Treinta y uno.

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—¿Qué estas haciendo?

—Me largo.

Alex arrojaba su ropa sin cuidado a su mochila.

Ronnie estaba recuperándose en el hospital, seguía inconsciente pero los doctores afirmaron que despertaría, estaba bien.

En cuanto a Luke, últimamente sentía las pataditas de sus bebés, pero se limitaba a sonreír. ¿Qué pasaría cuando nacieran? Crecerán sin un padre, o peor aún, que sepan que su padre era un criminal que vendía a personas por internet al igual que armas y drogas. Y que también ha estado involucrado en asesinatos. No deben saber que ahora mismo esta pudriendose en la cárcel por el resto de su vida.

Apenas comía y como la mayoría de las noches lloraba hasta quedar seco.

Su vida no podía estar yendo peor.

—Alex no estas siendo razonable.

—¿Y tú lo fuiste alguna vez, Oliver?

Oliver dejo de insistir, resignandose, se sentó en una esquina de la cama de Alex viendo como metía la ropa en la mochila con furia. Volvería a su hogar de donde nunca debío de haber salido. Dolía estar enamorado de Ronnie y saber que uno de sus mejores amigos estaba apunto de tirarselo simplemente hizo que una punzada en su pecho apareciera. Traición era la palabra correcta.

—¿Cómo descubrieron el video? — preguntó mirando sus manos que descansaban en su regazo.

—Y aún tienes el descaro de preguntar. — dejó de empacar por un segundo para voltear a verlo. — Estas solo ahora junto con tu estúpido novio enfermo que casi mata a Ronnie, a tí ni siquiera te importó. Preferiste mil veces a Andy. A, también con un rubio deprimido apunto de tener a los bebés. ¿Te harás cargo? Supongo que si.

—Cuida lo que dices.

—Vete a la mierda. Arriesgamos la vida por tí, muchos de nosotros ahora están en la cárcel o muertos.

—Íbamos a morir de todas maneras si no lo intentábamos, deja de darle más vueltas, lo único que quieres es sacarme de quicio y vengarte por tocar algo que perteneció a tí. 

Apartó la mirada para acomodarse la mochila en la espalda, sostenía la manija de la puerta, estaba decidido a irse pero sus piernas no se movían. ¿Dejar a Ronnie o no dejarlo? Vamos el también había regresado con su esposa pero eso no justificaba el hecho de que su amigo aprovechara la situación, solo... Esta mal. 

—Tú no quieres irte. Estas dolido, solo piensa las cosas.

—Ya todo acabo, no me necesitas más. Cuídate Oliver.  Y cuídalos a ellos...

Sin más que decir, cerró la puerta y se marchó.

*

Bajo las escaleras para adentrarse a la antigua oficina de Michael. Los monitores estaban apagados y el silencio reinaba el lugar.

Se sentó en el escritorio con la cabeza baja, preguntandose lo mismo una y otra vez.

«¿Ahora qué?»

Tenía un novio al cual amaba con locura. Por fin había acabado con Ashley. Alissa no volvió a llamar, lo cual le preocupaba. Cuando Ronnie despertara lo mejor sería que se largara lo más pronto, Andy no soportaría verlo ahí.

—¿O-Oliver?

Se sobresaltó un poco, levanto la mirada para encontrarse con una bastante cansada y triste.

Tenía unas horribles ojeras y los labios resecos, su cabello estaba despeinado y su gran panza estaba presente.

—¿Pasa algo? ¿Te sientes mal?

Negó. Poco a poco se acercó para sentarse en una silla que quedaba en frente.

—Solo... Extraño a Michael. 

—Yo también pequeño.

—No creo poder soportarlo mucho, él jamás saldrá de ahí y mis hijos... No... No pueden saber, estarán decepcionados... — Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas. — No sabré que hacer con ellos, no sirvo para esto, nunca serví para nada.

Oliver colocó una mano en su hombro para consolarlo.

—Todo el mundo sirve para algo. Se que eres bueno en muchas cosas Luke, eres fuerte. Eres un chico muy valiente y realmente te agradezco por amar a Michael, gracias a tí pude verlo sonreír. Le enseñaste como amar, a sentir... Lo hiciste feliz. Hiciste todo lo que tenías que hacer, cumpliste. — limpió algunas lágrimas que recorrían la mejilla del rubio— Pero ahora, es momento de que lo dejes ir. Solo te lastimas y eso no es justo, ni para tí ni para tus bebés. No es sano. Él tiene que pagar lo que hizo, Michael sabía lo que pasaría, se lo busco. Ahora date a tí la oportunidad de ser feliz otra vez. Eres libre de él.

—¿S-Soy libre?

—Claro que si, él ya no podrá interponerse en nada que tenga que ver contigo. Conoce. Vive. — le dedico una cálida sonrisa.

Luke se levantó y abrazó a Oliver.

—Eso haré.— murmuró. Una vez acabado el abrazo inspeccionó por última vez la oficina de su ex novio para luego negar con una sonrisa e irse.

El silencio volvió.

Esto no podía continuar.

¿Por qué seguía sintiéndose tan solo?

Cuando se sentía de esa manera pensaba en su ángel. En lo mal que estaba, pero por alguna razón le encantaba. Le encanto ver como disparo hacía a Ashley. Y lo más raro, le ponía cuando se enojaba.

Si, se le ponía dura cuando Andy cambiaba de personalidad.

Ya era demasiado.

Era por su bien, por el bien de los dos.

Saco su celular y comenzó a investigar.

Hospital psiquiátrico.

—Lo siento Andy.

Cruel Venganza (Sysack)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora