MEANT TO BE ||Neji Hyūga||[1]

CAPITULO 14 | Amabilidad

No podía quitarme esa molesta sensación de mi estomago. No me gustaba pensar en todo lo que tuvo que pasar Naruto. Me enteré que Jiraiya-san lo estaba entrenando, era bueno, su poder aumentaría demasiado con su ayuda.

—¿Todo bien, _____? —me pregunto Kai, nos encontrábamos entrenando.

—Sí, todo bien 'ttebare .. —dije. Él se sentó a mi lado.

—¿Estas preocupada? —me preguntó, yo suspire y recargue mi cabeza en su hombro.

—Sólo quiero volver a casa .—dije, él se rió.

—Yo también... Konoha es... extraña. Pero prefiero nuestro pueblo rascuacho. —Reí ante como llamó a nuestra aldea.

Kai y yo nos conocimos cuando yo tenía 6. Kiro-san llegó con él, yo le llevaba frutas y fresas cuando se estaba recuperando, así es como nos hicimos amigos y prácticamente crecimos juntos.

—Sigues tú, ______ .—me llamó Ichidaiji, me levante y camine hasta el campo de batalla. —Bien, invoca a Dos.

—¿Dos? Ahhh, se refiere a Iguanamon.

—¿Iguanamon?

—Sí, ahora no es Dos, es Iguanamon, dattebare —dije e invoqué a Iguanamon, apareció en mi hombro.

—Cómo sea. Al firmar el contrato, tú e Iguanamon se volvieron uno solo, el es como una extensión de tu cuerpo. Pero, más que eso, puede ayudarte a regular tu chakra. Tu labor de hoy será mandar el chakra que usarías para Crear una barrera de sellado de cuatro esquinas.

—¿Ah? Ja ja ja, muy gracioso, ya en serio 'ttebare.

—No estoy bromeando _______, sabes que nunca lo hago —me dijo, ya lo sabía pero tenía fe. —Cuando te agotes, vienes, te doy algo de comer y continuas. ¿De acuerdo?

—Sí...

Y entonces empece, concentraba tanto chakra como fuera necesario y se lo enviaba a la pequeña iguana, la cual solo me miraba. Lo hice un aproximado de cuatro veces, pero ya tenia gana de vomitar y el sello me dolía.

—Me voy a vomitar... —murmuré.

—Dije hasta que te agotes, _______ —me dijo desde lejos. Seguí con lo mío y me levanté únicamente a tomar agua y me forzó a seguir. Sentía mi estomago arder y mi cuerpo temblar.

Tal vez tenía fiebre. Iguanamon incluso ya se había dormido. Sentía mi cuerpo temblar pero al mismo tiempo ardía. Sentía mi estomago revuelto y mi cuerpo entumido. No me podía levantar.

¿Así es cómo se sentía agotar tu chakra?

—Bien hecho, ______ —escuche a Ichidaiji. —Lo que sientes es tu cuerpo liberando el chakra acumulado, el chakra que estaba sellado, lo estamos dejando salir poco a poco para que tu cuerpo se acostumbre.

No dije nada, ya no podía hablar y tampoco detenerme hasta que él me lo indicara o sería severamente sermoneada.

—Puedes descansar —dijo y entonces me desmaye. O eso supongo, porque todo se puso negro.

NEJI

Estaba entrenando para mi combate, sería dentro de dos días. Había conseguido reducir el punto ciego de mi Byakugan.

Y entonces pude ver una pequeña red de chakra corriendo por los arboles hasta llegar a mí, confundido desactive mi byakugan y una iguana brincó a mi rostro.

—¡Qué demonios! —intentaba apartarla pero simplemente no lo lograba.

—¡Iguanamon, basta! —escuche a alguien gritar y entonces por fin me quitaron a esa iguana salvaje.

Me reincorporé intentando comprender que había pasado.

—¡Lo siento mucho Neji, de verdad! —algo dentro de mí se activo al escuchar su voz. Sacudí mi cabeza para regresarme a mí mismo.

—¿Por qué siempre que terminó en el piso apareces? —dije un poco divertido de la situación. Ella sonrió levemente, sentí aquella calidez en mi pecho al ver esa bella sonrisa.

—Tal vez estamos destinados 'ttebare. —comentó al ofrecerme su mano para ayudarme a levantarme. Mi corazón se aceleró al escuchar eso. ¿Un infarto?

Tome su mano y me ayudó a levantarme. Su mano era cálida y cómoda. Nuevamente sentí esa agitación en mi pecho. ¿Iba a morir?

—Iguanamon, discúlpate —le dijo a aquella iguana, el reptil volteó el rostro negándose a seguir sus instrucciones. —Fuiste grosero con Neji pídele perdón. —la iguana permaneció en aquella posición. Ella suspiró. —Neji, él es Iguanamon. Iguanamon, él es Neji.

No dije nada, sólo observe atentamente a aquella iguana y él a mí. ¿Me estaba amenazando?

—¿Qué hacías antes de que Iguanamon te atacará ferozmente? —me preguntó.

—Ah... estaba entrenando.

—¡Cierto! Las finales son en dos días. —dijo, se veía bastante relajada. —Te toca contra Naruto, ¿Verdad? —solo asentí. —Y... ¿Cómo está Hinata?

Me sorprendió su pregunta.

—Bien, gracias por preguntar —ella me sonrió de nuevo. Era como si su sonrisa quitara cualquier preocupación. ¿Era algo tipo de genjutsu o algo así? —¿Por qué te interesa tanto?

Parece que mi pregunta la sorprendió. No quise sonar grosero, simplemente me costaba entender porque era tan amable, pese a que al inicio siempre fui grosero y obstinado con ella.

Simplemente la escuche reír.

—Porque somos amigos —me dijo con un tono obvio, abrí mis ojos sorprendido.

¿Amigos? ¿Ella me consideraba su amigo? Me sorprendió. Creo que yo también consideraba cercanos a Lee y a Tenten, pero no sabía si ellos me consideraban su amigo, después de todo era hostil y grosero, incluso si no me daba cuenta. Pero ahora era diferente, porque ella era la que me consideraba su amigo.

Sentí una calidez inesperada en mi pecho y sonreí.

—Claro, somos amigos. —sonreí levemente y la sonrisa de ella se hizo aun más grande.

—¿Estas nervioso por el combate? —me dijo. Yo me reí.

—Naruto... es el peor estudiante de los graduados, tuvo suerte de llegar hasta las finales —dije.

—Ey —me llamó la atención divertida. —Naruto es un Uzumaki como yo, si dices eso estas insinuando que también soy débil. —dijo divertida sabiendo que lo insinuaba de manera sarcástica.

—No estoy diciendo eso, tonta —dije rodando los ojos, sabía que lo decía de manera sarcástica. Y entonces caí en cuenta... ¿Uzumaki? —No tienes nada que ver con él... —comenté.

—¿Oh? ¿No te lo había dicho? Naruto y yo somos primos 'ttebare —quedé sorprendido ante aquello. Claro, tenía mucho sentido.

—No, no me lo habías dicho, tonta —dije molesto. No ando adivinando quien es familia de quien, además ella apareció de la nada, nadie la conocía, ni siquiera sabíamos que existía la aldea de donde venía.

—Ah, perdón —respondió aún riendo. —Bueno, ahora lo sabes 'ttebare —dijo de manera sarcástica. —Pero no te preocupes, si pierdes te llevare a comer ramen, yo pago dattebare.

Me sentí ofendido.

—Ja, como si fuera a perder.

—Bueno, bueno, si ganas te llevare a comer ramen.

No pude evitar sonreír. Claro que iba a ganar.