-Te estaba esperando.- Dijo su padre a penas cruzó la puerta.
Nicolás caminó con miedo hacia el sillón, dónde su padre lo esperaba con una sonrisa.
-¿Que te pasó en la mejilla?
-Me golpearon.- La posibilidad de mentirle a su padre, era casi nula, ya que de una u otra forma, conseguía sacarle la verdad.
-¿Qué te dijo el weón?
-Maricón qliao.- Respondió Nicolás.
-Tiene razón.- Dijo con amargura, cruzándose de brazos.- Ven.
Fernando lo tomó del pelo y lo obligó a sentarse en el taburete de la cocina.
-Los maricones se dejan crecer el pelo Nicolás.
Nicolás asintió con miedo.
-Supongo que tu no quieres ser maricón, ¿cierto?- Su padre buscó algo entre las cajas que estaban en el piso de la cocina. Encontrando lo que quería, caminó hacia su hijo con una sonrisa.
Tomó con rudeza el cabello de Nicolás y pasó las tijeras sin pudor entre los cabellos de su hijo, mientras Nicolás cerraba los ojos, esperando que su padre termine luego con ese martirio.
-Te ves demasiado gay con esta chasquilla maraca.- Conectó la máquina para cortar el pelo y se la pasó por la cabeza, sin siquiera prestar atención a lo que estaba haciendo.
Cuando Nicolás terminó con el pelo hecho mierda, Fernando le dio una sonrisa cínica, para luego dejar las tijeras encima de la mesa.
-Limpiame aquí.- Ordenó.
Con los ojos llenos de lágrimas, Nicolás tomó la escoba y barrió toda la suciedad que dejó su padre en el piso.
-Bien.- Le sonrió con falsedad Fernando.- Puedes irte.
Corrió hacia su habitación antes de que su padre cambie de opinión.
****
-No es necesario mamá.- Dijo Jaime mientras se removía incómodo entre los cariñosos brazos de su madre.
-Pero mijito, si no me cuesta nada ir a dejarlo.
-Voy tarde.- Tomó su mochila y salió de su casa antes de que su madre lo rete por ir tan desabrigado.
Corrió un par de cuadras para hacer tiempo y luego hizo su caminata normal.
-¿Aquí es la reunión de fumadores compulsivos?- Preguntó una voz a sus espaldas.
-No, pero hay una reunión de idiotas en la esquina.- Contestó con odio.
-Oye, no venga a pelear, después de todo, tenemos un trabajo que hacer.- Dijo Nicolás, quien se acomodó el gorro del polerón en la cabeza.
-Sólo, déjame en paz.
-Sabes, estaba pensando en algunos temas para el ensayo.- Jugó con las mangas de su polerón y continuó.- Como "Hostilidad sin razón" o "Hombres extremadamente apuestos", si usamos el último tema, podríamos ponerme de ejemplo, ya sabes, para que el profesor sepa a que nos referimos.
-¿Siempre eres así de molesto?
-Sólo contigo.- Dijo Nicolás rápidamente.- Mierda, que gay sonó eso.
-Lo dices como si ser gay fuese malo.- Jaime miró a su acompañante y frunció el ceño.
-Porque lo es.- Contestó con nerviosismo.- Pero no me molestaría hacerme gay por ti.
-La gente no se hace gay.- Aclaró Jaime.
-Entonces debo de ser un caso especial.
-¿Te estás escuchando?, porque podría jurar que estás coqueteandome.
-Corrección, te estoy enamorando.
-Pues déjame decirte, que ni aunque fueses el último hombre del mundo, estaría contigo.- Soltó Jaime de manera hiriente.
Nicolás dejó de sonreír y bajó la mirada.
-Nos vemos después de clases.- Dijo Nicolás, yéndose por otro camino, alejándose de Jaime.
ESTÁS LEYENDO
Frío (Jainico) Jaidefinichon
FanfictionNicolás no sentía nada, su padre se encargó de eso. Jaime sentía demasiado, su abuela se encargó de eso. ~~~~ -¿Tienes algún problema con que te abraze? -¿Qué es esa mierda que siento de el pecho?- Preguntó Nicolás con el ceño fruncido. Jaime so...