Una invitacion al parque

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La sra. Hamilton fue a la casa de Amelie para darle de comer, pero cuando llego vio que salio una chica desconocida para ella y la noto algo asustada.

–¿Le pasa algo señorita? -pregunta algo preocupada.

–E-ellos, e-estan... -dice Sarah mientras tiene la mirada abajo. La sra. Hamilton la toma del brazo y Sarah la voltea a ver.

–Diga me, ¿se encuentra bien?

–Hay.. dos...

–¿Hay dos que? por favor diga me para ayudarla.

–Hay dos cuerpos colgados en el árbol -dice Sarah, apuntando al patio trasero. La sra. Hamilton se da cuenta a lo que se refiere y le dice que le explicara todo.

–Nadie sabe por que están colgados -cuenta la sra. Hamilton -solo se que Amelie vino a mi casa y dijo que sus padres estaban haciendo adornos navideños en el árbol. Yo pensé que hacían adornos, no que ellos serian los adornos.

–Pero, ¿ella sabe que sus a padres están muertos? -pregunta Sarah mientras ve en dirección al arbol.

–No, ella no lo sabe -hace una pequeña pausa- mas bien, no lo quiere aceptar, ella dice que están vivos y que pronto bajaran del árbol. Incluso han querido llevarla a un orfanato, pero ella no quiere.

–Pobrecita -mira con tristeza a Amelie- pero, ¿por que no han quitado los cuerpos de ahí?

–Lo iban a hacer, pero nadie se anima, sienten que Amelie se pondría triste y pensara que sus padres la abandonaron -mira en dirección a la ventana- solo quiero que Amelie acepte la realidad y que este bien...

Minutos después Sarah se despide y antes de salir por la puerta, Amelie la detiene.

–¿Qué pasa Amelie? -pregunta Sarah al ver a Amelie que la tiene agarrada del brazo.

–¿Puedes venir a jugar conmigo otro día?

–Claro que si Amelie, ¿qué te parece si vamos al parque mañana?

–¡Si! -responde con una gran sonrisa.

AmelieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora