¿Qué pasaría por tu cabeza si de un momento a otro tu vida da un giro extraordinario e inexplicable?
¿Si por cuestiones que no entiendes el tiempo tiene que retroceder y debes empezar de nuevo?
*EL TIEMPO QUE NOS SEPARA (Christopher Vélez)* by Elen...
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Abro los ojos de golpe y me siento de inmediato, por un momento asustado porque no sabía donde me encontraba. Reacciono al 100% y me percato de que aún sigo en el parque y ya casi está anocheciendo. Samantha no está por ningún lado, por lo visto se ha ido y solo noto un pequeño papel sobre mi mochila.
*No quise despertarte, te veías muy cansado.
Nos vemos después, Mechitas*
Sonrío por el mensaje y lo guardo en el bolsillo de mi pantalón.
Ahora tendría que correr a casa; mi mamá me iba a matar por desaparecerme toda la tarde y sin avisarle nada.
Llego agitado a la puerta y en cuanto voy a abrir alguien del otro lado se adelanta y lo hace. Es mi hermano Jonathan.
- ¡Ma, el desaparecido llegó! -grita y tanto mi lita como mi mami aparecen en un segundo con caras de alivio.
- ¿Dónde se supone que estabas, muchachito? Me tenías con el corazón en la mano -menciona mamá entre enojada y preocupada. - ¿Estás bien? -comienza a revisarme el rostro en busca de algo.
-Sí mami, estoy muy bien -digo sonriendo. Era gracioso cuando se ponía en el plan de madre sobre protectora. Antes solía enojarme pero ahora hasta cierto punto me gustaba. Estoy recuperando mucho tiempo que he perdido con mi familia desde que era parte de CNCO.
-Ves, está bien -comenta mi lita -mija, te dije que de seguro se había quedado con alguna noviecita.
-No estaba con ninguna novia, lita. Sólo con mi tutora, estábamos adelantando unas clases -miento para no dar detalles de nuestra fuga.
- ¿Con Samy?
-Sí, lita hermosa -respondo abrazándola por detrás y dándole un beso en la mejilla.
-Esa niña es tan linda y amable que no me pondría celosa de que te enamores de ella. Sinceramente ya me estaba cansando de esas chicas maleducadas y de la calle que te buscabas.
- ¿Cuáles chicas de la calle, lita? -pregunto gracioso. -Creo que te estás equivocando de nieto. Yo jamás he hecho eso.
-Nunca ha dicho nada tan cierto como eso -murmura Jonathan que se encontraba frente al tv.
-Para los dos va... Tu y Jonathan son igualitos -reniega y se va a la cocina murmurando.
-Ve a darte un baño y cambiarte, mi amor... En poco tiempo está la merienda.
