala!, ya le he dado que pensar un rato)
Gus: Pos fale, pues yo te digo IEUP!!!
Ivon: Ya, pero tu más!!! (a saber lo que me habrá dicho)
Gus: A ver..., BSH+LQNEM..., ah..., claro..., ya se..., soy un Bromista Sin Hipérboles + un Ligón Que No Es Machito..., que..., ¿he acertado?
Ivon: Te estás acercando un poquito, estás medio tibiecitooooooooo, pero solo en el primero, si fueras por un minuto más caribeño y menos catalán resolverías el acertijoooooo...
Gus: ¿Caribeño yo? ¿Pero tú me has visto bien? A ver..., BSH, caribeño..., ¿Bailas Son, Hermano? No puede ser porque yo tengo dos piez izquierdos... Me tienes en un sinvivir, hoy no voy a dormir...
... por la mañana ...
Gus: Ivon, he estado toda la noche soñando con el puñetero BSH, palabras volando que se unían unas a otras un segundo y luego se soltaban, asi todo el rato. Aún recuerdo alguna de las locas, como la de que soy un Bribon Sin Hambicion, un Batracio Salido Hambriento, un Bestia Silbando Histerico..., ¡no!, ¡ya lo tengo!, ¡ya lo tengo!, la solución es que soy un Bromista Sin Hamor...
Ivon: Jajajajaja..., casi..., casi..., en realidad es Buen Sentido del Humor.
Gus: ¡Que bien! ¡Que bien!, Me gusta eso de BSH, y si es parte de mi "algo" pues mejor que mejor. Pero lo de LQNEM seguro que es Ligón Que Nos Excita a las Mujeres, verdad?
Ivon: Vaserqueno..., ese no lo adivinas ni con un mojito..., ni con dos mojitos..., ni con tres..., aunque si los mojitos me los bebo yo puede que adivines más de lo que yo misma querria...
Gus: Bueno, yo con BSH ya soy feliz, da igual si no adivino lo de LQNEM, pero sigo diciendote que IEUP, LQNEM (Lo Que No Es Mentira)
Ivon: Tas zumbao :-)
Gus: De nacimiento, y dicen que mejora con la edad. :-)
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Retales (but no re-tales)
Short StoryConjunto disjunto, asonante y difuso, de relatos y otros datos, micro-relatos, nano-poemas, y cualquier cosa que se me ocurra