MEANT TO BE ||Neji Hyūga||[1]

CAPITULO 23 | Misión de rescate

—Lo siento mucho, Neji. —me dijo Lee. Estábamos los dos observando la aldea, era bastante temprano, no había podido dormir.

Después de todo había sido rechazado. _______ nunca llegó. La espere ahí por horas... y nunca se apareció. Una acción dice más que mil palabras supongo.

Suspiré, sabía que era un posibilidad, pero sinceramente no pensé que me doliera tanto.

—Esta bien... bueno... Si es que no se puede morir de un corazón roto. —dije, él me miró preocupado y negué. Sí, dolía más de lo que pensaba.

Y entonces, desde arriba pudimos ver a Naruto, Shikamaru, Chouji y Shikamaru. Todos veían directamente a donde nos encontrábamos.

Ambos bajamos, todos se veían muy preocupados.

—Ayer. Sasuke Uchiha abandonó la aldea en busca de Orochimaru, va camino a la aldea del sonido y nuestra labor es detenerlo —me explicó. Aquello me sorprendió. —Y...

—Se llevaron a ______-Nee-san —lo interrumpió Naruto.

Abrí mis ojos con sorpresa, y sentí parte de mi mundo derrumbarse, claro, por eso no se apareció ayer. Ella hubiera ido, aunque sea para rechazarme, pero hubiera ido.

—Maldición. —dije, completamente enojado.

—Parece que dio pele —dijo Shikamaru. —Su iguana mascota alertó, al llegar al lugar donde se le vió por última vez, lo único que se encontró fue... —se aclaró la garganta —Fue sangre.

No lo dude más y partí junto con ellos. Nadie le pone un dedo encima a mi tomate.

Ahora estába tal vez apunto de morir. Y lo último que recordaba fue lo que le dije a aquel rubio tonto.

—Vayan —les dije. —Deben seguir. Yo me encargo de este tipo. —dije.

Ellos me veían dudosos.

—Naruto... sabes que Sasuke no me importa en lo mas mínimo —le dije. —Pero debes salvar a ______. Por favor... traela de vuelta —le suplique.

No importaba si yo moría ahora. Pude tomar la decisión de venir por mí mismo. Hice buenos amigos... Tenten, Lee, espero que ambos puedan convertirse en los ninjas que tanto desean ser.

Y ______... tenía tanto que decirle. Daría todo por verla una última vez... Ella me había convencido que podía elegir mi propio camino... me lo mostró... Había elegido mi camino con ella, y sólo esperaba que ella me eligiera.

Por favor _____, debes estar bien... Vuelve... sana y salva.

"_________"

—Mierda, no puedo detener el sangrado —escuchaba, intentaba abrir mis ojos pero era imposible.

¿Dónde estaba?

—¿Qué hacemos? ¡No se puede morir!

—¿Qué es más importante? ¿Ella o el chico Uchiha? —escuche otra voz. Era una chica.

—¿Tú crees que a Lord Orochimaru le va a interesar quien era más importante? ¡El pidió a los dos y le tenemos que llevar a los dos!

—Sí, pero solo uno de los dos llegara con vida, y lamento decirte que no será la chica.

Sentía mi cuerpo cansado y adolorido, pero no era debido a lo que me dieron, era debido a la perdida de sangre.

Abrí mis ojos, el chico de cabello azul me llevaba en brazos. Sentía mi abdomen caliente y siendo apretado, estaba vendada. Sí... fue una herida profunda, sin importar si sabían niinjutsu médico no iban a poder sanarla con facilidad. Sobre todo si detuve mi flujo de chakra.

Venía una chica de cabello rojo ¿Qué demonios? Debía de liberarme, nadie vendría ayudarme.

Decidí concentrarme en detener el sangrado concentrando mi propio chakra, y entonces llegó el momento indicado. Comencé a fingir que me estaba ahogando con mi propia sangre.

—Mierda, Tayuya, espera —dijo el de pelo azul que era quien me estaba cargando y finalmente me bajó, recargando en un árbol. —Maldita sea no te mueras..

—¿Me puedes repetir como mierda pasó esto? —dijo ella.

—Ya te dije, se apuñalo a sí misma, pensaba desangrarse y lo está logrando. —sentía como revisaba el vendaje, entreabrí mis ojos y vi su porta shurikens, era ahora o nunca. Tomé uno y los apuñale, logrando acertar en su hombro.

¡Ahora ______, corre y no te detengas!

Me dije a mí misma y comencé a correr. Me sentía mareada, no sé cuanta sangre he perdido y aún sentía mi cuerpo entumido, pero no sabía si a causa de la perdida de sangre o de... Y entonces, aquel chico de cabello azul apareció frente a mí.

—Tú, maldita niña —me dijo. Pude sentir a la chica pelirroja detrás de mí.

Hice un par de sellos. Era un justsu que aún no estaba listo, pero no sabía que hacer. Decidí atacar al chico de cabello azul, estaba débil por la herida, así que podría seguir corriendo.

—Arte de sellado: Jutsu barrera de cadenas —de mí salieron unas cadenas que lo rodearon y lo atraparon, comenzando así a absorber su chakra, la idea original era yo quedarme su chakra, pero debía seguir corriendo. Y así lo hice.

La chica venía detrás de mí, me costaba brincar, me iba a vomitar. La herida se había vuelto a abrir por el movimiento y entonces, perdí el equilibrio. Caí, intenté buscar el camino de vuelta, pero mi sentido de la orientación estaba inactivo en este momento.

Levántate, levántate... Por lo menos muere lejos de él...

La sentía acercarse a mí. Estaba concentrada en cerrar la herida en lo que pensaba como seguir huyendo y entonces su paso se detuvo. Voltee confundida y ahí estaba el chico piña.

—Parece que no eres tan rápida como creías —le dijo con flojera y se sorprendió al verme. —¿______? ¿Qué mierda te paso?

—Ah... un intento de suicidio fallido... —dije y me levanté. —¿Tú qué haces aquí?

—Se supone que... me enviaron a rescatarte, a ti y a Sasuke.

—¿Sasuke?

—Sasuke ya no puede ser salvado. Así que solo llevare a esa chica ante Orochimaru-sama.

—No, gracias. Paso. —dije. Me levanté y me coloqué a lado del chico piña. —¿En qué te ayudó?

—Me ayudarías enormemente volviendo a la aldea. —me dijo. Claro bro, como tu no tienes dos apuñaladas y has perdido medio litro de sangre. Fácil.

—Te ayudaré a acabar con ella.

—_______. Vuelve. Ahora mismo le conviene más a la aldea que vuelvas. Si Sasuke se va, sobreviviremos... Pero si Orochimaru te obtiene... sabes que no será un escenario bueno para nadie.

Suspiré. Sí, claro que sabia que tenía razón.

Y sin más comence a dar todo de mí para volver a la aldea. Cada paso me resultaba más difícil. Hasta que caminar se me volvió imposible... Bueno, al menos si muero... nadie tendrá mi chakra... Es un... ganar, ganar...

Mis ojos se cerraron y sentía como mi cuerpo estaba apunto de perder la consciencia, tal vez si lo hacía, de verdad jamás despertaría.

—¡La encontré! —escuche, y abrí levemente mis ojos, pero todo era borroso. Veía una silueta, era un hombre. Se estaba acercando a mí.

—¿Neji? —fue en la primera persona que pensé, y tal vez la que más deseará que fuera. No obtuve respuesta y simplemente ya no pude mantenerme más despierta. Ojalá sí fuera Neji...